TOWER OF GOD X READER /// ONE-SHOTS

⚫[ Lero-Ro ]⚫

"Tenemos dos pasantes nuevos. Dales un recorrido o algo así". La voz medio engreída medio aburrida de su socio resonó en su artilugio. Khun Hachuling, o Blueberry como preferías llamarlo, era probablemente el colega más molesto con el que trabajaste en Wolhaiksong; siempre te dejaba toda la carga de trabajo (a menos que fuera una pelea o algún tipo de trabajo de piratería, entonces estabas absolutamente no autorizado a hacer nada) y luego se acreditaría a sí mismo por ello.

Ligeramente irritada por la nueva tarea que te asignó un tipo que no tenía un rango más alto que tú, no pudiste evitar gritar: "Hazlo tú mismo, Blueberry".

Podías sentirlo fruncir el ceño con disgusto desde el artilugio. "No puedo, tengo trabajo que hacer".

"¿Trabajo?" te burlaste, "Tengo todo el trabajo aquí, fíjate".

Hubo un momentáneo silencio al otro lado de la línea, antes de que se escuchara un zumbido. "Tienes razón. Pero aún así, dales a los pasantes un recorrido. Todavía tengo que jugar. Además", agregó de la manera más irritante posible, "Soy el dueño de esta tienda, ¿recuerdas? un trabajador. Ahora consigue mover tu trasero de  aquí, t/n ".

"¿Disculpa?" tú respondiste, "Yo también estoy ocupada, fíjate yo-" Ni siquiera pudiste terminar tu oración cuando ese maldito Blueberry colgó. Furiosa porque él era tu jefe después de todo, finalmente te levantaste de tu silla y pisoteaste el camino hacia la entrada de la tienda. Irrumpiendo, le diste a Hachuling una mirada de furia que se estremeció de miedo. "¿Dónde están?"

Mansamente, señaló el otro lado de la habitación, donde estaban dos chicos. El más pequeño, con el pelo rojo, se adelantó, "Um ... ¿H-hola ...? ¡Mi nombre es Quant Blitz! ¡Encantado de conocerte!" Aunque al principio estaba nervioso, Quant rápidamente se convirtió en una persona muy emocionada.

Asintiste  con la cabeza secamente, sin ni siquiera molestarse en ocultar tu mal humor. Tu mirada luego viajó a la otra persona, un individuo mucho más alto que parecía terriblemente familiar, sin que pudieras precisar por qué.

Sintiendo tu mirada sobre él, la persona se aclaró la garganta y dio un paso adelante. "Mi nombre es Lero-Ro, gusto en conocerte."

Escuchar su nombre hizo que tus ojos se abrieran de sorpresa, y ahora sabías exactamente por qué te recordaba tanto a alguien. Era la misma persona con la que una vez subiste a la torre. La persona que habías perdido en una batalla, una persona a la que nunca habías vuelto a ver hasta ahora, una persona a la que habías prometido no olvidar nunca.

Y cuando sus miradas se encontraron, viste en sus ojos un destello de sorpresa casi idéntico al tuyo, pero también una chispa de dolor. Tu corazón se apretó inmediatamente al ver su rostro, recuerdos desagradables apresurados. Su expresión ... Es como la que tenía ese día, te diste cuenta, y de repente todo ese brillo se derrumbo ante tus ojos. Rápidamente, negó con la cabeza para borrar sus molestos pensamientos y se concentró en fruncir el ceño con una ira ahora fingida una vez más.

No quedaba nada de brillo en tu mirada que pudiera delatar lo aliviada y dolida que estabas por la presencia de Lero-Ro, y él también ocultó cualquier rastro de emoción. Con un seco movimiento de la mano, les indicaste que te siguieran y comenzó el recorrido por la tienda.

Mientras caminabas, señalando y explicando cosas, podías sentir claramente la mirada atenta del rubio caminando silenciosamente a tu lado, y eso lo puso extrañamente nervioso. Afortunadamente, Quant estaba demasiado distraido con las muchas máquinas que se encontraban en su línea de visión para darse cuenta de lo tenso e incomodo que se había vuelto el aire , y en ese momento deseabas profundamente ser tan distraido como él.