El escandalo y algunos pares de gritos de unas personas me hicieron ir abriendo los ojos reaccionando a mi entorno, exhalando e inhalando asustada no dejaba de temblar. Había podido lograrlo. Felizmente mi cuerpo por el impulso se giro en el aire haciéndome rozar el carro. Eso era lo que había sentido antes como si me estuviera muriendo. Cayendo al otro lado del paso, arrastrándome de espaldas hecha bolita.
— Ah...
Me dolía el brazo, había sido el que se llevó más daño mientras me resbale en el piso por el impulso. Me deje echar boca arriba, intentando calmar mi pecho que no dejaba de subir y bajar. ¿Duele? Si. Duele como mierda. Ahora que lo pienso, duele peor porque también me había tirado de esa pared. Añadiendo la aun herida abierta del bate. Creo que hubiera sido mejor que me atropellaran de una vez.
«En los sueños no te duele nada maldita sea... No es un maldito sueño»
Veía que estaba apunto de anochecer, mi aliento iba al cielo mientras se desaparecía. El color naranja pastel del atardecer era hermoso. Un recuerdo de Takemichi vino de la nada. Donde esta con Mickey y Draken juntos viendo aquel atardecer. No pude llegar.
«Espero que todo entre ellos este saliendo bien»
Pensé aún sin moverme. Extendí mis brazos a los lados dejándolos caer. Cerrando los ojos intentando mantenerme en calma y evitando los pensamientos innecesarios para estabilizarme.
Sentí como unos pasos iban acercándose. Que nadie me moleste en este momento por caridad. La figura se paro a mi lado. Irritándome como se quedo ahí sin decir nada.
— ¿Te encuentras bien?
La voz masculina de alguien me hizo tener un tick en el ojo por la estupidez que acaba de preguntar. ¿Para eso hablas? Abría los ojos poco a poco adolorida, no viéndolo bien.
Si en ese momento no me doliera el brazo y pudiera levantarlo, un lindo dedo del medio estaría en la cara de quien sea que fuera ese bastardo.
«"¿Ti inciintris biin?" Casi fui atropellada animal»
Quise mandarlo a la mierda. Nop, lo iba a hacer. Abriendo mas los ojos para verlo mejor y maldecirlo completamente. Antes de siquiera poder fruncir mi ceño o soltar alguna palabra me mordí la lengua apenas verlo. Pude sentir claramente como toda mi presión arterial bajo. Moviendo mis ojos como canicas cayendo sin poder dejar de mirarlo de pies a cabeza una y otra vez.
Puedo decir, literalmente, que mi corazón y cerebro sufrieron de excesiva perfección grafica.
«¿¡Chifuyu!?»
Listo. Morí.
No podría creerlo. Estaba ahí. Parado. Extendiéndome su mano. Queriendo ayudarme. El fondo del atardecer. El poste de luz hacia ver su cabello rubio más brillante. Sus ojitos.
Estaba segura de algo en ese momento.
«He sido bendecida, no importa si no es un sueño, puedo morir en paz»
Relaje mi cuerpo completamente exhalando con una expresión satisfactoria.
— ¿¡S-señorita!? —movió mi hombro.
Abrí en par en par mis ojos secamente mirándolo. Haciéndolo retroceder al asustarlo por soltar un pequeño grito. Me había dolido horrible que me tocase justo ahí. Pero.
«¡Ahh! ¡Me dijo señorita! ¡señoritaaa!»
Me gire aun lado en el piso haciéndome bolita queriendo dar vueltas ahí mismo de la emoción. El dolor es mental después de todo. No me volvería a lavar este hombro por lo que me queda de vida.

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¿Podría ayudarte? -Tokyo Revengers
Fanfiction(BORRADOR) Extrañamente una fan de los chicos aparece en su mundo, reconoce a todos y esta dispuesta a ayudar a Takemichi como lo hubiera hecho todo el fandom. Fangirlea, grita de la emocion, gira en el suelo cuando ve a uno de los personajes. Per...