Prólogo

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7 de Marzo de 2015. Londres, Inglaterra.

No hacía más de dos semanas que había terminado el ciclo lectivo en la Universidad de Bath y 10 de los mejores estudiantes ya se encontraban a la espera de comenzar con las prácticas en aquel inmenso hospital.

Aquel lugar, conocido por los jóvenes que vivían por la zona como 'El cementerio para vivos' ya que muchas de las personas que son internadas ahí no vuelven a ser las mismas. A palabras de algunos familiares y conocidos de pacientes que fueron dados de alta por aquel lugar se arrepentían de haberlos internado ahí, que deberían haber buscado otro lugar.

Por esa razón era que yo estaba ahí, para que no más familias se arrepientan, para que ningún paciente sufra más y sobre todo para curar y ayudar a cada una de las personas ahí dentro.

No pasaron más de 15 minutos y las grandes puertas del edificio se abrieron, mostrando a un hombre castaño con uniforme de seguridad, dándoles la bienvenida.

-¡Buenos días a todos! Les habla Liam Payne, guardia de seguridad de este hermoso lugar.- Dijo con humor en su tono el hombre que, al no notar ningún atisbo de olor en el deduje que era un beta. -A partir de ahora quiero que me sigan, tratad de preguntar todas las dudas que tengan, no sean tímidos.

Una vez dejó de hablar nos condujo a todos los internos hacia el interior del edificio, explicándonos un poco por encima lo que se hacía en esa sala. Al ser la recepción no creo pasar mucho tiempo ahí ya que nosotros hemos estudiado para estar cara a cara con los pacientes.

-Ahora iremos por este pasillo y os diré con qué grupo de pacientes os toca pasar las prácticas.- Dijo Liam, abriendo la carpeta que llevaba en la mano. -Carmen López, le ha tocado el grupo A, por favor diríjase a donde le indica la hoja por favor.

Una alfa castaña salió de entre los pasantes, cogiendo la hoja que el beta le entrega y marchándose por el pasillo de la izquierda.

Y así fue, diciendo nombres y grupos durante unos minutos que parecieron eternos, hasta que escuché mi nombre.

-Louis Tomlins-auch- De no ser por aquella interrupción ya estaría alejándome de ese grupo que tan estresado me tenía, no me gustan las agrupaciones de gente. Escuché un pequeño quejido que no venía del beta, sino de la persona que tenía detrás.-¡Harry!- Dijo el guardia al darse la vuelta.

Una vez que el guardia se apartó pude verlo, era un chico con el cabello rizado y que no pasaba del metro sesenta, pero su apariencia me daba la idea de que era mayor de edad. De repente una voz me sacó de mis pensamientos, devolviéndome a tierra firme.

-¡Liam! ¿Dónde estabas? Te estuve buscando estos días, Aiden te echaba de menos.- Dijo el omega, alzando un pequeño bebé de juguete.

-Lo siento, Harry, he estado de vacaciones con Melissa y no tenía forma de contactarte.- Dicho esto le dio un abrazo, que fue correspondido por el rizado, este se dio cuenta del trío de pasantes que estaba junto a la puerta a la espera de ser mencionados.

-¿Quiénes son ellos?- Dijo el omega, susurrando para que solo Liam lo escuchara, cosa que no sirvió de mucho ya que todos aquí lo escuchamos.

-Bueno, ellos son-

-¡Harry! Ven aquí pequeño escurridizo.- Exclamó una señora de cabello canoso, que caminaba lo más rápido que podía por el pasillo, haciendo que el omega se escondiera detrás del guardia, soltando una pequeña risa adorable.

-¿Volviste a salir corriendo?- Preguntó el beta.

-Shhh.- Y así fue como el pequeño omega empezó a correr por el pasillo agarrando bien al muñeco en brazos, riendo y escapando de la señora que a duras penas podía seguirle el ritmo.

Meet Me In The Hallway [l.s]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora