¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Se miraba una niña de once años, miraba atentamente el tren oscuro con unas líneas rojas, su hermano le tocó el hombre, ella no volteó a verlo.
Hogwarts, un Colegio de Magia y Hechicería, era un sueño para ella, ya que había esperado tanto ir, desde que su hermano subió al tren, desde ese entonces.
Tenía siete años, cuando vio a su hermano subir al tren, ella había estado en un cierto tiempo en un internado, le agradaba pero no tanto como Hogwarts.
Su hermano le había hablado lo grande que era y no solo eso, como había tenido amigos de la noche a la mañana.
Asi que estaba entusiasmada, su hermano ese año se había convertido en prefecto de su casa, Gryffindor.
Había leído tantos libros y ya sabía que casa quedaría. Estaba Gryffindor, Slytherin, Hufflepuff, Ravenclaw.
Cada uno tenía unos colores que le encantaba, pero sin duda alguna le gusta el amarillo.
—¡Hope!–miro a su hermano subiendo su maleta, su padre le ayudó a subir la maleta suya—No te entretengas mucho.–dijo, empezó a reirse por lo distraída que era
Por la ventana, se despidió de su madre y su padre.
—Hope, tengo que ir a una junta, luego iré con mis amigos, ¿te molesta?–pregunto y ella negó, tenía un poco de miedo al momento de no tener amigos y solo molestar a su hermano mayor
Se metió a un compartimiento y se sentó, no sabía cuántas personas se habían subido, pero eran muchas personas que iban directo a Hogwarts.
Ella sacó un libro y empezó a leerlo, menos de unos minutos, se abrió la puerta, volteó a ver.
Era un chico de cabello un poco largo, de unos ojos color grises, la chica se sintió un poco incómoda, en su túnica se podía ver que tenía una insignia de serpiente.
—¿Puedo sentarme?–la chica lo miro tímidamente
Sabia de la serpientes o más bien los de Slytherin, posiblemente el creí en la supremacía de la sangre, y era eso, no era pura sino mestiza por parte de su madre, su padre era puro mientras que su madre es una muggle.
—Si no es un problema para ti.–murmuró, el chico lo tomo como un si, se sentó al frente de la chica
Aunque la chica trataba de tener su mirada en el libro, el otro mantenía su mirada atentamente a la rubia.
Quería saber exactamente sobre esas lindas pecas y sus lindos ojos verdes. La chica cerro su libro y miro al chico, quería mantener una mirada sería, pero estaba incómoda y no solo eso nerviosa.
—¿Cual es tu nombre?–pregunto abiertamente el chico—Mi nombre es Regulus Black.–extendió su mano
—Jessica... Jessica Lupin.–dijo, pero no quería aceptar su mano, si el sabiera que ella una mestiza, le daría asco
