Me senté en mi cama y me quedé mirando al vacío hasta que decidí ponerme el pijama. El día pasó normal, yo me quedé leyendo un libro hasta que se hizo de noche, cené y me dormí. Al dia siguiente me desperté y me puse ropa deportiva, me desperté a las 5 de la mañana.
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Y fui hacia el salón, estaba Juan con el móvil.
Mati: ¿Que haces despierto?
Juan: No puedo dormir ¿Y tu que haces despierta, no se supone que te levantas a las 6:30?
Mati: Sí, pero había pensado en salir a correr un rato...
Juan: ¿Sales a correr por las mañanas siempre?
Mati: Emm...No, a veces, cuando me siento... -Suspiré y no acabé la frase-
Juan: ¿Cuando te sientes como?
Mati: Déjalo... No me siento nada... ¿Puedo salir?
Juan: Claro... Adiós.
Mati: Adiós. -Salí y comencé a correr, fui hasta un sitio alejando y alto donde se veía toda la zona en la que vivía, suspiré hondo y bebí de mi botella de agua, luego volví a casa, Juan se había quedado dormido en el sofá, no pude evitar sonreir pensando en todas las veces que veía sus directos y olvidaba todo lo malo, fui a el baño y me duché entonces ya me puse la ropa para ir a el instituto-
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