Parte 1

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MEX: Aleeeee 

Gritaba el pequeño mexicano quien se encontraba en la sala sentado con los pies cruzados y un cojín entre sus manos, el tono de su voz se denotaba con una sensación de agotamiento que instantáneamente causo reacción en la persona que tanto llamaba la cual se encontraba jusamente llegando a la entrada de la casa, rápidamente abrió la puerta de la casa y hablo un tanto agitado.

ALE: ¿Qué paso mex, que tienes?

MEX: Mmmm....

No hubo respuesta por parte del mexicano un simple suspiro se hizo presente mostrando unos ojos un tanto tristes hacia este, quien al notarlos los relaciono como si de un pequeño cachorrito se tratase.

ALE: Mmmm...

Inmediatamente dejo su maletín en uno de los muebles cercanos a la puerta y se fue de la casa sin mencionar o preguntar alguna otra cosa más, solo para que pasados 2 minutos regresara de nuevo a la casa pero con una bolsa de plástico enorme en una de sus manos. Se podían notar algunas bolsas de botanas, dulces, unos cuantos panes empaquetados y malteadas de frutas.

Sin embargo el pequeño mexicano para ese entonces con una considerable  cantidad de cojines construyo un pequeño fuerte en donde se encerró quedando justamente en el centro de estos.

ALE: Mira Mex te traje comida rica, no estés triste mi mariposita, sal de ahí vamos a comer un poco

MEX: No quiero...

Un ligero sollozo alcanzo los oídos del alemán quien con ojos un tanto preocupados, dejo las cosa que había comprado encima de la mesa y prosiguió a acercarse al mexicano, quien silenciosamente comenzó a llorar provocando que el fuerte que había hecho de cojines se tambaleara un poco.

ALE: No cariño no llores, sal de ahí 

MEX: Ale me va a odiar igual que Japón y Rusia 

ALE: No cariño, claro que no sabes que te amamos nunca llegaríamos a odiarte 

Tiernamente Alemania se sentó al lado de México y comenzó a quitar los cojines que tapaban la cabeza del mexicano y lo tomo de sus axilas para después acomodarlo en sus piernas y arroparlo en su pecho mientras acariciaba su cabeza y su espalda en un intento por calmar las lagrimas incesantes del mexicano.

MEX: Tu los odias...

ALE: ¿Qué odio cariño?

MEX: A los niños igual que Rusia y Japón

ALE: No mi amor no es eso...creo que tanto ellos como yo compartimos el mismo pensamiento, no creemos ser buenos padres, ninguno de nosotros nos creemos capaces de tener uno, en todo caso ¿eso que tiene que ver con que estés triste mi mariposita?


MEX: Estoy embarazado

....

ALE: He...

La repentina noticia fue tan impactante que hizo que las pequeñas caricias que le dejaba al mexicano para calmarlo se detuvieron mientras veía de forma estática y muy asombrada a México quien justamente lo veía fijamente esperando una respuesta.

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⏰ Última actualización: Jan 08, 2022 ⏰

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