Esta historia es un Remake de un fic que publique años atrás en fanfiction(alguien también lo publicó en Wattpad), de hecho fue la primera historia que escribí. Estuve pensando en hacer una nueva versión hace meses atrás, y bueno, aquí estamos XD
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-Viva Cristo rey- Personaje hablando
-(El café con leche es como el café... pero con leche)- Personaje pensando
-Muerte a los Uchihas- Kurama hablando
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Prólogo
-¡Gracias! ¡Que tengas un buen día!-
-Usted también, joven-
La puerta acristalada se cerró y una campanilla atada a la bisagra tintineó suavemente, inundando el lugar vacío, excepto por una persona.
-(Creo que este fue el último cliente del día)- Un hombre rubio que no aparentaba tener más de veinte años, soltó un suspiro, y estiró los brazos sobre su cabeza. Los huesos de su espalda lanzaron un crujido suave -(Es hora de cerrar)- Se quitó el delantal con su nombre escrito a mano "Naruto Uzumaki", y miró hacia afuera a través del ventanal de la tienda. La posición de la luz del sol en la calle le indicó que era última hora de la tarde. El sonido de las cigarras era más fuerte que nunca, pero el calor del día había empezado a menguar. Había poca gente paseando tranquilamente por las aceras en variadas direcciones, vestidas con ropas multicolores. Parejas, hombres y mujeres, ancianos, jóvenes, y había uno que otro niño que señalaba con una mano su tienda, pidiendo a sus padres que le compren un cornetto.
Sí... leíste bien, ahora era dueño de una tienda de panadería
-(Me pregunto qué pensaría ero-senin si me viera ahora)-
La cuarta guerra ninja le había afectado mucho, ya no era el mismo. Habían logrado derrotar a Madara, y a sellar a Kaguya, pero a un coste muy alto, una infinidad de gente había perdido la vida, entre ellos estaban sus amigos. Él, Sakura, Sasuke, Rock Lee, Chōji y Shikamaru eran los únicos sobrevivientes de los 12 novatos, Ino, Shino, Hinata, Neji, Tenten y Kiba estaban muertos, ni siquiera Iruka, Tsunade, Teuchi y la pequeña Hanabi habían logrado sobrevivir, las bijudamas lanzadas a quemarropa por el Juubi habían hecho estragos por todo el mundo.
La pérdida de sus amigos y de su figura paterna lo habían devastado bastante. Sakura trató de ayudarlo, y empezó una relación con él, una relación muy carnal. Estuvieron encerrados días y días en un dormitorio. Pero él no era un idiota, sabía que Sakura no lo amaba, ella solo estaba usando el sexo para aliviarle el dolor, para hacerle olvidar.
Todo fue inútil, y al final decidió abandonar por un largo tiempo las naciones elementales. No vio ningún problema en eso, su presencia ya no era necesaria allí, no ahora que la paz reinaba soberana.
Sasuke no tuvo ningún problema en ayudarle, y lo llevó a otra dimensión, más concretamente en un planeta cuyo nombre era Tierra. Durante tres años estuvo viajando por distintos lugares del planeta, conociendo muchas diversas culturas, y al final decidió establecerse en Japón, en Shinto Teito. Gracias a los ojos de su amigo, fue fácil integrarse en la sociedad nipona, y al cabo de unos meses se animó a abrir una tienda de panadería. En el transcurso de sus viajes había descubierto que tenía un talento especial para preparar dulces y tartas que fueran a la vez bonitas y deliciosas, así que decidió vivir de ello.
-(De seguro estaría muy feliz...)- Sonrió y luego negó con la cabeza para alejar los pensamientos -(Basta de pensar en el pasado)- Se acercó a la puerta, deslizó el cerrojo y giró el letrero a 'CERRADO'. Después encendió una pequeña radio que estaba al lado del cajero, y tarareando una música se dirigió hacia la parte trasera de la tienda.