Moonlight (Renjun y tú)

~16~

Otro día más en el que no quería despertar.

Había conseguido empleo en la cafetería de la madre de Eunri, ya habían pasado tres meces desde que había comenzado a trabajar allí y ya se sentía cansada.
No tenía tiempo para nada, había estado descuidando mucho su relación con su novio lo cual le preocupaba, no quería que el la deje y menos dejarlo.

Tomo su mochila y salió de la casa sin saludar a nadie, nisiquiera a su hermano.

Fuera de su casa encontró a su novio en aquella motocicleta que no veía desde varios capítulos atrás.

- Young Mi - el chino se apresuró a abrazar a la menor y llenarla de besos en sus mejillas para luego mirarla - No te das una idea de lo que te extrañe- finalmente la besa.

La menor estaría mintiendo si dijera que no extraño mucho esos labios que antes solía probar s cada rato, pero gracias a el trabajo y la escuela no podía estar todo el tiempo que quisiera con Renjun, aunque el siempre entendió las razones por las cuales su novia no le daba atención estos días, pero debía admitir que se sentía abandonado por parte de la menor.

- Yo tambien te extrañe mucho Renjun-ie - tomo la mano de su novio - que te trae por aquí-

- pensé que al menos podía llevarte a la escuela - sonrió - me acompaña señorita - le ofreció su mano la cual tomo gustosamente.

Ambos se encaminaron hacia la moto y en un dos por tres llegaron a la escuela.

- Carajo - el chino tomo la mano de la ahora castaña Y la miro - ¿por que siento que después de esto no podremos vernos otra vez? - la castaña lo miro apenada y luego lo abrazo.

- Te juro que trataré de hacer todo lo posible para acomodar mis horarios y poder tener tiempo para nosotros - miro la cara de su novio y le sonrió - te amo más que a nada en el mundo y lo sabes - termino la frase haciendo puntitas para llegar a besarlo haciendo que el chino soltara una risita y finalmente se agachara un poco para dejar que su novia lo bese.

Ambos se despidieron y la castaña se adentro nuevamente al establecimiento donde su pesadilla iba a comenzar.

Termino el día y se dirigió a la cafetería de la Señora Kim.

- Hola Young Mi - dijo su amiga quien también trabajaba allí- Hoy es tu día de paga y con lo que ahorrarse estos meces podrás alquilar un departamento en mi edificio - ella se refería al mismo edificio donde ella se hospedaba junto con su madre.

Esos departamentos eran un sueño para la castaña, no eran muy lujosos pero eran lo suficiente para ella. Esa noticia la dejo más que feliz.

- Hay uno disponible en frente de mi casa - limpio el mostrador - la Señora Shin volvió a China y dejo su departamento en perfectas condiciones - le dio el café a el chico - ¿Qué dices Young Mi? - la menor asintió para luego decir que mañana en la tarde visitaría el lugar.

- Denme un americano por favor - la menor sintio - y tu número por favor - la chica lo miro y enseguida solto una sonrisa.

- Disculpe Señor tengo novio - dijo con una sonrisa mientras hacia la bebida.

- Debe ser un chico muy hermoso - movió su cabello haciendo que se vea demasiado hermoso para ser real - como se llama.

- Jaemin - la sonrisa en la cara del chino se fue por completo - es broma tonto - solto una risa mientras le entregaba la bebida a su novio - la casa invita - el chino negó y le dio su tarjeta.

- Esas cosas dejala para tu novio - la miro de mala gana y luego volvió a tomar su tarjeta mientras la castaña aguantaba la risa - adios señorita - se dio la media vuelta dispuesto a irse.

- Eunri cubreme cinco segundos - la chica asintió mientras que la menor corría detrás de el chino.

La castaña abrazo por detrás a el chino mientras que este trataba de ocultar su sonrisa.

- Mi novio no es Jazmín, mi novio es una persona muy comprensiva, dulce, Serena y sobre todo gentil - agradecía que el chino no estuviera viendo su cara por que está estaba toda roja - me comprende ante todo y por más de que yo sea insoportable el siempre busca la manera de no mandarme a la mierda, el siempre me gustó y estoy muy feliz de que el este conmigo - el chino contuvo sus lágrimas de manera profesional mientras se daba vuelta para ver el rostro rojo de su novia - te amo- solto la menor mientras sonreía.

Finalmente este la beso de la manera más dulce y tierna existente y por haber.

Tomo a la castaña de la cintura para unir la más a ella mientras que la más bajita rodeaba el cuello del chino con sus brazos mientras profundizaban el beso.

- Yo también te amo y mucho - dijo el chino dedicándole una sonrisa a la más bajita para luego darle otro beso corto - ve a trabajar nos vemos mañana - la castaña asintió mientras el más alto devolvía sus cabellos - nos vemos mañana pequeña lee.

La chica sonrió para luego volver a entrar a su trabajo.

Todo estaba acomodandose de a poco
O eso pensaba ella