capitulo 1

144 8 4
                                    

[narrador]

Era una mañana tranquila, los rayos del sol eran suaves pero eso no quita el hecho de que el día sea brillante, el canto de las aves y la suave brisa era simplemente magnífico, era una de las ventajas de vivir a las afueras de la ciudad, una hermosa mujer de cabellos rubios y de hermosos ojos color miel echaba un vistazo desde el balcón de su habitación hacia el jardín de su casa, en el amplio jardín se podía observar a una chica bastante pequeña, siendo cubierta por una sombrilla para protegerse de los rayos del sol, aquella chica llevaba un vestido blanco y sandalias del mismo color La chica se encontraba sentada sobre una manta y tenía a su lado una pequeña caja con utensilios de arte y sobre su regazo tenia un cuaderno especial para dibujar, desde el balcón de su habitación aquella hermosa mujer veía con amor y dulzura a aquella chica que era su parecido retoño

Tsunade: cielo ven un momento - llamo lo suficientemente fuerte la mujer para ser escuchada por la chica

La joven al escuchar el llamado de su madre no dudó en dirigirle la mirada la mujer la llamaba desde el segundo piso de su casa, la joven cerro su cuaderno y guardo todos los objetos en la pequeña caja a su lado se coloco de pie y recogió la manta sobre la cual estaba sentada, la sacudió y dobló, cerró la sombrilla y con los rayos del sol se pudo ver por completo su apariencia su cabello largo y lacio hasta la cadera de un rosado parecido a los pétalos de las flores de un cerezo, sus ojos de un verde jade brillante y muy brillosos que incluso las esmeraldas sentirían envidia de sus ojos, su piel blanca como la nieve, de lejos se notaba que no tenía ninguna imperfección, su apariencia y los rayos del sol junto con la suave brisa meciendo un poco sus largos cabellos y su vestido blanco lograban darle una apariencia angelical cualquiera pensaría que esa chica era un ángel que bajo del cielo

La joven entro a su casa y llegó a la sala en ella su madre está sentada en un sofá

Tsunade: cielo ven - señalo aún lado del sofá mientras daba leves golpecitos para darle a entender a su hija que se sentará- verás en estos días que he tenido trabajo en el hospital me encontré con una vieja amiga de la escuela bueno verás no te lo había comentado antes, pero ella quiere venir a visitarnos y pues le dije que hablaría contigo para que estes presente el día de su visita porque dice que quiere conocerte - la mujer guardo silencio mientras veía como su hija escribía en un pequeño cuaderno, al terminar de escribir la chica le mostró el cuaderno a su madre.

" Esta bien, pero podría ser pasado mañana?, Es que ino me invitó a salir aparte de que quería pedir tu permiso, entonces me dejas ir con ino?"

Tsunade sonrió hacia su hija, después comenzó a hablar.

Tsunade: claro mi niña, entonces yo le aviso que puede visitarnos pasado mañana, y con respecto a tu salida con ino está bien - sabía que podía confiar en aquella chica por eso le permitió salir con ella, la chica sonrió y escribio en su cuaderno y luego le mostró a su progenitora

"Gracias (⁠◍⁠•⁠ᴗ⁠•⁠◍⁠)"

Acto seguido la joven abrazo a su madre y coloco de pie, le hizo señas de que iba a estar en su cuarto.

La mujer suspiro su niña había crecido demasiado, han pasado 6 años desde aquel fatídico accidente automovilístico en el que iban toda su familia, ella tuvo una fractura en su pierna derecha, su hija sufrió un fuerte golpe en la cabeza que provoco que cayera en coma por 3 meses y su esposo, su amado Jiraiya había muerto en ese accidente, desde entonces han vivido ellas dos solas, su hija está en un tratamiento para recuperar su voz, oh Dios a pasado tanto tiempo desde que escucho la dulce voz de su hija decirle mamá, la mujer sacudió su cabeza para alejar esos pensamientos y llamar a su amiga antes de que se le olvidará.

Un Amor SilenciosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora