Dejo que el tiempo pase mientras con el se consume mi alma.
Ojalá todo volviera a ser tan fácil como lo era antes, cuando no me preocupaba por absolutamente todo y sobrepensaba todo. El dolor en el pecho, la falta de aire y las lágrimas intentando convencerme de que estoy bien y que no debería de pensar en tantas cosas.
Ha vuelto, ella a vuelto.
No quiero que se quede, con ella duele todo tanto. Cada pequeña palabra, cada cosa es suficiente para hacerme cuestionar cualquier cosa. Y no quiero, no quiero ser ella, no quiero volver a medicarme, no quiero estar en casa encerrada, no quiero estar triste ni volver a autolesionarme.
Cada vez que siento que salgo del agujero algo me empuja y todo vuelve a ser lo mismo. Duele.