Donde Todo Comenzó

56 5 7
                                    

La familia Kim, compuesta por Jhonn y Annie, era una pareja muy feliz junto a su hijo de 8 años Edward. Se puede decir que era una familia normal de aquella época ambos padres trabajaban para el gobierno en la área de desarrollo de nuevas tecnologias, su pequeño retoño era un niño normal, hasta que de repente empezó a sufrir ataques epilépticos de la nada lo que alarmó a la famlia ya que esto nunca había ocurrido antes y tampoco habían antecedentes de esta enfermedad en ambas familias, en ese estudio se descubrió también que el niño padecía de un envejecimiento progresivo de sus órganos internos y si esto seguía y no se encontraba un modo de tratarlo el niño iba a terminar por fallecer.

No era cualquier enfermedad ya que prácticamente cada órgano estaba involucrado. Los padres ambos al ser científicos reconocidos buscaron algún tratamiento, provaron con varios, en vez de haber mejoría empeoraba la situación del infante.

Dedicieron inventar una cura alguna inyección la cual tratara dicha enfermedad.
De un principio lo solicitaron al gobierno que le apoyarán en este proyecto siendo atendida su petición, solo un par de meses luego aparecieron más casos de niños afectados, hasta el momento no hay explicación alguna de tan rara enfermedad, todo aparenta de ser un nuevo virus que sólo afecta a infantes de entre los 4 a los 12 años de edad.

Al ser ya una pandemia, se forma un equipo especial para dirigir la busca de un antídoto para parar y curar dicha enfermedad siendo dirigida por los señores Kim.

Al ver que no hay cura, decide buscar una solución, esta concistia en inducir a su pequeño en un coma, en una cama frijorifica, conjelando así a su cuerpo en una capsula especial para despertarlo cuando hubiera cura alguna y así se hizo.

Incluso se creó una área de niños durmientes como se le atribuyó coloquialmente aquel nombre.

Ya han pasado 2 años y nada los padres se sienten vacíos, necesitan sentirse padres de nuevo ya que gran parte de la población infante se encuentran en un sueño eterno, monitoriado y controlado por una computadora de inteligencia artificial, le hace soñar lindos sueños a aquellos niños como si su vida siguiera igual y no se sientan solos y puedan interactuar entre ellos , era posible ya que su tecnología era altamente desarrollada.

Al no haber niños, la empresa Desire decide desarrollar un androide infantil el cual simulaba ser un niño real, el cual le ingresabas a su tarjeta de inteligente las vivencias y recuerdes del niño a suplantar , obvio era una copia digna, casi un clon de aquel chico o chica que yacía durmiendo.

El gobierno aprueba aquella idea pero antes se debe hacer las pruebas si son seguros y puedan satisfacer el deseo de las familias , los encargados de este estudio fueron los Kim también, dirigiendo ahora ambos proyectos.

Al estar listo el modelo de su pequeño Edward y verlo ante sus ojos era la misma sensación de ver a su hijo verdadero a tal punto de quererlo abrazarlo y besarlo - Mami, papi los quiero mucho - aquella frase producida por aquel androide rompió el corazón de aquellos, hace más de dos años que no escuchaban esa voz, entre lágrimas abrazaban al pequeño este sin comprender le decía - porque lloran si yo los quiero mucho - haciendo un pequeño puchero, era adorable.

Así pasaron los días y señanas, hasta terminar el primer mes de prueba, restando 2 más, era como si tener a su hijo, no había casi diferencia.
Solo 1 al ser un androide no podía comer, lo que costó mucho de un principio que lo comprendieran pero luego de un tiempo y explicarle lo que era lo comprendió, si le dijeron que era un androide pero a pesar de ello era parte de la familia ahora e incluso si despertará Edward iban a crecer como hermanos gemelos de ahora para adelante.

Terminó el período de prueba siendo un existo total y se crearon en masas estos androides.

Los parques y calles se volvieron a llenar de risas y padres felices de ver a sus ahora hijos jugar.

( A. I. ) Inteligencia Artificial ATEEZ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora