Tu me perteneces [taekook/Editada]

🍙03: La Cena🍙

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—Señor Jeon...

Con una reverencia oculto lo fastidiado que estaba por esa pequeña palabra, Señorito como si fuera un niño pequeño

—Hola...

Respondió al saludo del omega, era increíble el cómo se escuchaba su voz, irritante igual a la de su madre que seguro se creía toda una dama, igual a esa mujer

—Se llevarían bien...

Dijo en un susurro casi inaudible aunque creo que aquello llamó la atención del Omega que estaba frente a él

—Querido ofrecerles asiento a nuestros invitados -habló el señor Kim-

—Oh por supuesto -dijo con una sonrisa- pasen por aquí en unos minutos servirán la cena..

Todos pasaros a la mesa para esperar que la cena fuera servida. Todos hablaban plácidamente de cómo querían que fuera la boda mientras que los que realmente debían estar interesados, no pronunciaban ninguna palabra

—Las tartas de mi esposo son toda una maravilla, les va a encantar de eso estoy seguro -volvió a hablar el señor Kim tan orgulloso como siempre- por cierto su hijo es hermoso mucho más que en las fotografías, no es así hijo?

—Si es verdad un joven muy hermoso...

Escucharse convincente no era un problema ya que desde pequeño sabía cómo manejar las cosas a su conveniencia y cómo forjar una actitud manipuladora, lograba lo que quería, convencía a las personas para que le dieran lo que quisiera...

Todos menos él, su padrastro Damian Kim

Por el lado del pequeño omega, cuando se sentaron a la mesa solo pudo bajar la mirada, su pequeño lobo parecía complacido y emocionado por alguna razón, esto era algo que no le había pasado desde la última vez que sintió especial a ese alfa hace un par de años atrás

Mientras que el menor estaba sumido en sus pensamientos, uno de los Kim no podía despegar la mirada del pequeño omega

—Mi querido hijo solo tiene un problema. Cómo ven es algo callado... Solo necesita algo de tiempo y se acostumbrará

Se escuchó la voz del mayor llamando la atención de los dos jóvenes que aún se mantenían en silencio

— Nuestro pequeño es muy obediente no dará problemas, lo hemos educado bien...

Esta vez fue la irritante voz de la señora Jeon la que se escuchó dejando aún más indignado a su hijo, ellos sabían lo que él quería y solo por sus malditos prejuicios es que estaba en aquella situación, incluso le dolía mucho todo esto porque ciertos comentarios venían de su madre, una omega igual que e

¿Qué tuve que hacer para merecer esto?

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