UN ÁNGEL EN SU VIDA

1.6K 44 75
                                    


Gracias al grupo de Facebook la Historia Continúa...  (https://www.facebook.com/groups/1570334716679809/?ref=share) y a Sisy Reis por permitirme usar su portada para esta historia.



Por Rocío Fernández Escribano

CAPÍTULO 1 MAGIA DE ÁNGEL

El estruendo en la casa era tremendo, las mellizas cumplían doce años, todos sus amigos y amigas llenaban la casa, bailaban al son de música moderna, mientras que los padres de las festejadas los miraban sonrientes.

Desde una esquina los observaba una anciana mujer, la cual acariciaba suavemente el mango de su bastón el cual, desde hacía unos años tenía necesidad de usar.

Miró a su nieto mayor, un adolescente rebelde, loco por las mujeres pero defensor máximo de sus hermanas, lo observó acercarse a ella, con mirada pícara y una traviesa sonrisa ¿qué tramaría?... Se sentó junto a ella, en una pequeña butaca de madera y comenzó a hablarle despacito.

JOVEN: Hola abuela, menudo jaleo... ¿no le gustaría descansar un rato en su cuarto?

ANCIANA: No mijo, muchas gracias, estoy bien acá, quiero ver a tus hermanas, ellas están felices.

JOVEN (mirándolas): Sí, eso parece, ya sabes que les encanta ser el centro de atención, eso debe ser en lo único que se parecen, porque en el resto...

ANCIANA (cambiando de tema): ¿Les has dado tu regalo?

JOVEN: Aun no, ya sabes que prefiero hacerlo en privado... Voy a hacerles un regalo especial, algo que significa mucho para mí, tú sabes... Mire, mire abuela...

Sacó de su bolsillo dos diminutas cajas, abrió una y en ella se veía una pequeña pulserita de oro blanco, muy sencilla, pero muy bonita, con el nombre de una de ellas grabado, la mujer la sacó y la miró detenidamente, por el otro lado ponía su nombre, sonrió, aquel había sido el regalo que su hijo le había hecho a su nieto cuando sus hermanas nacieron, y ahora él se lo hacía a una de ellas,¿cuál sería el regalo de la otra?

Como si lo hubiese adivinado, el muchacho sacó la otra cajita y la abrió... dentro había una cadena sencilla también de oro blanco, con un colgante de plata en forma de Ángel, la a mujer se quedó helada, cómo su nieto podía hacer semejante regalo... ¿acaso él sabía algo de lo que había pasado?

JOVEN: ¿No le gusta?

ANCIANA: No es eso, ese colgante es un regalo.

JOVEN: También lo es la pulsera.

ANCIANA: Pero, ¿por qué?... ¿Por qué a ella?.

JOVEN: Bueno abuela, realmente no lo sé, pero presiento que debe tenerlo ella... si te das cuenta, es muy angelical, es un ángel (sonrisa boba).

Anciana: ¡Las dos lo son!

JOVEN: Sí, pero no son el mismo tipo de ángel, tú sabes, yo le puse el nombre a una y la otra me vino por sorpresa, las adoro, pero no sé, es como si...

ANCIANA: ¿Como si qué?...

Joven: Nada abuela, nada.

Se levantó y llamó a sus hermanas a un lugar más privado para entregarles su regalo, su abuela lo siguió con la mirada, se quedó pensativa, durante años no había visto aquel colgante fuera del cuello de su nieto pero, tal vez por casualidades del destino, había decidido regalárselo a una de sus hermanas, ella era la única que conocía de primera mano la historia de aquel colgante, de aquel pequeño ángel de plata que aquella mujer le había regalado a su nieto el día después del nacimientos de las niñas.

UN ÁNGEL EN SU VIDADonde viven las historias. Descúbrelo ahora