La apuesta [Katsudeku]

La apuesta

- ¡Cuidado!- dijo una voz que Katsuki conocía a la perfección, justo antes de darle una patada apartándolo de la trayectoria del rayo.

- Joder nerd, no era necesario que me apartases así, hubiese podido desviarlo con una explosión- Dijo apartando la mirada. Izuku había caído justo a su lado, joder por lo menos podría haber caído encima suyo... - Mierda...- Dijo Katsuki más para sí mismo que para su compañero dándose cuenta de lo que acababa de pensar, este no era el momento.

- Lo siento Kacchan pero es lo único que se me ocurrió, sino ahora serías un tierno lobito de peluche o yo sería un conejito. Ya has visto como ha acabado Kirishima-kun- dijo asomando la cabeza entre los escombros- Al parecer hemos servido de distracción para que Shouto y Celophan capturen a Ningoo, solo falta llevarlo hasta Kirishima-kun para que cancele el efecto del quirk - Dijo Izuku levantándose.

- Lo que sea...- dijo dándose la vuelta sin mirar a su compañero.

Joder ¿Desde cuándo se distraía en el trabajo? ¿Desde cuándo miraba así al nerd? No sabe exactamente cuándo empezó, pero sí sabe cuando se dio cuenta. Hacía aproximadamente cinco años, sus sentimientos le explotaron en la cara, Izuku se había ido sin decirle una sola palabra, solo había dejado una puta carta... vaya ironía, llevaba toda la vida queriendo que Izuku le dejase en paz y ahora que lo había hecho no quería a nadie más a su lado. Joder había arriesgado su vida por él y aun así se había atrevido a irse sin él y aunque se lo merecía no era lo que quería.

 
Ese mismo día comprendió que lo que había hecho hasta el momento no era suficiente, aunque entrenasen juntos e intentase ayudarle, si no lo decía no sería suficiente. Cuándo lo encontrasen (sí, porque pensaba ir a buscarlo y traerlo de vuelta arrastras si hacia falta) le pediría perdón y expresaría sus sentimientos. Y en eso estaba, ya habían pasado cinco malditos años de su regreso y sentía que aun no podía expresar bien todo lo que se acumulaba en su pecho cuando lo veía.

Ahora eran pro-héroes, estaban en el top ten, trabajaban juntos, entrenaban juntos y confiaban uno en el otro, pero últimamente le era muy difícil contener sus sentimientos cuando estaban juntos, incluso se distraía mirando al maldito nerd con su traje ajustado, dando saltos por ahí como si fuese un conejito sexy, joder, que coño le pasaba, ni que fuese un puto adolescente hormonal... tenía que hacer algo... pero lo que más le molestaba era ver cómo el nerd actuaba igual que siempre ¿Cómo era capaz de comportase con normalidad a su lado mientras él perdía la cabeza? Si tan bien lo conocía ¿Cómo es que no se daba cuenta de lo que sentía cada vez que...

- ¡Katsu-bro!

- ¿Ya has vuelto a la normalidad pelos de mierda?

- No te metas conmigo... solo estaba intentado proteger a todo el mundo- dijo persiguiendo a Katsuki que no había parado de andar en ningún momento. Kirishima aceleró el paso y se puso delante de su mejor amigo- Por cierto, ¿Vas a venir esta noche?

- ¿Eh?

- A la cena de la clase A, esta vez ha confirmado todo el mundo menos tú. Incluso Midoriya y...

- ¿A qué hora es la cena?

- Venga Bakugo por... - ¿Un momento que acababa de decir? pensó Kirishima, él se había preparado todo un discurso para convencerlo porque no había ido a las últimas reuniones y quería que todos volviesen a pasar tiempo juntos- ¿Qué has dicho?

- ¿A qué hora es la cena?

- A las siete- dijo Kirishima sin entender que estaba pasando exactamente, solo vio como Bakugo apretaba sus puños mientras veía a Midoriya hablar con Todoroki, no hizo ninguna pregunta, hacía un tiempo que había notado que su amigo miraba de forma diferente a Midoriya, pero también sabía por experiencia que si preguntaba lo único que conseguiría es que le explotase la cabeza y se fuese sin decir nada. Lo mejor sería idear una estrategia con los chicos esta noche y sonsacarle lo que le pasaba de una vez por todas.