snap

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—¡No sé por qué fue que no recibiste un don, pero esa non excusa para que sigas destruyendo a nuestra familia!

El silencio con tanta brutalidad, a su propia nieta, a quien había siempre tratado como una oveja negra, al igual que su tío Bruno, Mirabel no dijo nada, ni se atrevió a temblar, sus castaños se volvieron vidriosos, tal como reflejaron miedo y dolor, miro a la mujer frente a ella...a aquella desgraciada que la fulminaba con odio, como si fuera un desecho.

Todo se estaba volviendo tan oscuro por el clima, sentía la fría brisa pegar contra su piel y mover, empezó a notar como toda su familia estaba presente como la veían confundidos y hasta avergonzados.

Mirabel había tomado la iniciativa de irse, pero algo la detuvo, solo miro hacia abajo y apretó los puños, aun sintiendo aquellos repugnantes ojos de su abuela sobre ella.

Recordó el rechazo y la falta de querer.

Por 10 malditos años, sintiéndose como una sombra en aquella familia tan magnifica y mágica mientras que Alma solo la miraba con decepción, con poco cariño y decepcionan recordaba como antes de aquella noche donde iba a recibir su don, la amaba tanto pero después se ocultó, ¿solo la quería por ello acaso?,¿un don era lo que le daba valor?

Algo se había roto dentro de Mirabel...todo cometimiento de finalmente decirle a su abuela el cómo se sentía se había esfumado...estaba cansada de tenerla como monarca de aquella destruida familia.

Alguien tenía que derrumbarla de su trono.

—P-perdóname...siento no ser tan perfecta...-escupido con remordimiento y entente levanto la mirada.—¿eso es lo que tu deseas que fuera, no es así?

Su abuela vio como apretaba los puños y con ello grietas se abrían en las paredes, cosa que empezó a asustarla pero que se negó a demostrar.

—Nunca...voy a ser …lo suficientemente…buena para ti…verdad?-su va se rompió ante aquello ultimo.-nunca voy a poder demostrarte lo contrario…nunca dejaras de verme como un estorbo en tu vida…solo soy tu problema…no importa cuánto lo intente…

En ese momento, algo se había roto dentro de Mirabel…se había muerto la empatía en su ser, miro otra vez a su abuela y como mostraba duda y hasta miedo, ya no se iba a quedar calladla, todo se acabó…había abierto los ojos.

—Mirabel…-la regaño nuevamente la mayor.

—no importa cuanto lo intentemos…NINGUNO de nosotros.

—silencio…-regaño con una voz fría y apática, pero recibió otra respuesta, más violenta que la anterior.

—nunca seremos lo suficientemente buenos para ti, ¿verdad?.-apunto a sus dos hermanas, quienes bajaron la cabeza con miedo, abrazándose a sí mismas.-Luisa nunca será lo suficientemente fuerte, Sabella nunca será lo suficientemente perfecta para ti.-la apunto con un dedo de manera acusadora.-él tenía razón sobre ti…Tío Bruno dejo esta familia porque solo veías lo peor en él.

—¡a Bruno nunca le importó esta familia!.-exigió Alma con ira, tratando de callarla nuevamente, pero fue interrumpida por Mirabel, quien con la frente en alto sentencio.

—¡él AMA a esta familia, yo amo a esta familia!-puso su mano en su pecho, dándose énfasis, mientras sus ojos se volvían vidriosos y empezaba a temblar de la impotencia y con sus brazos señalo toda su familia, quienes asustados veían como aquella morena de rizos negros le hacia cara a Alma.- todos amamos a la familia!.-y la apunto nuevamente.-¡TU eres a la que no le importa! TÚ eres el monstruo que nos destruye.

-Mirabel!-apretó los dientes furiosa, no toleraba tamaña insolencia

-tu eres quien nos hace sentir rotos.-sin miedo le dio un empujón hacia atrás, dicha acción le arranco un jadeo a los presentes, inclusive Pepa tapo su boca con miedo y dejo lluvia caer sobre ella.

