De pequeños: InoHima, BoruSara, MitsuCho

Sarada...

Habían pasado cinco días de todo el caos, el equipo de investigación había partido hace tres días y todavía no tenían ninguna noticia sobre ellos. Los ninjas que habían quedado en las ladeas hacán rondines constantes y claramente todos tenían miedo al no saber con certeza de lo que ocurría. 

Hoy le tocaba hacer guardia a Sarada, Shikadai y Metal Lee en una parte del centro de la aldea. 

Shikadai: Tengo mucho sueño pero a la vez mucha hambre, que fastidio es vivir- dijo mientras cerraba los ojos- 

Metal Lee: ¡No estás viviendo su juventud al máximo!- dijo mientras hacia algunas flexiones- 

Sarada no les tomaba importancia, ella seguía pensando en esa chica Kaori, realmente le desagradaba, ni siquiera soportaba estar mucho tiempo cerca de ella. Que bueno que no les tocó hacer la guardia juntas, se hubiera estresado demasiado. 

Shikadai: Al parecer Sarada no está prestando mucha atención- mencionó mientras la veía- 

Metal Lee movió un poco a Sarada para ver si así reaccionaba pero nada, ni un solo movimiento.

Metal Lee: Al parecer tendré que informar a nuestros superiores que Sarada no está cumpliendo con su deber y deban dejar de considerarla aspirante a hokague- claramente era mentira pero necesitaba sacar a Sarada de su "trance"- 

Sarada: ¿Eh?...¿¡Eh!? No, no, no. Pondré atención, lo siento. 

Shikadai: ¿Qué ocurre?- preguntó con preocupación, no era normal verla así- 

Sarada: Nada... nada- mantuvo su mirada fija a la calle por si algo ocurría- 

Shikadai: Claro... ( Boruto )- pensó, Sarada solo se ponía así cuando algo pasaba con el chico- 

En la casa Uzumaki cierto rubio desde hace cinco días se encontraba preocupado, su mejor amiga... la chica que le gustaba se había ido enojada y no sabía el motivo. Decidió levantarse de su cama para ir a la habitación de su hermana, seguramente ella podría tener alguna idea. 

Boruto: ¡Hima!- dijo entrando bruscamente a la habitación- ¿Hima?- preguntó porque su hermana estaba escondiendo algo detrás de su espalda- 

Himawari: E-eh... ¿eh?- soltó con nerviosismo- ¿Qué necesitas hermanito? - dijo mientras escondía la hoja- 

Boruto :Amm... Ah si, necesito que me ayudes a entender algo- habló restándole importancia a la rara actitud de su hermana- 

Himawari: Claro- sonrió- 

Boruto: El otro día que todos estábamos hablando Sarada se fue muy enojada, ¿tienes alguna idea de por qué se puso así?- habló muy preocupado- 

Himawari: ( Que hermano tan tonto tengo )- pensó- ¿Recuerdas a ciertas chica llamada Kaori y cómo estuvo pegada a ti? 

Boruto: ¿ Kaori? Pero ella no hizo nada malo...

Himawari: Agh Boruto, no puedo creer que no entiendas algo tan simple. 

Boruto: Kaori... Sarada enojada por las acciones de ella... ¡Si! ¡Sarada se enojó porque Kaori estuvo pegada a mi! ¡Se puso celosa!- gritó porque al fin había encontrado la respuesta- ¡Gracias Hima!- salió corriendo de la habitación para dirigirse a la suya, estaba apunto de tomar sus cosas para salir en busca de Sarada y pedir perdón y burlarse un poco de ella. Pero después recordó que no podía salir, ¿ahora que haría? ¿Cómo pediría disculpas? Pensó mientras se sentaba frustrado en su cama- 

Himawari: Y... ¡Listp!- habló cuando terminó de atar la carta a la pata de un ave mensajera que llevaría la hoja a cierto chico de piel pálida- Ahora si linda llévale la carta a Inojin. 

El ave partió hacía la casa Yamanaka y al llegar a la ventana del chico y se paró ahí esperando a que Inojin abra. 

Inojin: Hola pequeña, ¿esto es para mi?- dijo cuando el ave mostró la carta atada a su pata- Bueno- desató el listón que mantenía la hoja amarrada- De... Hima. Para Inojin- leyó con lentitud hasta que se dio cuenta de quien enviaba la carta- ¡Es una carta de Hima!- gritó, estaba tan feliz- 

De: Hima

Para: Inojin

¡Hola Inojin! Soy Hima obviamente. 

Encontré una manera de comunicarnos, realmente extraño estar contigo hablando de cualquier cosa que se nos ocurriera. 

Estoy ansiosa de verte nuevamente aunque sea haciendo guardoa, al menos ahí podremos hablar. 

Emm... lo siento, no pregunté como estás, perdón estpy tan emocionada de tan siquiera escribirte. Ahora si, ¿cómo estás?... Yo estoy muy bien, bueno, aburrida en casa pero bien. No miento, en estos cinco días he visto al menos tres series y siete películas ¡Un nuevo récord! Nuestro récord era de dos series y cuatro películas en una semana, no sabes cuanto deseo romper otro récord contigo. 

Todo antes era tan divertido y no lo apreciaba. 

¡Viene mi hermano! Luego te escribo, también espero tu carta. Nos vemos el martes.