DIFFERENT. [LUNAY]

Chapter 24

Puerto Rico, Lunes 2:00 AM

𖧹

Me llevé el cigarrillo eléctrico a la boca dándole varias caladas viendo fijamente hacia la entrada de la casa aun apoyada en el capo de la Mercedes Benz, la brisa movía mi cabello y estaba tan inquieta que no podía dejar de mover las manos por más que lo intentara.

Apenas vi que la puerta se abrió dejándome ver a el vestido como si fuera a salir me quité ambos audífonos metiéndolos en el bolsillo de mi chaqueta a pesar de estar encendidos aún y posiblemente la música se seguía reproduciendo. Caminó hacia mí achinando los ojos por la brisa, su expresión era seria y no parecía mostrar ningún interés por hablar conmigo, pero a mi si me importaba.

—Qué sea rápido, me están esperando.—pidió en un tono bastante seco mirándome fijamente.

—¿A esta hora?.

—Si.

—Te ves cansado.—señalé tratando de cambiar de tema y cortar la tensión rápidamente, pero eso no parecía mejorar su actitud.

—Tu igual.—miró a ambos lados metiendo sus manos en el pantalón, chasqueo su lengua rascando su cuello con cierto desespero mientras que yo sentía que el nudo en mi garganta aumentaba y las palabras no salían, mis ideas estaban desordenadas. —¿Y...?

—Me voy en dos horas, Jefnier.

—¿Ya?.

—Si.—dije en un tono bajo sintiéndome patética, pero sabía que ya me había jodido, tenía que hacer un último intento, tenía esperanzas, no tenía claro que quería, pero sabía que no lo quería dejar, no de la forma tan fea en la que nos tratamos la mayor parte del tiempo.

—Mala mía por no conseguir primero el pasaje a Narnia y morirme por allá.—se disculpó en cierto tono de sarcasmo disfrazado de broma que ignoré, me limité a sonreír forzada sin mostrar mis dientes.

—No lo decía en serio, solo estaba encojonada ese día, era un juego.—me expliqué nerviosa—No pensaba eso en realidad yo solo te...

—Me odiabas.—terminó por mi.

—Y tú ahora me odias a mi.

Se rió divertido—. No lo hago.

—¿No?.

—Te lo dije una vez y lo reitero, el odio es un sentimiento y estoy tratando de no sentir naʼ por ti, es lo mas sano para mí.

Respire profundo apretando un poco mis dientes, sorbí mi nariz fumando del aparato—. Ya... Entiendo.

—Si no hay más naʼ que hablar yo creo que...

Lo interrumpí—¿En serio te vas a rendir tan fácil?.

—¿Rendirme?, ¿rendirme con qué, mami?—frunció el ceño confundido.

—Con lo nuestro.—nos señalé a ambos—¿Vas a limitarte a ignorarme y hacer como si nada hubiera pasado?.

—Es el plan.—admitió—¿Qué se hace?, tu, con tus acciones me dejaste más que claro que nunca hubo un nosotros, yo lo intente, no se pudo, me jodí, aprendí de eso y continúe, no me voy a poner a llorar.

—¿Así nada más?.

—Yo creo que ya deberíamos tratar de dejar de intentar hablar, no llegamos a ningún lado, solo hablamos de los mismo llegando al punto en que el tema en lo personal me aborrece.—espeto—Tu te vas y yo pronto tengo proyectos en otros países, so, en la isla no voy a estar, todo vuelve a la normalidad y listo.

—Yo siento que nos merecemos más.—balbuceé—tiene solución ¿no crees?.

—Estoy cansaʼo de lo mismo, Alex. De ese círculo vicioso tóxico que creamos sin querer.

—¿Y tu crees que yo no?, yo también lo estoy, pero aun así sé que si no hago nada ahora, me voy a arrepentir.

—Se te está cumpliendo lo que quieras, no sé porque no lo aprovechas.

—Porque las cosas cambiaron y lo sabes.—Tragué grueso—Y-yo puedo cambiar ¿si? Lo puedo intentar, puedo intentar ser algo bueno tanto para ti como para mi.—lo mire fijamente—Te necesito y sé que tu igual.

Se rió incrédulo negando con su cabeza, hizo el amago de avanzar, pero lo detuve agarrándole el brazo, me tomó por sorpresa la forma tan brusca con la que me empujó, terminé acorralada entre su cuerpo y mi carro teniendo su cara tan cerca, con una expresión tan intimidante que en vez de resultar excitante, sólo me aterraba.

No había rastro del tipo al que jodia porque parecía un niño.

—Escúchame ¿si?.

—¿Qué puñeta te voy a escuchar, ah?.—un sollozo salió de mi boca teniendo mis ojos cerrados—¿No escuchas lo tóxico y manipulador que se oye eso? ¡Eres una maldita manipuladora!, todo lo pones a tu conveniencia, todo tiene que ser cuando tu quieres y te importa una mierda los demás.

—¡Lo sé, cabrón! Lo sé.—susurré lo último temblorosa—Pero si no hago nada ahora me voy a arrepentir, juro que se pueden resolver las cosas. Hey, N-nos necesitamos...

—No, yo no te necesito.—hizo una corta pausa—Yo te quiero, no te necesito. Solo te quiero, odias el hecho de que una persona te quiera y no te necesite, quieres control, quieres que te necesite, para así tener garantía de que no te van a dejar sola como lo hicieron los hijos de puta de tus papás.—alegó viéndome fijamente, me hablaba tan cerca que me lastimaba aunque me estuviera diciendo la verdad.

Balbuceé varias veces tratando de expresarme, pero me limitaba a eso, y él me interrumpió.

—Eso no va a pasar, Alex. De mi parte no vas a tener esa garantía, simplemente te quiero, listo y créeme que aunque sea difícil, soy capaz de alejarme de ti solo para yo estar bien.

Desde ahí me había quedado claro que nos habíamos convertido sin querer, no en amigos, no en enemigos, simplemente en extraños con recuerdos.

𖧹 𖧹 𖧹

se supone que este era el final, nos vemos en disney :)