Un príncipe muy alegre

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¿Cómo debería ser representada la siguiente situación?, parece absurdo pero los sirvientes del ostentoso palacio estaban totalmente acostumbrados a estas repentinas rabietas del joven príncipe. Particularmente el heredero al trono tenía un temperamento tenaz y muy energético, entonces, ¿a qué se debía tal cambio tan brusco en su personalidad?

—Príncipe, por favor trate de calmarse, este comportamiento es irracional e inadecuado, personalmente pienso..!!—no pudo seguir con su argumento porque el príncipe le había aventado lo primero que tenía en su mano, un libro con las leyes del estado más pesado que cualquier roca.

Tenko Shimura, un niño de apenas unos catorce años, beta por naturaleza. Aprendió al temprano inicio de su adolescencia lo cansado que es atender los caprichos de su futuro rey, ser un caballero de compañía es más difícil de lo que se esperaba.  Lo asignaron como tal para cuidar del príncipe desde temprana edad porque a palabras de su Majestad, él era el indicado para acompañar al príncipe por su intelecto, fuerza y por la casta que se le había mostrado en su reciente examen médico.

Aunque aún no se le había presentado su ciclo de celo al príncipe y mucho menos su casta, se necesitaban solo dos neuronas funcionales para determinar lo poco contento que se encontraba actualmente su querido sucesor.

—¡AGHHHHH!, ¡¡ESTO ES INDIGNANTE!!—dijo Touya con el rostro al rojo vivo debido al coraje, apretando los puños de manera adorable.

Tenko suspiro y retiró el libro pesado de su cara, se dirigió al príncipe a pasos calmados y cuando estuvo lo suficientemente cerca de su persona, le agarro de su cabello rojizo con enojo.

—Usted está actuando de manera muy precipitada por un asunto menor y le sugiero que modere su comportamiento—la sonrisa en el rostro pálido de Tenko era muy calmada pero el aura que desprendía no.

Dato curioso, Tenko y el príncipe Touya han sido amigos desde siempre por lo cual no se hacía raro la forma de tratarse. Touya se lo permitía porque le desagradaba que sus allegados lo traten como si él estuviera en un pedestal. 

Así que, ignorando las suplicas del príncipe, Tenko lo llevo agarrado de una oreja a la "Habitación Celeste" para que las damas se encargaran de su vestuario. Agradecidas con Tenko por haber traído al príncipe, no perdieron ni un segundo y comenzaron a arreglar su atuendo para que resaltará más su mirada azul brillante. Ya una vez preparado, Tenko entró nuevamente y esquivo exitosamente el cepillo que le había lanzado su amigo de la infancia para acercarse a él con una sonrisa de victoria plasmada en su rostro.

—Príncipe, sé que puede llegar a ser estresante para usted este arreglo matrimonial pero entienda que la joven condesa no busca hacerle sentir incómodo. Y según a palabras del Sabio, ella y usted están destinados a compartir una vida juntos, no veo el inconveniente... ¿la condesa dijo algo embarazoso?— dijo mientras le arreglaba un poco su corbata de bolo.

Touya pensó en silencio con su expresión un poco molesta y luego miró al suelo.

—No...no, ella es muy amable...tanto que me desagrada—habló en susurro y su mirada se relajó un poco.

—¿Seguro es por eso, príncipe?—habló más tranquilo Tenko, el sabía perfectamente que Touya no tenía rencor alguno con su señorita pero le intrigaba saber cuál era la razón de tal enojo. 

Justo cuando iba a preguntar, unos suaves golpes se escucharon en la puerta, Tenko de inmediato intuyó que se trataba de lo hermosa dama de compañía de la señorita. A pasos rápidos se acercó a la puerta pero antes de abrirla se arregló un poco su cabello negro y después abrió la puerta encontrándose con la mirada tranquila de la dama.

—Disculpe si interrumpo joven Tenko, mi joven ama pregunta por su majestad—hizo una pequeña reverencia y le sonrió haciendo que el joven Tenko se pusiera nervioso.

—Su presencia siempre es bien recibida por mí cuando guste y no interrumpió nada querida dama, el príncipe le recibirá en un momento a la joven condesa y después podríamos dar un paseo por el jardín, para que los jóvenes amos tengan privacidad—dijo obviamente feliz y con un sonrojo en sus mejillas.

—Sería de mi agrado acompañarle, veré que dice mi joven ama. Ella espera al príncipe en la sala principal, con su permiso—y con una última reverencia se retiró del lugar en completo silencio.

Tenko suspiro enamorado, viendo la silueta de su pequeña dama hasta que desapareciera de su vista, cuando volvió su vista al príncipe este le miraba asqueado.

—Que desagradable fue, te ves patético cuando intentas cortejarle—una sonrisa burlona se dibujó en el rostro del príncipe y su amigo le miró hostigado.

—No me quedaré aquí a discutir sobre mis intereses amorosos con alguien sin el sentido de la racionalidad—caminó a la puerta pero se detuvo—Y no crea que puede escapar, lo estaré esperando afuera—acto seguido, cerró la puerta.

Una vez solo en la habitación, Touya tuvo un momento para apreciarse mejor, habían realizado un maravilloso trabajo con su apariencia, no iba a mentir, se encontraba nervioso pero respiró profundo y otra vez vino aquel recuerdo molesto a su mente.

"—¿Quiere saber la razón de la marca en mi rostro?, no quiero que se preocupe por un asunto pequeño...lo que sucedió es que unas de mis sirvientas se enojo conmigo porque le había invitado a tomar al té y al parecer lo tomó como un insulto, me rasguñó un poco la mejilla. Aunque madre dijo que no debía preocuparme, la han despedido por mi culpa...espero que este bien—"

Un chasquido de lengua salió de sus labios al recordar ese momento, no habían pasado ni unos días de aquel incidente pero a él le molestaba de sobremanera ver esa herida. No quería verla, le molestaba mucho.

—Tan amable que es desagradable—con eso último, salió de la habitación y fue a la sala principal para recibir a la omega.

—Tan amable que es desagradable—con eso último, salió de la habitación y fue a la sala principal para recibir a la omega

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Notas del autor:

Casta—Se refiere a la "casta sexual" que puede ser, el ser alfa, beta u omega. Todos tienen una casta que se va a desarrollar de manera natural con la llegada de la pubertad en sus primeros años de adolescencia, que se denomina presentación.

"La pequeña dama" se refiere a un personaje interpretado por el lector/a por eso el apodo

El primer capítulo ha sido muy corto pero espero les haya gustado, saludos y pasen un buen día

Las cuestiones de un amor inocenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora