Truly love || JHS + MYG

O8.

HoSeok despertó al oler la comida.

Miró a su lado notando que el pelinegro no estaba en la habitación. Se levantó estirando su cuerpo y olfateó la almohada a su lado donde estaba el olor del alfa.

Un sinfín de sentimientos vienen a su mente, ya que básicamente estaba pasando su celo con un alfa y no era cualquier alfa, sino su destinado.

Él realmente quería y amaba al pelinegro, y sabía que le había sido difícil soportar su olor y no lanzarse encima de él como cualquier otro alfa hubiera hecho.

Aunque él también estuvo sufriendo el no poder besarlo ya que, a pesar de todo, que él quisiera no tenía sentido del todo, aunque sabía que YoonGi era una persona totalmente linda con él y de eso se había dado cuenta en el tiempo que habían convivido juntos.

Escuchó la puerta de la habitación abrirse y el alfa entró con una bandeja de comida, algo que le pareció tierno al omega.

— Buenos días. — Dijo el pelinegro.

— Buenos días. — Respondió el omega. — ¿Lo hiciste tú solo? —

— Así es, lo hice especialmente para ti. — Dijo el pelinegro sonriendo.

— No debiste hacer esto. —

— Claro que si, eres mi omega y por ende debo cuidarte y protegerte de todo. —

El pelirrojo desvió su vista sintiendo sus mejillas calientes debido al sonrojo, sin duda YoonGi era alguien totalmente lindo.

Unas horas después, una vez que ambos terminaron su desayuno, el pelinegro fue a dejar los platos en la cocina.

El omega se quedó en su habitación mirando el techo del lugar, teniendo un pequeño debate mental que no lo dejaba en paz desde la mañana.

Pasaron al rededor de 3O minutos y el pelinegro no regresaba a la habitación. HoSeok curioso se levantó de la cama y salió de la habitación en busca del pelinegro.

Pero su corazón se aceleró al notar que YoonGi tenía un intenso olor a café, más de lo normal y eso solo podía significar una cosa.

YoonGi había entrado en celo.

El omega sintió su lobo brincar y querer lanzarse al pelinegro pero simplemente no podía.

— ¿Yoon... Gi? — Dijo nervioso.

— HoSeok... Vete, no quiero hacerte daño. — Dijo el pelinegro conteniendo su lobo para no lanzarse sobre el omega. — Me iré a mi casa y le diré a alguien que le avise a tu amigo que venga a... —

Las palabras del alfa se quedaron en el aire al sentir los labios del pelirrojo sobre los suyos de manera desesperante.

El pelinegro colocó sus manos en la cintura del omega, besando los carnosos labios de este, pero se separó para volver en si.

— HoSeok, no quiero hacerte daño, no hago esto por mi, yo puedo esperar hasta que estés listo. — Dijo el peligro mirando los ojos café del contrario.

— Quiero hacerlo, Yoonie, se que no me lastimarás para nada, simplemente necesitaba aclarar algunas cosas pero me siento preparado para esto. —

Y esta vez el pelinegro atrajo el rostro del omega y unió sus labios en un beso hambriento y desesperante.

Con dificultad ambos caminaron hasta la habitación del pelirrojo y depositó el cuerpo del menor con sumo cuidado en la cama.

El alfa recorría cada parte del cuerpo del pelirrojo mientras besaba los labios de este. Logró quitar su ropa, notando la blanquesina piel del omega y dejó besos en todo su cuerpo mientras el menor jadeaba al sentir los labios y lengua del alfa.

Poco a poco la atmósfera se fue intensificando y en un abrir y cerrar de ojos ambos se encontraban totalmente desnudos mientras se besaban transmitiendo todo su amor al otro.

El pelinegro lamio tres dedos y coloco los primeros dos en la mojada entrada del omega, quien dejo salir un sonoro gemido, y comenzó a hacer movimientos ligeros en el interior del pelirrojo para después introducir el tercero, escuchando jadeos por parte del omega.

— Yoonie... Hazlo por favor. — Rogó el pelirrojo.

— ¿Qué quieres que haga, bebé? — Dijo el pelinegro sonriendo.

— Hazme el amor, Yoonie. — Pidió el omega.

El pelinegro volvió a besar los labios de su omega y se colocó entre sus piernas.

Alineó su miembro en la dulce y mojada entrada del pelirrojo y comenzó a entrar en ella cuidadosamente para no lastimarlo.

La habitación era un mar de jadeos y gemidos por parte de ambos chicos. El omega se sentía en las nubes al sentir el miembro del alfa dentro de él.

Una vez el pelinegro entró totalmente en él, comenzó a moverse lentamente para que el omega se acostumbrara al tamaño de su miembro y poco a poco aumentó la velocidad de estas.

El omega colocó sus manos en la espalda sudada del pelinegro clavando sus dedos en esta, sus piernas se enrollaron en su cintura y así profundizar las embestidas que este le daba mientras soltaba múltiples gemidos por la sensación que sentía en el momento.

El pelinegro tomo el miembro de su omega y comenzó a masturbarlo haciendo que el pelirrojo se estremeciera y soltara un gemido al sentir la mano del alfa.

— Mgh... Yoonie... No puedo más... — Dijo el omega en un hilo de voz.

— Córrete para mi, bebé. —

Y tal como lo pidió el pelinegro, el omega dejó salir su esencia manchando ambos cuerpos.

— Marcame, Yoonie... — Pidió el pelirrojo.

— ¿Estás seguro, HoSeok? —

— Sí, solo hazlo. —

El alfa se acercó al cuello del pelirrojo, lamió y dejó salir sus colmillos para enterrarlos en este y así marcar a su omega.

Un agudo gemido salió del pelirrojo y así el alfa termino de correrse en el interior del omega, dejando salir su esencia y comenzando a formar un nudo dentro de él.

Lamió la sangre que salía del cuello del pelirrojo y depositó un beso en sus labios.

Una vez el nudo bajó, el alfa salió cuidadosamente del pelirrojo y se recostó a su lado sintiendo como el omega se acurrucaba en su pecho como un pequeño cachorro en busca de amor y cariño.

— Te amo, Yoonie. — Dijo el pelirrojo.

— Yo también te amo, Hobi. — Dijo el pelinegro besando la frente de su omega.

El omega levantó su vista y dejó un amoroso beso en los labios del pelinegro.

Uniendo nuevamente sus cuerpos en uno solo.

‎°♡━۰𓊆 🌱 𓊇۰━♡°