Los secretos que me conto mi viuda

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  Hasta que la muerte nos separe, claro, suena una a una promesa muy longeva, suena a algo inseparable; nada es eterno, todo se acaba, incluso las cosas que no tienen forma física, la alegría, la ira, la tristeza, y claro el amor.

Ojalá lo hubiera descubierto de otra manera, ojalá lo hubiera descubierto antes, ojalá lo hubiera descubierto mientras mi vida no se iba de mis manos, mientras el frio acero de aquella bala no atravesaba mi cráneo, mientras caía al suelo, y veía la cara de mi amada esposa llena de satisfacción, con un arma en la mano.

Solo me preguntaba ¿Qué hice mal? Creo que nunca encontrare una respuesta contundente ante aquella pregunta, solo podía ver como mi vida pasaba por mis ojos mientras mi vida escapaba de mi cuerpo.

Fui un chico que amaba la música, a mis padres les gustaba esa afición mía, pero, no querían que hiciera una vida de ella.

"El arte es bello sí, pero el arte no te dará de comer, no te mantendrá siempre, será mejor que busques algo más que hacer, como tu padre que maneja terrenos y casas"

Sin embargo, nunca deje que eso me detuviera, mientras según estudiaba economía, por la tarde me escapaba a conciertos y clases de piano, y algunas de guitarra, gracias a dios nunca estuvieron en contra de que comprara discos de música, en especial si era de mi mesada.

En mi adolescencia llegue a llamar la atención de algunos promotores y otros músicos, empecé en la música clásica y termine en el rock, no lo podía creer, mis padres me habrían matado, mi mamá siempre me veía feo cuando ponía mis discos de Bob Dylan, aunque se enojaba aún más cuando ponía los de KISS o los de Aerosmith, pero mi papá y yo siempre acostumbramos a escuchar de vez en cuando Queen y a Elton John.

Un día logré encontrar incluso un libro sobre como componer música, y comencé a componer mis canciones, mi papá me veía bien, mi madre no tanto.

Y entonces llego un día especial.

"Hijo, si he notado que te has escapado a tocadas y esas cosas, crees que no lo sé, pero antes de que creas que estoy en contra de eso, pues no es así, tienes el derecho a elegir, claro nosotros quisiéramos que siguieras cosas como economía y así porque sabemos que de eso si se puede vivir establemente, pero yo creo que mientras tu vivas como quieras y seas feliz, nosotros lo seremos, hablare con tu madre, y pues...solo acaba la carrera y sigue en ello"

Recuerdo que llore de felicidad ese día; a la mañana siguiente mi madre me vio algo mal, pero la lleve a un concierto en un teatro donde vio que esto era lo mío, y de ahí subí.

Creo que gracias a la educación tan formal que me dieron mis padres nunca me descontrolé, era un "Rockstar", pero no lo era, era raro, hasta que la conocí.

Vaya la estrella enclaustrada en un bar – vaya conque así me dicen, lo que uno se pierde al no salir – aún recuerdo ese día. Acababa de dar un espectáculo, estaba cansado, pero no quería volver a casa, vi un Bar abierto a la vuelta de una esquina y pare, quería un trago, no sé, aun no sé qué quería ese día creo que quería algo diferente en mi vida, y ella fue eso.

Era rebelde, alocada, rubia, con un buen cuerpo, a veces pienso que, si no hubiera sido lo que era, nunca hubiera tenido una mujer como ella.

Entonces quieres salir conmigo...jajajajaja – aún recuerdo su risa, me encantaban creo que junto con su sonrisa era lo que más me encantaba de ella, y ese día recuerdo que toda la cita estuvo riendo, hasta la deje en su casa ese día – ja...ja...perdona es que me pareció increíble que te fijaras en mí, quiero decir no me veo tu tipo, ósea tú te vez todo modoso, a pesar de ser un Rockero, no se te ve esa pinta, ese aura, se nota tu amor por aquella música, se nota en todo tu ser, en tu voz, en tus composiciones, en tus melodías, en tu aura sobre el escenario, no sé si soy para ti más que nada – sé que no tengo la pinta, pero de verdad quiero estar contigo y no creo que sea mentira.

Y entonces nos casamos, nunca tuvimos hijos, pues casi nunca estábamos en un solo lugar, siempre la llevé a mis giras, siempre estuvo conmigo cuando compuse cada canción.

Aún recuerdo aquellas baladas que compuse para ella, cada lagrima de felicidad que soltaba cuando se las cantaba, ya sea en aquellos estadios llenos de gente, o en los ensayos, en aquellos momentos en el autobús mientras viajábamos, y entonces...

"Quiero compartirles algo, quiero decirles que me tomare un tiempo de descanso. Hoy fue mi último espectáculo, quiero dedicar algo de tiempo a mí y a mi esposa, pero los volveré a ver"

Antes por estar siempre moviendo solo tenía una casa algo grande, y después nos mudamos a una mansión, tenía muchas habitaciones, que algunas estaban vacías, las queríamos llenar, pero nunca pudimos, así fueron cinco años.

Creo que, si algo fue la razón de esto, fue porque tenía a un animal salvaje enjaulado, la recuerdo ver la ventana, sintiéndose como detrás de unos barrotes de oro, realmente nunca supimos porque no se daba ninguno de nuestros intentos, aunque disfrutábamos mucho haciendo el intento.

En un punto comenzó a salir bastante, al preguntare algunas veces me decía que con sus amigas; yo entendía, sabía que no podía tenerla todo el día encerrada, yo no era de salir, así que muchas veces se iba sola, esos días mi mente me atormentaba porque salía tan linda, que tenía miedo que alguien me la quitara.

Tal vez ese es en parte el motivo de esto, pero la abría dejado ir si ella quería, no se porque hizo esto, ella era libre de irse cuando quisiera.

O quizá...cierto, al no tener hijos todo iría a ella, por eso decidió acabar con mi vida, vaya es horrible pensar eso, después de todo la amaba tanto, y recuerdo que al inicio todo era muy mutuo, ambos nos amábamos, incluso aun con el "encierro" todo iba bien, todo se veía bien.

Seguí viendo mi vida a través de mis ojos, hasta que llegué a ese momento, seguía inmóvil, mi vida se escapaba, y mi cabeza ya había caído al suelo, rebotando y volviendo a caer, mi vista se nublaba y apenas sentía el piso suave por la alfombra.

Y entonces sentí algo en mi oído, ella me susurraba algo:

"Esto no es nada personal amor, de verdad si te quería, pero no eras mi tipo, además también tenía mis secretos guardados..."

Sentía que me seguía susurrando cosas, probablemente me susurraba sus secretos, pero apenas podía distinguir palabras, y al terminar sentí como me dio un beso, dejo un papel a lado mío y puso en mi mano el arma con la que me disparo.

Y entonces morí, a manos de mi mujer, a manos de la mujer que amaba, es triste pensar en ello, al final...la muerte realmente nos separó.

Los secretos que me conto mi viudaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora