Mi mejor amiga es una Directioner

Concierto

-Y bien, ya pueden decirme que haremos esta noche -dije sin ocultar el entusiasmo en mi voz.

Skyler y mi madre sonrieron tanto que no pude evitar emocionarme aún más.

- Sky te preparó una sorpresa, así que ve a ponerte el atuendo que dejé en tu cama, solo tienen dos horas para alistarse.

Dicho eso, mi madre se retiró.

Después de que Skyler y yo nos arreglaramos, subimos a su coche en dirección a mi "sorpresa".

Todo el camino se fue en risas y cantar canciones de la banda favorita de Sky, One Direction.

-¡ Let's take a ride! ¡Out in the cold air! ¡I know the way!- cantaba ella.

-¡ Why don't you go there, with me! - finalicé.

Skyler se bajó del coche dando saltitos de alegría, a lo que yo la seguí aun sin saber de que se trataba.

Un momento.

¡¿QUÉ?!

One Direction, On the Road Again Tour, Live Show Tonight.

- Skyler, ¿Qué es esto?- pregunté.

-¡Sorpresa!.

Bufé y sonreí.

Nos adentramos en la fila, listas para entrar al concierto.

-Psst, Lauren- me llamó mi frenética mejor amiga.

- ¿Mhm?.

Señaló una pequeña abertura en la estructura trasera de el estadio, lo suficientemente grande como para que alguien entrara.

Rodé los ojos y la seguí hasta ahí.

-Bien - susurró -Entra tu primero, después voy yo.

-Esto no es ni un poquito legal mujer- susurré muerta de la risa.

-Tienes diecinueve, esto tiene que ser épico- susurró con una gran, gran sonrisa.

-Claro, y si alguien viene ni te preocupes, puedes irte corriendo- dije con mi voz llena de ironía antes de entrar por aquel oscuro hoyo.

No veía nada, pero claro que escuché las voces de afuera.

-Señorita, esta área está prohibida.

- Emm c-claro, lo siento.

Pasos alejándose.

Estás muerta Skyler Evans.

Seguí gateando alrededor de cinco minutos por una especie de túneles hasta toparme con una puerta.
Retrocedí y choque con una pared, lo mismo en el otro lado.

No fue hasta ese momento en el que me di cuenta de lo reducido que era el espacio en el que me encontraba y el aire me empezó a faltar. La oscuridad empezó a desesperarme.

Comencé a patear como loca a la puerta frente a mí por la cual se colaba un poco de luz.

Nada. Nadie iba a abrir esa estúpida puerta por más que la golpeara, pero en esos momentos lo único que quería era salir de ese estúpido pasadizo e ir a mi casa.

Tres minutos después me quería morir. La desesperación era lo peor que había sentido en la vida, como si te arrancaran tu libertad y tu no pudieras hacer mas que intentar luchar por ella, sabiendo que no tendrás éxito.

Y es que así era.
¿Qué tal si me quedaba aquí por la noche? ¿O días?
Quería salir de ahí a como diera lugar.

Después todo lo que sentí fue como mis ojos llenos de lágrimas se cerraban,mi cabeza azotaba contra el pavimento y mi dedo meñique pasaba por debajo de la puerta, en un intento de escapar de ahí.

Oía voces a mi alrededor, pero me negaba a abrir los ojos y despertar encerrada aún.

Una suave mano acarició mi mejilla y mi frente.

-Vamos bonita, despierta.

Abrí los ojos lentamente, adaptándome a la luz a mi alrededor.

Unos azules y hermosos ojos me observaban, o mas bien examinaban.

-¿Hola?- pregunté.

El chico rubio soltó una tierna carcajada y acarició mi cabeza, la cual estaba en su regazo.

-No es la reacción que me esperaba de una chica que se deslizó por debajo del estadio para conocernos.

Fruncí el ceño y me senté.

-Yo no he hecho eso para conocerlos.

Su cara de confusión total me hizo reír un poco.

-Entonces, si no es mucho pedir, ¿me podrías explicar que hacías ahí? .

Sonreí con incomodidad.

-¿La versión inspiradora o la real?- pregunté.

-Ambas- respondió con una sonrisa.

-Bueno, teniendo una épica noche de cumpleaños y sufriendo un ataque de claustrofobia en el intento.

Comenzó a reír como loco.

-Por cierto, ¿como te llamas?.

-Lauren.

-Yo Niall, eso debió ser divertido- comentó.

-Pues creeme que eso fue lo peor que he vivido en mi vida, además me duele la cabeza- me quejé.

Se acercó a mi y tocó mi frente. Solté un quejido por el dolor.

Se alejó para ir por alguien que supiera curar y llegó con un chico alto de rizos que reconocía perfectamente.

-Harry Styles - dije con admiración.

Éste sonrió y se sentó junto a Niall en el sillón frente a mí.

-Con que tu eres la chica que quiere tener una épica noche de cumpleaños.

-La misma.

Unos minutos después Harry ya había curado mi raspada en la cabeza y Niall estaba, literalmente, acostado en mí.

Platicamos y platicamos hasta que un chico vino a decirles que solo les quedaban cinco minutos antes del show.

-Dime Lauren, ¿cual es el motivo general que te trajo aquí?.

Suspiré y me acomodé en el sofá.

-Bueno, mi mejor amiga es una Directioner.

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Hola!
Bien, ésta novela es algo que se me ocurrió por mera coincidencia hablando con una amiga, y ya saben, ¿¡Por qué no desarrollarla!?

Me está gustando mucho como va quedando la historia y espero que a ustedes también.

Antes de pensar que éste capitulo fue muy cliché, esperen al próximo no todo es lo que parece.

¡No olviden votar y comentar!

Las amo, no lo olviden (;

-C.