Alguna vez ha llegado el momento en el que crean que ya no pueden seguir adelante, que su vida a acabado, que su unico deseo es morir, pues ese no es mi caso.
Soy Caroll Thomson, una adolescente de diescisiete años, que trata de sobrevivir en esta sociedad tan cruel, y lo peor es darte cuenta de que tu eres de esas personas crueles; mi madre siempre me ha dicho que a esta vida llegas solo y te vas solo y por lo mismo eh decidido vivir esta vida lo mas sola posible, me concidero una copia de Hazel Grace, soy una bomba que constantemente explota dañando a las personas que estan a mi alrededor.
No podria conciderarme como una persona que le sonrie a la vida, siendo feliz y tierna, solo vivo cada problema de la mejor forma. Siempre me he caracterizado por algo muy peculiar, desde pequeña eh sido muy fria y dura, se preguntaran ¿Como una niña puede ser asi cuando los niños son las personas mas felices? pues yo soy feliz, pero asi naci, y jamas le eh visto el lado malo a ello. Dia a dia la vida me ha obligado a formar una barrera contra la sociedad, una barrera que solo personas que yo decido pueden pasar y conocerme realmente.
En este momento me encuetro llegando a mi nueva casa, mi padre decidio que queria iniciar una nueva vida, completamente de cero, nueva ciudad, nueva casa, nueva escuela y creo que tambien nuevos problemas que afrontar.
–Amor– escucho la voz de mi padre interrumpir mis pensamientos
–¿Que pasó?– respondo secamente
–Ya llegamos, ¿no piensas bajar?– dice mi padre desde la puerta de la casa.
Volteo a verle y me doy cuenta que Nico ya esta adentro de mi nueva casa, al salir del coche puedo observar mejor la casa, es grande, muy grande, jamas entendere la necesidad de mi papa de tener una casa grandes cuando la familia es tan pequeña, yo preferiria una casa pequeña, pero no se puede.Al entrar puedo ver que por dentro es hermosa, la mayoria de los sillones son blancos con negro, muebles en conjunto, cuadros de la familia, todo perfectamente decorado, me pregunto quien lo habra hecho, mi madre era la que siempre se encargaba de eso.
Siento unos brazos rodearme desde atras y luego un beso en mi mejilla, inmediatamente me corro.
–¡Nicolas!– grito mientras limpio mi mejilla– sabes que no me gustan los abrazos y menos que pongas tus babas en mi cara.
–Pequeña, deja de reclamar, sabes que amas mis abrazos.
–Si, claro– ruedo los ojos –deja de molestar.
–Matate– me responde infantilmente.
–Pudrete.
–Ni que fuera fruta.
–Madura.
–¡Que no soy fruta!– grita mientras hace puchero
–Si, si, lo que tu digas– digo mientras rio.
Nicolas ha sido mi mejor amigo desde que tengo uso de razón, nuestras madres eran las mejores amigas, y así nosotros crecimos relativamente juntos, cuando le dije que me iba a mudar su primera reaccion fue reir porque no me creia, al darse cuenta de que no estaba jugando salio corriendo de mi casa gritando y luego de cinco minutos regreso gritando, lo unico que pude hacer fue darle una cachetada, y ahí fue cuando reacciono y empezó a gritarme cosas en italiano, si en italiano, su familia es de allá y como el siempre iba de visita pues habla italiano, no entendí nada de lo que me gritó asi que solo me quede parada viendo como desgastaba su voz, la unica forma de hacer que parara fue diciendole que viniera a vivir conmigo, y como sus padres siempre estan de viaje, no tuvieron problema en decirle que si.
–Voy a descansar– grite mientras subia las escaleras, gire mi cabeza hacia ambos lados y al final del pasillo vi una puerta con mi inicial grabada.
Una vez estando en frente de la puerta gire la perilla y entre, al estar adentro escuche como mi padre me hablaba, si es importante vendra.
