El comienzo

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Voy a contar una historia, sobre el día que pude ver la gloria y segundos después la vi desvanecer...

Hola me llamo Isaías;  yo era un chico de un pueblo muy humilde, se podría decir que tuve una vida llena de lujos, pero no siempre fue así, nací en Balconchán (España) viví allí hasta que cumplí 17 años. La vida allí no era muy fácil y no teníamos el suficiente dinero para mudarnos, no jugaba con los chicos de mi edad porque casi todo el tiempo estaba trabajando o ayudando a mi mamá en la panadería. 

Un día común y corriente mi mamá me mando a entregar el pan como lo hacía habitualmente, cuando terminé de entregar el pan iba de regreso a casa cuando encontré 5 euros, los recogí y me compre un boleto de lotería

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Un día común y corriente mi mamá me mando a entregar el pan como lo hacía habitualmente, cuando terminé de entregar el pan iba de regreso a casa cuando encontré 5 euros, los recogí y me compre un boleto de lotería. Regresé a casa a contarle todo a mamá; ella se puso muy feliz porque si ganábamos ese dinero podría ayudarnos a comprar comida, guarde el boleto de lotería bajo mi almohada y me quedé dormido. Al día siguiente mientras estábamos desayunando pasaron por la radio los resultados de la lotería, saque el boleto sin ninguna esperanza de ganar y sorprendentemente los números coincidían con el boleto, rápidamente fui a reclamar mi premio y me dijeron que había ganado la suma de 1 millón de euros, no podía creerlo mi vida y la de mi mamá estaba a punto de cambiar.
Regresé a casa a darle la noticia a mi madre. No pasaron más de dos horas y ya tenía planeado lo que quería hacer con el dinero.

Nos mudamos a Sevilla (España) compramos un apartamento, un carro y nos dimos un par de lujos, también aproveche el tiempo para conocer chicas y divertirme un poco. La vida en Sevilla era muy genial hasta que un día mi mamá se enfermó, no se sentía muy bien así que la llevé al doctor. Me dijeron que estaría unos días en el hospital para poder examinarla y en tres días me darían los resultados, estuve pensando si esto de mudarnos a Sevilla no fue buena idea, mi mamá era mi única familia y no quería perderla. 

La chica de la senda rojaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora