Ella es hija de Muggles más bien una familia adinera en el mundo no mágico.
A sus 14 años recibió una carta donde supuestamente había Sido aceptada en un colegio de magia, ella creyendo que era una broma no le prestó atención hasta la visita deo mis...
Estaba en mi clase de biología, era sumamente aburrido y más por la profesora Marianne Smith, quien no hace mucho se divorcio. Por lo cual se había vuelto más estricta con sus trabajos y tareas, además se desquitaba con nosotros
Marianne: ¡Pongan atención en mi clase!
Ella dió un golpe con su vara en el escritorio botando las hojas de nuestros exámenes. Todos dimos un salto en nuestro lugar al verla exaltarse, así que no dudamos en hacer caso a sus gritos. Por fin había terminado sus dos torturosas horas de clase, así que era hora de ir a casa, tomé mis cosas y sin más salí del colegio y así abrir mi paraguas...
Tn: seguro su vuelo se retraso
Mire el reloj en mi muñeca al estar a una cuadra cerca de mi casa, mis padres habían salido hace un mes de Inglaterra por negocios, así que me quedé sola en casa. Al llegar cheque el buzón dónde habían un montón de cartas, entre a la casa después de cerrar el portón y así caminar hasta rodear la fuente que teníamos, entre en la casa cerré mi paraguas y después la puerta
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Mayordomo: bienvenida a casa señorita Tn
Tn: gracias Alfred
El tomo mi paraguas colocándolo en su lugar, después me ayudó con mi mochila y las cartas las cuales puso frente a la mesa de centro en la sala. Fui a mi habitación y después de haberme quitado mi uniforme, fui al comedor donde Selene me sirvió, después de degustar todo fui a la sala donde tomé la correspondencia y ais separarla.
Tn: ¿Para mí?
Tomé aquella carta de aspecto viejo, y un sello de color rojo con un logo algo raro... Di vuelta a esta y solo decía mi nombre y dirección, que raro... La abrí delicadamente y sin más empecé a leerla, está decía que había diodo aceptada en un colegio de magia y hechicería llamado Hogwarts
Tn: debe ser una broma
Pensando que se trataba de una mala jugada tomé la carta para aplastarla y lanzarla al fuego, el resto de correspondencia lo lleve al despacho de mi padre y fui a mi habitación para hacer mi tarea mientras escuchaba música. . . . . . . . . . Había pasado un par de semas desde aquella carta y debo decir que estás no paraba de llegar, ya arta de esa mala broma, ordene a todos que si veían una carta similar la quemarán a lo que por fortuna no tuve que mirarlas. De todos modos sucesos extraños habían estado asustandome. Cómo por ejemplo la semana pasada justo un día después de haber recibido la carta, la maestra Marianne me había echo enojar al calificar mal mi trabajo, por lo que su ropa se incendio de la nada... Estaba asustada por lo que había sucedido, pero por fortuna no le causó quemaduras graves, solo unas leves, pero estaría de incapacidad. Después de eso un grupo de chicas empezaron a molestarme por qué Seth el capitán del equipo de fútbol me invitó a salir, así que ellas esperaron por mi al salir y comenzaron a hostigarme, eso me enfureció más que con solo levantar mi mano ellas cayeron al suelo quejándose del dolor. Igual sin querer había lanzado a un compañero que me había estado acosando, este sufrió una fractura en el brazo, lo mismo paso con unos ladrones de apenas antier, ellos habían querido robarme pero con solo pensar que ellos se murieran lo hicieron. Ellos después de quitarme todo, corrieron un par de metros cuando cayeron al suelo inertes. Asustada y nerviosa tomé mis cosas y salí corriendo hasta mi casa, no había dicho a nadie sobre esto pero mis padres ya empezaban a sospechar debido a las quejas de mis profesores y las cartas de la directora Medina.
Cloe: Tn baja un momento
Ella entro a mi habitación sin tocar a lo que me asusté pues nunca había echo eso. Siempre manteniamos ese respeto hacia las cosas del otro, mire la puerta donde minutos antes mi madre había salido, estaba confundida y nerviosa a la vez. Quizás sería transferida de colegio, o tal vez nos mudariamos a otro lado por mi culpa.
Tn: ¿Sucede algo?
Entre a la sala donde estaban mis padres sentados frente a un hombre ya mayor, su cabello largo y blanco junto aquella barba tan larga, y esos lentes en forma de media luna que me inspeccionan como si hubiese encontrado un tesoro, me dejó confundida
Christian: si, siéntate
Mi padre se notaba más serio de lo normal, digo, el siempre había Sido de ese tipo de personas que no expresaba sus emociones, pero con nosotras si lo hacía, y ahora que no quitaba ese ceño fruncido me dió miedo de cierta forma, mi madre tenía un rastro de lágrimas por su mejillas y una caja de pañuelos frente a ella.
Tn: ¿Está todo bien?
Me senté en un sillón individual justo en medio de mis padres y aquel señor, miadre al escucharme decir aquellas palabras soltó a llorar desconsoladamente por lo que mi padre la abrazo para intentar calmarla. Mire aquella acción con preocupación, para después mirar al señor que en ningún momento había dejado de mirarme haciéndome sentir incómoda
Christian: ¿Por qué nunca nos dijiste de la existencia de la cartas?
Tn: ¿Disculpa?
Estaba confundida, que quería decir con eso. El saco de su bolsillo un sobre color amarillento con un sello en color rojo, de inmediato supe a qué carta se refería, el la dejo en la mesa frente a mi... Lo mire con arrepentimiento pues sabía que estaba enojado por no haberle dicho nada sobre aquella broma
Tn: desde hace una semana... Pero es solo una broma de mal gusto
Mire a mi padre quien al escucharme decir que era una broma bajo la mirada, el no era de ese tipo de persona, por lo que me confundió más
Señor: no es una broma de mal gusto señorita Tn
Ahora volteee a ver a aquel señor que no se había dignado en hablar hasta ahora que se mencionó la carta. Lo mire confundida, más bien yo estaba sumamente confundida, ¿ Que rayos es todo esto? ¿Quien es ese señor? ¿Por qué mis padres se ven tan afligidos? Tenía muchas preguntas sin respuesta en mi cabeza que está empezó a dolerme de todo este problema que inició añcon aquella dichosa carta
