La Luna ya no iluminaba igual luego de tu partida, las estrellas desaparecían de mi vista cada que las veía. Mis lágrimas eran saladas y mis ojos perdían las razones para mantenerse abiertos.
Las tardes de surf no eran las mismas sin tus risas, ni tus caídas. Las noches de películas, los maratones de Harry Potter y Crepúsculo. Nada era igual.
Te extrañaré.
Siempre.
Harrison.
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Flores de mar
Любовные романыMarcus Keller se suicidó un 20 de agosto, mi mejor amigo y él chico más honesto y divertido que pude haber conocido. Después de ese día pensé que nada podía sacarme de ese vacío que dejó él cuando se fue. Pero luego él apareció, sus pecas, sus luna...
