Fragmentos de un vínculo roto || TordTom

Capítulo 17

Estaba caminando en búsqueda de ese idiota que aveces no soporto, pareciera que las ganas de cojermelo se detenían cada vez que me sacaba de quicio.

Fui a ver al bar que siempre suele ir y no estaba, me detuve a pensar en donde posiblemente estaría, me fui a caminar al parque vagamente si lo llegara encontrar, para mi fortuna así era, pero me detuve a ver un poco más, estaba siendo coronado con flores por unos niños, quizás ya estaba borracho, me acerque.

— ¡Y eres así... el rey Thomas! –escuche de una pequeña, me detuve, quería ver que más pasaba.

— ¡Qué bien! –se levanto, y posó sus manos en su cadera– Vamos a ver como están las ovejas. –su tono era sobrio, lo sabía porque claro...me estuve aprovechando de el unas semanas.

— ¡Si si las ovejas!...¿hay ovejas? –contesto un niño, mirando tiernamente a Tom.

— Am... no lo sé... –me escondí entre un árbol al ver que se iba volteando a los lados, escuchando nuevamente su voz–, Mejor vayamos a jugar con los perros.

— ¡Si! –escuche a los varios niños, me asomé y ellos corrían directo a los perros, mientras Tom solo veía y se sentaba nuevamente en el césped, me le acerqué y me senté junto a él.

— Que lindo es jugar con los niños.

— Un poco... –lo mire y el me miro, levantándose de inmediato asustado–, Tu que haces... –me levanté con el.

— Vamos a casa, Tom. –lo tomé de las manos, ya iba a llevarme lo hasta que un niño se paró enfrente de mi.

— ¡No puedes llevártelo! –se cruzóó de brazos, iba pasar de el pero en eso todos los niños estaba ahí, con la misma expresión y brazos cruzados.

— ¿Por qué no? –pregunte, demandante.

— No puedes hasta pedirle matrimonio. –me quedé atónito, no era el único, también estaba así Tom pues lo mire de reojo.

— N..No lo haré. –solte a Tom, cruzando me de brazos.

— Entonces, no te lo llevarás. –mire como todos los pequeños abrazaron las piernas de Tom, impidiendo que caminara.

Frunci, iba quitando a los niños pero mientras quitaba uno, se iba regresando el que había quitado anteriormente.

— Eh...niños, tengo que irme... –finalmente hablo Tom, y yo asentí esperando que los niños así se alejaran, lo que no pasó.

— No puede irse Rey Thomas, sin usted, las tierras estarían en peligro, las ovejas tanto ríos se morirían, y sin otro rey, su reino no crecería. –solo miraba como la pequeña iba hablando, y yo con cara confusa.

— Por eso, no podemos permitirle irse con un extraño que probablemente es un plebeyo, si fuera de la realeza, no lo tomaría tan despiadadadamente sus bellas manos, alteza. –continuo un niño, yo estaba realmente sin palabras, como unos pequeños, niños tenían cierto vocabulario. Tom estaba igual que yo, quizás hasta peor.

— Basta de juegos, Tom es...mi...amm... –no terminé, pues un niño hablo.

— ¿Como osas hablarle así a nuestro rey? No tiene ni el mínimo conocimiento para dirigirse así. –lo que empezó siendo gracioso, ahora me esta fastidiando.