Eclipse [Terminada]

Capitulo 3

Estaba pegada a ella, bajo el cielo del primer día, la luna estaba en el sol, y el sol acariciaba a la luna, ese día había un eclipse, el único eclipse de nuestra historia. - Éliette Abécassis.

Eclipse

11 de julio.

~Luna~

Esta mañana bajamos a desayunar al restaurante del hotel, y como era de costumbre mi madre estaba de muy mal humor, nada del menú le parecía.
Yo me limité a pedir un cóctel de camarones que era lo que más me apetecía en ese momento.
La chica de cabello rosa que nos atendía estaba un poco molesta y la entendía, lidiar con mi madre no era nada fácil.

La chica se retiró y tras unos minutos apareció un chico rubio para atender a mi madre.El pobre estaba temblando.

Después de desayunar subí a mi habitación, todavía era muy temprano para bajar a la piscina a leer, así que tomé un libro y salí al balcón sentándome en uno de esos sillones puff.

Pasé toda la mañana leyendo.

Casi nunca tenía con quién hablar, con mi madre era imposible tener una conversación sin acabar discutiendo a si que prefería hablar lo más mínimo con ella, con mi hermano era igual cuando hablamos es solo para pelear o insultarnos,la mayoría del tiempo el se la pasa con su amigo,literalmente pasan todo el tiempo juntos.

Con el único que puedo hablar con tranquilidad y mucha confianza es con mi padre, él es el único que me comprende y apoya sin importar nada.

Mi padre no sabe que mi madre me ha estado amenazando con lo de Felipe, no sé cómo se lo tome pero si él llegara a ponerse del lado de mamá y él me lo pidiera estoy segura que no me podría negar,a él no podría decirle que no.

Ya es casi mediodía, no sé si bajar ya a la piscina o quedarme a terminar el libro.
Creo que terminar el libro era una buena opción.

Escuché como alguien abría la puerta,mi madre entró con una mujer alta, delgada, demasiado elegante,se podría decir que ya era alguien mayor ya que se le podían notar las arrugas en su rostro y unas cuantas canas mezcladas entre su cabello castaño

Vaya, apesar de todo es muy guapa.

—Any, ella es una vieja amiga—me dijo señalando a la señora que se encontraba a su lado

Sabe que odio que me llame Any.

—Un gusto—le extendí la mano para saludarla, ella estrechó mi mano y sonrió

—El gusto es mío, tu madre me había dicho que eras hermosa pero no pensé que tanto

—Mi madre es una exagerada—solté—ya sabe cómo son todas las mamás.

Soltó una risa suave.

Mi madre volteó a verme—Pasare toda la tarde con ella—dijo—Así que sal, quédate aquí o haz lo que quieras

Mi madre no se preocupa por mi, le doy igual. Pero todo es diferente con mi hermano.

Yo solo asentí.

La señora se acercó para darme un beso en la mejilla, se despidieron y salieron de la habitación.

Con lo emocionada que se veía mi madre, podía estar segura que a ella no le emocionaba volver a ver a su amiga lo que la tenía así es el saber que tiene dinero.

Me volví a recostar en la cama, después de pensarlo un rato decidí bajar a la piscina,me puse mis tenis favoritos, tomé mi libro y unos lentes de sol.