—silencio!-exigió Alma, más enojada que antes.

—tu eres la que nos tiene atados como muñeca.

—ya fue suficiente!

—¡exiges que tía Pepa se reprima para aparentar que todo esté bien allá afuera en lugar de escuchar como ella se siente!.-Pepa abrió los ojos como platos, pero enseguida su rostro pinto tristeza, Félix no tardo en consolarla, tomándola por sus hombros.-¡Mi madre no debería pedirte que me consideres igual de especial que al resto solo porque no tengo un don!

Agustín, quien ya estaba perplejo por lo que reclamaba su hija en ese momento, abrazo a Julieta viendo como Mirabel le hacía frente a la abuela Alma.

—¡suficiente!-Alma indico otra vez.

—¡Quieres que Camilo pretenda ser otras personas casi todo el tiempo a riesgo de que él pierda su propia identidad!¡Dolores no quiere oír todo el tiempo lo que está sucediendo, y aún así ha tenido ver y escuchar como gracias a tus expectativas con Isabela, el amor de su vida se aleja cada vez más! ¡Y le hiciste pensar a Antonio que no estarías orgullosa si él no recibía un don!.-a Mirabel le ardía la garganta al hablar con tanta violencia y euforia, más que sus lágrimas ahora quemaban sus mejillas, en cualquier momento se rompería, pero no iba terminar solo porque su cuerpo no resistía sus emociones

Camilo abrió sus ojos con temor puro, su respiración se agito y su pecho empezó a subir y a bajar, entendía perfectamente a lo que Mirabel se refería, desconcertado toca su rostro mirando su reflejo en el espejo de la entrada de la casa…tantas veces siendo alguien que no era, porque sabía que su abuela deseaba que fuera un ser perfecto y talentoso…siendo alguien que no era…¿Cómo podría Alma amarlo si le confesara que se sentía como una chica y un chico al mismo tiempo y que le gustaba mutar su cuerpo de una forma en la que le gustara y así dejaría de sentir esa sensación de incomodidad o angustia hacia aquel cuerpo que tenía?, Isabela mira impresionada a Dolores al entender que Mirabel se refería a Mariano, ahora entendía porque cada que los veía juntos, la miraba irse con tristeza y Pepa y Félix intercambiaron miradas al entender que Mirabel tenía razón respecto al don de Antonio, días antes de la llegada de su don, el pequeño había tenido pesadillas de aquel creciente miedo al rechazo.

—tu eres quien acaba con el encanto…¡tú eres la que derrumba nuestro hogar!-Mirabel afirmo.

—¡Nunca te atrevas...!.-iracunda, Alma la trato de callar, pero Mirabel nuevamente la detuvo.

—¡El milagro agoniza por culpa tuya!-escupió con odio.

La gota que derramo el vaso, todo lo que dijo corrió por su cabeza y la destruyo lentamente, Mirabel la silencio con brutalidad y aquel enojo se transformo en un rostro de dolor, remordimiento, culpa y terror, sus ojos estaban bien abiertos y su boca abierta, solo se podía describir como horror, se sentía tan vulnerable…le había dado donde más le dolía y los ojos de su familia sobre ella, solo la hizo sentirse humillada

Pero nada de lo que dijo era mentira…

Todo se mantuvo en silencio, Mirabel bajo su mirada, sollozando, pero se armó nuevamente a sí misma y apretó los puños mirando a su abuela destruida al igual que ella, se preparó para la última bala.

—…te odio…

Y justo cuando Alma estaba preparada para romper en llanto…el suelo se partió en dos.
























Bueno,ahi ta mi primer "fic" de encanto jsjsjs,le doy las gracias a Kary Piña en facebook por la idea de recrear esta escena(man,tenes mucho potencial como guinista neta♡).

Snap||°Mirabel One shot°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora