Él es de la antigüedad

Capítulo 16 Xiao Xiao

Después de la tormenta sangrienta, todos inclinaron la cabeza y se quedaron en silencio.

"¿Qué le pasa a este mundo?" Preguntó Fan Lin en voz baja.

"El mundo está enfermo."

Ruan Xiang sostuvo sus manos que temblaban debido a la muerte que acababa de experimentar.

"Como no puedo soportarlo, es mejor cambiarlo." Ji Rongzhi miró los cadáveres en todas partes y dijo tranquilamente: "Crea un paraíso".

"Bueno, eso es correcto."

Los ojos de Feng Yang brillaron, la venganza no es nada, él renació. ¿No debería haber una búsqueda más grande cuando regreses?

"Quiero construir un jardín de flores de durazno para ti."

Oye, construir un jardín de flores de durazno es tu meta dentro de diez años, no ahora. El corazón de Fan Lin se dividió en dos facciones en este momento, un lado se quejaba del giro del maestro de la trama, mientras que el otro lado aplaudía: ¡Este es mi héroe malvado, encantador y enloquecedor!

"Ese, este hermano mayor, por favor llévanos contigo", sonó una voz débil.

Todos se dieron la vuelta, una mujer desnuda se arrodilló frente a Ruan Xiang, probablemente al ver sus métodos sangrientos, pensando que él era el jefe de su grupo.

La mujer se inclinó hacia adelante y puso un gesto de rendición, obviamente muy hábil.

"No digas que no, solo soy un hermano pequeño."

Ruan Xiang vio el cuero cabelludo entumecido de Feng Yang cuando vio cómo el esclavo estaba eligiendo a su maestro, le preguntó a Feng Yang con respeto.

"Hermano Feng, ¿qué crees que debería hacer?"

Ruan Xiang sabía que Feng Yang estaba en los ojos de todos. Una habilidad basada en madera relativamente inútil, la habilidad no es tan poderosa como es. Sin embargo, solo pensando en la fruta mágica que comió antes, la imagen de Feng Yang en su mente era muy misteriosa, tenía la intuición de que debía estar asombrado.

"Hermano, hazlo bien, seguramente moriremos si nos quedamos", la mujer se volvió para inclinarse ante Feng Yang.

"Ahora que estos ladrones están muertos, puedes obtener sus armas y municiones para la defensa propia", Feng Yang levantó las cejas y dijo sin expresión.

"Esto... solo somos mujeres débiles..."

"¿Y qué?"

"Somos demasiado débiles. Si hay otro grupo de personas como este, nuestro destino será el mismo."

"Entonces espera, espera al próximo grupo de personas como nosotros y pídeles que te lleven"

"¿Cómo puedes hacer esto? No esperamos nada más, al menos nos envías a una base segura".

"Ir tras la base, ¿entonces qué? ¿Prostitución?"

La mujer apretó los dientes avergonzada y la desesperación brilló en su rostro.

"En lugar de arriesgar tu propia vida con los demás, es mejor animarte a ti mismo", se burló Feng Yang.

"En pocas palabras, solo somos gente común."

Gritó una voz aguda junto a él, una mujer con cicatrices en todo el cuerpo se apresuró.

"Entonces, ¿por qué no te mueres?"

Feng Yang entrecerró los ojos, aquellos que lo conocían sabían que esto era una señal de su ira.

"Tienes más heridas que esta mujer, ¿qué significa eso? Significa que no admites la derrota y no aceptas tu destino. ¿Qué? ¿Estás dispuesto a sacrificarte cuando encuentras a alguien que te salva?"