Camilo estuvo esperando toda su adolescencia casarse, muy aburrido realmente. A sus cortos 15 años de edad, antes de que todo el problema de la casita pasara su familia lo comprometió con otra chica, una chica con dones al igual que el. Realmente no...
En primera quiero aclarar que en este one shot Camilo tiene 18 años y este one shot contiene escenas explícitas, si no te gusta te puedes retirar y si te quedas pues espero que te guste.
Ahora si, comencemos Ꮺ
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- Ahg- Se quejo el de cabellos crespos mientras se revolvía el pelo con una mano.
- Vamos.. No puede ser tannn malo- animó su amigo mientras le ponía una mano en el hombro- igual la podemos pasar bien esta noche, como una despedida de soltero- bromeó pero solo recibió una mirada seria de Camilo- ya, ya, perdón.
Estaban en una colina arriba del pueblo, Camilo entró en depre por la noticia, realmente era un estorbo todo esto.
Flashback
- Si abuelita, ¿me llamaste?- Camilo entro con su sonrisa de siempre sentándose en el sillón de él cuarto de su abuela.
- Camilo mañana vas a conocer a tu prometida.
Rápidamente la cara de Camilo cambio, se quedó petrificado por un rato pero luego volvió a la normalidad.
- Pero podemos hacer algo ¿cierto?, yo no me quiero casar con esa chica, solo quiero vivir mi vida- soltó Camilo y su abuelita solo asintió.
- Dejamelo todo a mi, la abuela se encargará de todo, puedes ir a relajarte hijito.
Camilo se levantó y se fue de ahí, aunque ya habían hablado de esto seguía algo inseguro de que pasará, después de todo no sabía el futuro y tampoco quería investigarlo, simplemente lo que pasaría, pasará, y no se puede evitar. Siempre había pensado eso, además le aterraba verlo, por eso no quería ir con su tío Bruno.
Fin del flashback
Todo esto empezó a sus cortos 15 años de edad, antes de que sucediera todo lo de la casita, él acepto antes por la familia, ya que desde luego, el bienestar de la familia siempre es primero, pero luego de lo que sucedió ya no estaba seguro, pero confiaba en su abuela, sabía que ella podría arreglar eso.
- Atrapa!- grito un chico lanzando una tarjeta hacia Camilo.
- ¿Qué es esto?- la tarjeta era de color rojo con toques dorados.
- Las invitaciónes- los dos chicos lo miraron raro y el se sentó al lado de ellos- Hay una fiesta hoy en la noche cerca del lago, exactamente en las cabañas, dicen que será una fiesta muy buena.
- ¿Y como se supone que debamos fiarnos de eso?- preguntó el otro chico y ahí es cuando el otro sonrió.
- Mi amigo es uno de los organizadores, además, dicen que van a venir muchas chicas, algunas de acá y otras de otros lugares, yo no me lo perdería por nada.
