APOCALYPSE

CAPITULO 17

JAEMIN

Jaemin yace en su cama, rodeado por esas cuatro paredes, sintiendo que su estómago gira y gira en nudos. Ya había vomitado dos veces, pero las náuseas persistieron durante horas. Debería haberse ido a la cama desde un inicio.
No debería haber intentado usar sus poderes, otra vez.
Pero Jaemin quería saber qué estaba haciendo Jeno. Quería saber por qué había estado con sus padres y por qué estaba en el purgatorio, pero esto no era todo su razonamiento. No. Lo que más quería en ese momento era sentir algún tipo de conexión con Jeno, de nuevo. Quería sentir algo. Nada. Quería esto, aunque sabía que era algo completamente tonto.
Sin embargo, no esperaba oír a Jeno pensar en todas las formas en que quería torturar a su tía. No podía comprender la idea de hacer algunas de las cosas indecibles que cruzaron la mente de Jeno, mucho menos imaginar como en estos momento su tía debe de estar con un muslo sangriento y pulverizado de cerebro, carne y asador.

Se agrava severamente las náuseas de Jaemin cada vez que la imagen mental cruza su mente. Para empeorar las cosas, Jaemin de alguna manera logró llegar a Jeno. No significaba en su totalidad, pero logro que Jeno escuchara sus suplicas. Jeno parecía sorprendido como él, aun cuando Jeno lo podía oír, fue imposible mantener una conversación con él. No, no podía hacerlo. Lo hizo sentirse mal y extremadamente débil. Tanto como toda la situación sobresaltó a Jaemin y lo profundamente lo perturbó, no pudo evitar preguntar por qué Jeno haría tal cosa, sabiendo que no era lo que quería Jaemin. Tenía cosas mucho más grandes que hacer que matar a su tía para dañarlo, y cuidar de manera que haga tal cosa hace que las declaraciones anteriores de Jeno tuvieran menos sentido. Claramente no ha roto su vínculo, por lo que dejarlo aún tener la capacidad de sentir un sentido del amor y la pérdida de Jaemin, ¿todavía? ¿Por qué buscar venganza para él, en su lugar? Jaemin no sabía, pero no quería dejar sus esperanzas. Mientras el padre de Jeno le susurraba las cosas en su oído y lo controlaba como una marioneta, Jaemin sabía que nunca tendría una oportunidad de habar bien con Jeno, pero ¿Dónde quedaría Renjun? Jaemin sabía que en el fondo no podía dejar a Renjun, pero sabe muy bien que elegiría a Jeno en un abrir y cerrar de ojos si se le daba la oportunidad.
Renjun se merece algo mejor.
Jaemin se merece algo mejor.
Pero no juntos.
Un ligero golpe en la puerta de Jaemin le alerta de la presencia de alguien. La puerta se abre, causando una luz cegadora entrar en la habitación a través de la grieta. Jaemin frunce los ojos ante la insoportable luz brillante, tratando de concentrarse en el hombre que le habla.
"¿Puedo entrar?" La voz suave de Jungwoo pregunta educadamente mientras su cabeza asomaba, "tengo algo para ti".
Jaemin lentamente se levanta sobre sus codos, tratando de no agitar sus náuseas, de nuevo.
"Pasa", confirma, y Jungwoo entra con las manos detrás de la espalda.
"Así que... Yukhei me dio unas cuantas cosas para darte ", afirma Jungwoo mientras lentamente se dirige a la cama de Jaemin.
Jaemin toma un momento para procesar todo, y recuerda que Yukhei es el nombre verdadero de Xuxi.
"¿Qué? ¿Por qué? ¿Qué es?" Jaemin pregunta en profunda confusión, pero Jungwoo sólo le da una cálida sonrisa antes de sacar sus manos detrás de la espalda, revelando un suave oso de peluche blanco con un arco azul. El corazón de Jaemin duele mientras las lágrimas comienzan a formarse instantáneamente en sus ojos.
"¿Por qué te dio esto para mí?" Jaemin tartamudeo mientras toma el oso con las manos temblantes, sintiéndose confundido en cuanto a si quería rechazar el oso o abrazarlo tan firmemente, pensando que Jeno está ahí.
"Dijo que Jeno no podía soportarlo. Le dijo a Yukhei que también quería que tuvieras esto ", Jungwoo sostiene el anillo de Jaemin que Jeno le había dado.
Jaemin sin pensar lo toma y lo mira en blanco como lágrimas derraman de sus ojos.
" ¿Por qué?" Jaemin pregunta con una voz agrietada.

"Bueno... Yukhei me dijo que Jeno todavía te ama, y te extraña más de lo que está dispuesto a admitir," el gentil hombre le informa," no sé mucho más acerca de la situación, ni lo que planeas hacer con estos artículos ahora que están en su posesión, pero... He hecho mi parte."
Las respiraciones de Jaemin se vuelven torcidas y frenéticas como sus ojos se convierten en grifos. Aprieta el anillo en su mano y aprieta al oso fuertemente en sus brazos.
"¿Hay algo que pueda hacer para ayudarte a sentirte mejor?" Jungwoo ofrece, claramente sintiendo pena por Jaemin.
"por...por fa...favor vete ", titula Jaemin.
"Pero..."
"¡Vete!" Jaemin exige mientras se hunde lentamente de nuevo en su cama.
La habitación giraba más y más rápido a su alrededor, así que cierra los ojos lo más firmemente posible. Quería que todo se detuviera.
Volver a la forma en que era. ¿Por qué no podía estar contento con Jeno? ¿Por qué fue Jeno tan persistente en hacerle daño mientras lo defendía de una manera innecesariamente violenta? ¿Por qué quería que guardara estas cosas? ¿Pero quieren erradicar lo que tienen?
Nada tenía sentido, y sólo empeoró las cosas para pensar.
Jaemin oye que la puerta de su habitación se cierra, dejándolo con su solitario sollozar incontrolablemente mientras su mundo sigue cayendo sobre él.