Laura Garrido López
LA HISTORIA DEL ÁRBOL DE NAVIDAD
Hace mucho tiempo, en un pequeño pueblo llamado Naime, se podía percibir en el ambiente la Víspera de Nochebuena. Todo estaba decorado con guirnaldas, lazos, caramelos, etc. Pero sólo había una casa que era la que más destacaba: La de Daniel. Daniel era un chico moreno de unos 10 años y le apasionaba la Navidad. Siempre que ésta llegaba, él se ponía súper contento y la celebraba con su familia.
Aquel día, Daniel bajó corriendo las escaleras hasta llegar a la cocina, atraído por el acogedor y dulce olor de las galletas que su madre y su abuela cocinaban:
-Mamaaá.-exclamó Daniel con agitación debido al haber corrido tanto.-¿Me puedo comer tan sólo una galleta?-.
La madre asintió y le dio un beso en la mejilla a su hijo. Seguidamente, el niño se dirigió al salón donde se hallaba su padre leyendo un libro delante de la chimenea donde las llamas chispeaban . Daniel le dio un abrazo y salió a la calle a buscar a su amiga Clara. Ella también era morena y siempre llevaba dos coletas. Los dos chicos estuvieron un buen rato conversando sobre los juguetes que les traerían Papá Noel al día siguiente y también jugaron a los juegos que Clara tenía. El rato se les pasó muy rápidamente y Daniel debía volver.
En el camino, el bullicio de la gente no le dejaba andar. Hubo un momento en el que se paró delante de la plaza y pensó: "Esto se ve muy vacío".
Al día siguiente, ya era Nochebuena y Daniel seguía pensativo por lo ocurrido anoche. Pero todos los pensamientos se le esfumaron cuando sonó el timbre. Era Clara de nuevo. Daniel fue a abrir pero al llegar hasta la puerta se dio cuenta de que su abuela no estaba en casa. Entonces, junto con Clara, fueron a buscarla. Al final, después de un largo rato buscando, ella se encontraba en la buhardilla del tejado de la casa mirando por la ventana:
-Abuelita, ¿Qué te pasa?-preguntó Daniel mientras Clara permanecía callada.
-Venid, venid. Sentaos los dos.-añadió la abuela mostrándole unos cojines.
Clara y Daniel obedecieron. Entonces, la anciana les empezó a contar una historia antigua sobre el bosque del pueblo. Resumiendo, la leyenda hablaba sobre bosque del pueblo, en el cual habitaba un monstruo. Cuando terminó, los dos niños se levantaron incrédulos y decidieron comprobar si era cierto. Cogieron un montón de caramelos, palotes, bolas de chocolate, etc y fueron en busca del monstruo.
Al llegar, ya estaba oscureciendo y sólo se veían las luces del alumbrado y se escuchaban las risas y voces de la gente que celebraba la Nochebuena. Una vez en el bosque, caminaban y caminaban y ni rastro del monstruo. Hasta que al final, ya identificaron a lo que se le hacía llamar "monstruo". Era el ruido del viento chocando con una roca...Cuando dijeron de volver a casa, algo le llamó la atención a Daniel. En un claro del bosque iluminado por la luna, había un árbol diferente a los demás, con todas las ramas perfectas y muy brillante. De repente, a Clara se le ocurrió una idea: Como no habían gastado las chuches que tenían, decidieron colocárselas al árbol. Quedó magnífico, y justo cuando los dos niños lo contemplaban pasó una estrella fugaz justo por encima del árbol. Entonces Daniel llamó a su padre para que lo recogiera y lo pusiera en la plaza del pueblo. Una vez puesto, toda la gente que pasaba por allí se quedaba mirándolo. Todas las personas del pueblo fue- ron a contemplarlo. Pero, esta vez, había una pequeña diferencia en el árbol: Tenía una gran estrella en la punta. En ese momento, Daniel susurró para sí mismo: A partir de ahora, se llamará "El árbol de Navidad", y la abuela, que estaba situada al lado del niño, sonrió. Entonces, desde ese momento, cada casa tenía un árbol de Navidad.
Y colorín colorado, este cuento de Navidad
ha terminado!!!
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La historia del árbol de Navidad
Short StoryEn la Víspera de Nochebuena, Daniel se da cuenta de que la plaza de su pueblo se ve vacía. Él busca una solución junto con su amiga Clara y ellos consiguen crear una propia tradición para adornar las casas: "El árbol de Navidad".