Déjame ir

Parte 1 pedazos rotos

Sofia

Siempre me pregunto por que simplemente por no tener dinero o una posición social o incluso una jodida cara bonita las cosas son tan injustas, todo me ha ido tan mal estos últimos 5 años desde que murió mi madre de cáncer nada de mi vida ha sido real, ni bueno creo que todo ha sido un teatro muy mal montado con el guionista mas malo de todos los tiempos o amenos así lo veo yo.

yo no soy como las demás que tienen su vida planeada, con todo el dinero del mundo en el banco con unos padres que las tratan como muñecas Barbie, sin tan solo ellas supieran que la vida es mas que maquillare y tener una sonrisa de muñecas, pero ellas no tienen la culpa de tener tantos privilegios, creo que mi furia viene desde que creí que todo lo que tenia era suficiente hasta que vi morir a mi madre sin recurso para ayudarla, la verdad es que vivíamos en un paraíso hasta que ella enfermo por trabajar tanto para mi y para mi hermana menor, luego de que ella muriera tuve que mal-pasar bastante para que mi hermana menor terminara sus estudios, anduvimos en la casa de toda nuestras familias siempre terminábamos huyendo por algo.

nuestra primera posada por llamarlo así fue en la casa de la abuela de nuestro padre, si teníamos un padre que nunca quisimos pedirle ayuda hasta ahora, nuestra queridisima abuela(notese mi sarcasmo) era una bruja, la encontré varias veces tratando le de pegar a mi hermana por sus estúpidos caprichos hasta que una tarde lluviosa decidimos escaparnos y refugiarnos en casa de mi tía margarita, margarita era una muy excelente persona la mas cariñosa después de mi madre en toda su enfermedad estuvo siempre ahí para ayudarnos, vivir con ella era un paraíso solo había una sola cosa su esposo era agresivo le pegaba en varias ocasiones, hasta que un día lo encontré pegando le en su habitación y hasta de la situación decidí llamar a la policía mi tía estaba destrozada por que su amado pero también odiado esposo estaría preso durante 20 años.

luego de unos meses viviendo las tres, tenia ese mal presentimiento de todo iba de maravilla demasiado bueno para ser verdad hasta que un día mi tía recibió una llamada de mi abuela en el estado de Texas que estaba muy enferma y necesitaba ayuda. a partir de ahí todo mi mundo se desmoronaba y solo podía pensar en mi hermanita menor katness, y en todo por lo que habíamos pasado ella solo tenia 16 años, tenia los ojos color canela una piel suave como la lana y unos cabellos largos hasta la cintura risados, solo podía pensar en una cosa protegerla hasta que consiguiera un buen hombre por que se lo prometí a mama en su lecho de muerte.

Mi tía margarita no nos dejo otra opción que llamarlo a el a mi padre, tome varios días para asimilar la idea hasta que tome valor y lo hice llame a fernando mi padre, no lo haría por el lo haría por katness ella no se merecía sufrir ella no.

-halo?

-ha ha ha halo?-solo escuchar su voz me revolvía el estomago y se me cortaron las palabras quería gritarle y decirle todo lo que había planeado en años pero solo pensaba en el bien de katness.

-Quien habla,?-solo habían pasado 7 años y ya el viejo se había olvidado de mi perfecto sofia, perfecto.-Sofia eres tu?

-supongo que si, lo que queda de ella.

-oh querida cuanto tiempo..-oh no no te hagas el estúpido ahora por favor- dime como están tu y tu hermana.

-Bien escucha padre-casi vomito con esa frase-la razón de mi repentina llamada es que no tenemos donde quedarnos necesitamos que nos des alojamiento por lo menos hasta que consiga trabajo y pueda mantenernos a mi y a katness.

-fernando lo pensó un instante escuche un resoplido hasta que respondió.-esta bien hija, se podrán quedar aquí todo lo que quieran marlene y yo no tendremos problema, hasta entonces.

-adiós...-no sentí deseos de decirle gracias por que el como quiera que sea era mi padre y tenia que velar por mi y por mi hermana pero nunca lo hizo, eso no se compara con todas las noches que nos despertamos extrañándolo, ademas sentí que eso serviría para su conciencia si es que tenia...

*********

entre a la habitación para darle la noticia a katness no sabia como iba a reaccionar estaba hecha un manojo de nervios, entre a su habitación y ahí estaba cantando una de sus canciones favoritas y saltando como loca mi hermana sabia como esconderse en su mundo para que nadie la hiriera.

cuando giro se sobresalto al verme y hizo una mueva y me jalo para que bailáramos, hasta que tropecé y nos caímos a la cama las dos echando carcajadas hasta que le solté por fin lo de irnos.-katness hable con papa el nos dará alojamiento en su casa..-por un momento katness frunció el ceño extrañada,ella sabia que no podía ni mencionar el nombre de mi padre sin hacer una mueca-katness se que es una locura pero lo necesitamos es nuestra única opción a menos que queramos regresar con la bruja de nuestra abuela.-katness asintió un poco mas relajada.

-sabes sofi, mama no se equivoco en pedirte que me cuidaras no hay nadie en este mundo tan valiente y responsable como tu y te prometo que no sera en vano,te quiero.

-oh vamos kat, sabes que aunque mama no me lo hubiese pedido te hubiera cuidado como quiera eres mi hermanita y la única que me alivia de tanta mierda, yo también te quiero.

seguimos hablando unas cuantas horas mas y así se quedo dormida en mi pecho, yo no podía dormir solo pensaba que en unas horas volvería a ver a el que algunas vez fue mi padre y eso hizo que me estremeciera solo de pensarlo, no sabia que esperar, hasta que concilie el sueño.