𝙬𝙤𝙢𝙖𝙣 𝙤𝙧 𝙢𝙖𝙣? ⌇ ᴶᵃᵉᴰᵒ

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˗ ˏˋ Doyoung ˎˊ˗

Era el primer día de clases en la universidad y Doyoung estaba nervioso, en las vacaciones había empezado con su transición de chica a chico, por lo que estaba nervioso, no quería que la gente le tratara de mala forma, solo quería ser aceptado, por suerte tenía a sus mejores amigos Johnny, Taeyong, Ten y Lucas, los cuales le cuidaban y protegían como si de un bebé fuera. 

La gente le miraban un poco extraño, pero más que por su aspecto era porque tenía a los chicos como una escolta que le cuidaban hasta por si el aire le hacía algo, sentía mucha pena ya que sabía que no era normal ver a un chico menudito y afeminado, cerca de varios chicos más altos y fuertes, sus mejillas estaban rojas por la vergüenza, pero debía acostumbrarse ya que desde ese día así serían las cosas y no podía decir nada ya que en si sus amigos lo cuidaban por miedo a que alguien le hiciera daño, como en la preparatoria. Al llegar a su salón suspiro un poco antes de voltear a ver a los más altos. 

— ¿Es necesario que todos me escolten hasta mi salón? ¿No solo puede ser uno? 

— Sabes que no precioso conejito, eres demasiado lindo y pequeño así que no podemos dejarte solo — Hablo Johnny, el cual tomó sus mejillas y se las apreté, haciendo que Doyoung hiciera un pequeño puchero con sus lindos labios rositas. 

— Además así nos aseguramos de que nadie quiera acercarse con alguna otra intención, eres demasiado bonito y no puedo pensar en que mi bebé tendría novio tan pronto, no te doy permiso hasta los 50 — Dramatiza Ten, el cual jalo su cuerpo y lo abrazo como si quisiera protegerlo de todo y hacia un sonido como si llorará.

— ¡Ya! ni siquiera soy tan lindo, mejor vayanse tengo clases y ustedes llegaran tarde —señaló a todos menos a Taeyong ya que con este tenía casi todas las clases, por suerte, porque no quería estar solo.

— Estará bien cuidado tranquilos, nos vemos a la hora del almuerzo. — Mencionó Taeyong antes de que tomara la mano del pequeño chico, haciendo que Doyoung se sonrojara, a él le gustaba Taeyong desde hace ya tiempo pero este parecía que solo le veía como a un hermanito al cual cuidar, por lo que se deprimía a veces, pero entendía y aceptaba que no era correspondido, mas porque no era alguien normal para muchas personas y no cualquiera sentiría algo por él. Los demás chicos se despidieron y se alejaron mientras Doyoung y Taeyong se dispusieron a entrar al salón, donde se sentaron juntos en unos de los asientos del frente y cerca de la ventana, el ajeno se dispuso a usar su celular un poco, así que un tanto aburrido busco algo que hacer mientras llegaba su profesor.

Suspiro un poco mirando a su alrededor un poco, intentando conocer los nuevos rostros de sus compañeros de clase, paseaba sus bonitos ojos por cada persona que se atravesaba en su vista hasta que sus ojos se toparon con los de un chico muy lindo, tenía unos ojos almendrados tan preciosos, observa con detalle sus rasgos y vaya que era guapo, sus mejillas se tiñeron de rojo cuando el ajeno le regaló una sonrisa con unos pequeños hoyuelos que le parecían adorables, apartó su mirada rápido y tomo el brazo de su amigo y se abrazó a este intentando controlar sus mejillas rojas, eso había sido raro y le había puesto muy nervioso.

— ¿Pasa algo, pequeño? — Escucho al ajeno por lo que le miro de reojo y negó rápidamente y solo se abrazó más al brazo ajeno. 

— No, solo estoy algo asustado porque hay mucha gente... 

— No tienes porque asustarte Doyoung, sabes que si alguien intenta algo estoy aquí para protegerte

— Lo sé...

Su conversación fue interrumpida ante la entrada de su profesor, las clases comenzaban, así que se acomodó en su asiento dispuesto a tomar sus clases, aun cuando a veces sentía una mirada en él haciendo que se pusiera un tanto nervioso, no le gustaba que le vieran porque pensaba que le juzgaban o sabían su secreto. 

˗ˏˋ Jaehyun ˎˊ˗

Nunca antes había sentido la necesidad de mirar a alguien, no hasta ese momento donde no podía dejar de mirar a aquel chico tan lindo que estaba a unas bancas de donde él, era tan pequeño, tan delicado y tenía unos rasgos tan lindos que hacen que sus ganas de verlo aumentaran, parecía un angelito tan puro por lo que sus ganas de protegerlo nacieron, tenía unos labios demasiado lindos al igual que sus mejillas rojizas, no podía creer que existirá un chico tan hermoso como lo era el pequeño chico, era algo afeminado pero eso le hacia más llamativo a sus ojos.  

Supo su nombre gracias al profesor, Doyoung, era un nombre lindo al igual que él, parecía que estaba siendo nada discreto con su mirada ya que el niño lindo se removía en su asiento y miraba de reojo por el salón, frunciendo ligeramente su ceño y haciendo un precioso puchero, se veía un tanto desconcertado y sabía que era su culpa, bajo su mirada a su cuaderno intentando no verse como un loco acosador, no lo era solo que el chico le llamaba tanto la atención que quería mirarlo por horas. 

Las clases fueron pasando y aunque no compartía todas con el dulce y pequeño Doyoung, pudo verlo en el comedor, aunque no le gusto tanto lo que veía, ya que el hermoso angelito estaba rodeado de cuatro hombres que lo cuidaban y tocaban con tanta naturalidad y el pequeño se dejaba y sonreía amplió, chasqueo la lengua un tanto molesto aunque no sabia el porque, solo decidió alejarse de la escena y irse a donde sus amigos intentando sacarse de la mente al niño lindo de pequeños labios rosas y piel blanca.