Quiero Ser Tu Chico Malo |Bryan Mouque|

Capítulo 4

La cuenta regresiva llego a cero y los chicos de CD9 salieron cantando de una plataforma.

En estos momentos quisiera tener el poder de hacerme invisible para que Bryan no pudiera verme aquí. Bajé la cabeza y mire al suelo, tengo que hacer algo para evitarlo.

Prácticamente así estuve la mitad del concierto, evitándolo. Sí él estaba del lado izquierdo del escenario yo volteaba a la derecha o viceversa, es decir, sí él estaba en el lado derecho yo volteaba hacia la izquierda.

Y cuando él se colocaba prácticamente frente a mí no tenía otra cosa que hacer que no fuera mirar el suelo.

Ya me imaginó como me estaré viendo ahí.

Las coders no se cansaban. En cada canción los acompañaban cantando a todo pulmón.

Si cualquier persona me viera haciendo lo que estoy haciendo - Que seguramente lo hacen - seguramente pensarían que yo no soy coder o que solo vengo porqué son famosos lo cual es una casi mentira no soy coder y no quiero estar aquí.

Aunque debo de admitir que ellos, todos, son muy guapos.

Bryan se encontraba del lado izquierdo del escenario y yo estaba volteando hacia todos lados excepto a esa dirección.

Mire mis zapatos después los de Carmen luego los de Ariana y por último los del guardia que se encontraba al frente mío y volvía a repetir.

Mire los zapatos de Ariana y luego los del guardia pero este se había movido mucho más hacia la izquierda.

Eso no es tan raro.

Levanté la cabeza algo extrañada y miré hacia enfrente.

Bryan estaba al frente mío acercándome su micrófono. Él al verme cambio de tener una gran sonrisa en su rostro a una sola línea sin ninguna expresión.

Él me miraba fijamente y yo no pude apartar la mirada de él.

Esto no es exactamente lo que quería.

Ariana, Carmen y otras chicas me empujaron y jalaron hacia atrás para poder acercarse más a Bryan.

¿Y ahora qué hago?

Él aún seguía mirándome fijamente.

Respiré profundo y camine hacia la salida lo más rápido que pude. Subí todas las escaleras y pase por una de las grandes puertas.

- ¡Dios! - exclamé estando ya afuera

Pase mis manos por mí cara y después mi cabello.

Mire a mi alrededor. Afuera estaba casi vacío solo unas cuantas personas estaban hablando y otras, es decir, solo una hablando por teléfono.

No iba a entrar.

No ahora.

No tan pronto.

Tengo que estar un tiempo aquí.

¡Tengo sed!

- ¿Qué va a llevar?- preguntó la chica cuando llegue al mostrador.

-Un refresco.

- ¿De qué sabor?

-Manzana- respondí después de ver los sabores

- ¿De qué tamaño?

- Uno chico.

-Tenga- Puso el vaso frente a mí -Son veinte pesos.

-Gracias- dije entregándole un billete de veinte.

Me gire y empecé a caminar sin rumbo alguno.

Me senté en una banca que encontré y le di un sorbo a mi refresco.

- ¿_____________?- preguntó alguien detrás de mí.

- ¡Gabriel!- grité sorprendida después de verlo. - ¿Qué haces aquí?

Bueno, no es tan común que un chico este en conciertos de bandas de chicos como esta a solo que acompañe a su hermanita o a alguien menor.

- No. ¿Qué haces tú aquí?- me devolvió la pregunta al mismo tiempo que se sentaba a un lado mío.

- ¿Recuerdas lo que te dije del concierto? - pregunté

-Si.

-Pues estoy aquí - dije sarcásticamente.

- ¿Eres fan?- preguntó.

-No- respondí rápidamente.

- ¿Entonces?- preguntó confundido.

-Vine a cuidar a mi hermana.

- ¿Qué edad tiene? ¿8?

-18.

- ¿¡18!?- preguntó sorprendido.

-Si.

- ¿De qué la cuidarás?- preguntó sarcástico.

- ¿Te han dicho qué haces muchas preguntas?- pregunté.

-No. Pero dime, ¿Por qué cuidarás a tu hermana?

-Bueno, la última vez que fue a conocer a youtuber, pues- hice una pausa breve. -Casi lo deja desnudo.

-Oh- dijo impresionado. - Sí, es mejor que la cuides- dijo más para sí mismo - ¿Y cómo fue que...

-No lo sé - lo interrumpí.

- Ah.- sonrió pensante. - ¿Qué tienes en el cuello?- preguntó refiriéndose a mi marca.

-Nada- dije posando mi mano en la marca -Solo fue un accidente.

- ¿En serio?- preguntó incrédulo.

-Si.- dije algo nerviosa.

-Está bien.- me miro -¿Quieres entrar?

- En realidad no.

-Entonces nos quedamos aquí y entramos antes de que termine el concierto- mencionó.

-Me parece una gran idea- Sonreí.

Y así me la pase la otra, bueno casi la otra mitad del concierto. Platicando con Gabriel.

Él me contó demasiadas cosas sobre su vida como su novia, su pasión por todo lo que tenga motor y ruedas, su departamento ya que vivía solo y su familia.

Yo le conté algo de mí vida, claro no tengo nada que contar en comparación con la suya.

-Ya va a terminar- dijo Gabriel mirando su reloj.

-Claro- me levante de la banca. -Vamos.

Gabriel se levantó y juntos caminamos a la puerta para poder entrar.

Gabriel tenía razón cuando bajábamos las escaleras ellos se estaban despidiendo.

-____________- me llamó Gabriel y voltee a verlo. -Yo tengo que irme haya dentro- apuntó detrás del escenario -Te veo ahí - dijo antes de irse.

Mire como entraba por la puerta y desaparecía de mi vista.