La paz hacia el miedo. Naruto Uchiha (Pausada)

When haces tus momos en video

Naruto no me pertenece, todos los créditos a Kishimoto.

Leviathan era una demonio antiguo, nacida justo después de la creación del inframundo.

Observó el desarrollo poco a poco del inframundo, había visto nacer a guerreros prometedores, guerreros que podrían rivalizar con su poder, guerreros que podrían gobernar el inframundo sin problema.

Pero ella nunca había visto algo igual a lo que sus ojos estában presenciando.

Del polvo, un hombre salió. Un cigarrillo en sus labios, una brillante armadura roja colgando de su pecho.

Una mirada inmutable y unos ojos rojos carmesí llenos de odió infinitamente brutal.

Arrastrando por los suelos a una debilitada y rendida diosa de la luna.

Belcebú observó al hombre que salió de la tormenta de polvo. Sus ojos se abrieron con conmoción al ver a la deidad siendo arrastrada por el Rey Demonio.

'¡LUCIFER-SAMA!' Todos los guerreros gritaron el nombre de su rey al verlo acercarse.

Leviathan: Acaba de arrebatar 1.500.000 vidas y nisiquiera se inmuta...- Naruto venía arrastrando a la mujer de pelo plateado.

El humo salió de su nariz y boca, su mirada impasible siempre en alto.

El nunca bajaría la mirada a menos que sea para ver a una mujer chupándole la polla.

Naruto: Está sensación...- Se detuvo abruptamente, había sentido está sensación en algún lado.

¿Dónde? Sus ojos se abrieron al recordarlo.

Naruto: Agujero de gusano.- Al momento de que las palabras escaparan de su boca, el suelo empezó a temblar.

Una enorme fuerza gravitatoria lo atrajo hacia el suelo, de cuclillas en el enorme llano desértico donde ocurrió la batalla, una luz blanca opaco todo el suelo, todo el suelo debajo del rey demonio.

Naruto: ¡Kamui!- Su Sharingan no contestó, sentía como su chakra era drenado a una velocidad bestial.

Tsukuyomi: ¿Que es esto?- Sus ojos se abrieron cuando el suelo empezó a romperse ante la gravedad que ejercía aquel punto blanco en la tierra.

Naruto: Mierda, otra ves no...- Sus ojos se entrecerraron de fatiga cuando todo el chakra de su cuerpo fue drenado.

Y como si nunca hubieran estado ahí, desaparecieron.
En un brillante flash blanco.

Nagato abrió los ojos al ver que la presencia de Madara había desaparecido de la nada.

Todos estaban impactados y con los ojos abiertos, ¿Que sucedió?

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Los rayos blancos estallaron en todo el oscuro cielo con un ruido estruendoso.

Su armadura se movía con intensidad por el viento, su cabello se levantaba y movía por la gravedad.

Sus cansados ojos observaron el anochecer mientras caía hacia el vacío a una velocidad estremecedora.

Naruto: Gghhhg! No recuerdo que fue así con Amaterasu...- Estaba cayendo en picada a cientos de kilómetros de velocidad.

Su chakra y su magia habían sido drenados como el agua de un desagüe cloacal luego de una inundación.

Solo le quedaba confiar en la resistencia de su cuerpo para aguantar el impacto.

Sus cansados ojos observaron lo verde de una montaña. Tenía que aterrizar sobre un árbol, o probablemente moriría aplastado.

¿Donde esta tsukuyomi? No había respuesta para su pregunta.