Infierno

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"Tu arderás en el infierno. Yo no. Porque soy rey. ¡Por la gracia de Dios!"

Sus largos días en el infierno ya le estaban pasando factura, y no, no es por ser el más viejo de ahí, de hecho, nadie lo puede comparar en fuerza y ese es su estatus, su estilo de vida, su día a día, ser el temible Satanás, Lucifer, Diablo, cómo le quieras llamar.

Lo que lo tenía frustrado era escuchar cómo los asquerosos humanos decían que él era horrible y lo retrataban de manera atroz, a diario se preguntaba si estaban bien o qué, malditos bastardos ¿Acaso no recuerdan que él fue de los ángeles más hermosos que pudo tener el reino de los cielos?

Suspiro profundo y se calmó, justo en ese momento entró su mejor amigo y sirviente.

— Mi señor. — Se dirigió a Lucifer el demonio recién llegado.

— KyungSoo. — Le sonrió el señor del infierno. — Veo que ya regresaste de tus tareas en el mundo humano. —

— Sí, ya lo he hecho y fueron desarrolladas con éxito mi señor. —

— Así me gusta ¿Hubo muchos ángeles? — Preguntó serio.

— Sí, pero nada que no haya podido controlar, creo que Dios está desesperado y manda ángeles recién salidos de entrenar. —

— Claro que ese maldito está desesperado, las posesiones y maldiciones han crecido exponencialmente. — Sonrió con cinismo el Demonio supremo. — Y desde que perdió a tres de sus ángeles más poderosos, Mefistófeles, Semyazza y Azazel, hemos logrado trabajar aún con más éxito. — Sonrió y lo miro. — ¿Verdad KyungSoo? ¿O debería decir Azazel? —

— Sabe qué cómo usted más se sienta cómodo me puede llamar. —

— Le quitas la diversión a todo. —

— Lo siento. —

— Y antes de que te vayas dime BaekHyun y deja las formalidades de lado, no lo quiero volver a repetir ¿Me entiendes? — Sus ojos cafés cambiaron dramáticamente de color, unos ojos amarillos decoraron su mirada por un segundo, haciendo que KyungSoo temblara.

— Sí BaekHyun. — Respondió rígido.

— Así me gusta. — Sonrió y sus ojos volvieron a su color fachada.

— Entonces me retiro mi señor. —

— Cómo gustes, yo voy a dar un paseo y a hablar un poco con mis demonios encargados, necesito revisar los últimos ataques. — Dijo y se colocó su chaqueta de cuero encima.

Una vez salió de su gran sala de trono se dirigió rumbo a ver a Caín, cómo ya sabrán Caín era el primogénito de Adán y Eva quien mató a su hermano menor Abel y quien cómo castigo divino recibió la famosa marca de Caín, quien se atreva a matarlo recibirá la ira de Dios. Sinceramente a veces no entendía cómo pensaba el viejo, lo castigó dándole protección, pero entonces la culpa perseguiría y consumiría a Caín, bueno eso se supone, pero... El Caín que él conoce no tiene ni un solo rastro de culpa.

— Caín, soy yo, BaekHyun. — Tocó la puerta y espero a que alguien hablara, diez segundos y no hubo respuesta. — Mira Caín si te andas en orgía otra vez en el centro de control, te juro qué...—

— ¿Juras qué? ¿Qué me vas a matar? No puedes. — Contesto altanero el dueño de la voz mientras abría la puerta. — Igual no estoy haciendo nada hoy. —

— Claro, cómo no estaba KyungSoo para hacerlo enojar. —

— No me gusta. —

— Ya llegó. —

Ángel Caído.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora