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Casi a la hora de la reunión, Refugio se despidió de su marido.

R: ¿Cenas en casa esta noche?

J: Si, haré todo lo posible.

R: Está bien.

La secretaria veía toda la secuencia.

Refugio se acercó a besarlo.

R: Nos vemos luego.

La secretaria no podía creerlo. ¿Era su esposa?

Xx: Disculpe. Quería disculparme por lo de hoy.

R: No hay porque disculparte. Te entiendo. No estabas al tanto de la situación. 

Xx: Por favor, no haga que me eche.

R: ¿Cómo crees que haré eso? Solo fue un mal entendido, nada más. Si necesitas algo pídeles a tus compañeras ayuda.

Xx: Muchas gracias, señora.

R: Llámame Refugio.

Xx: Está bien, Refugio.

Por la noche.

Velas aromáticas, jacuzzi listo, champán enfriando en hielo. Todo para la romántica cita de Julián y Refugio.

Los empleados estaban en su semana de descanso, así que estaban solos.

Refugio escuchó la puerta de la casa abrirse.
Así que lo esperó en la cima de la escalera.

R: Buenas noches

Apenas se veía por la luz tenue de la sala.

J: Amm

Sin palabras, así quedó el juez cuando vio la silueta de Refugio reflejada en la sombra por las luces tenue.

Refugio lo ayudó a quitarle el saco, dejar el maletín en el sofá y llevarlo a la habitación.

R: Acompáñeme señor Juez.

Entraron a la habitación.

R: Entre cuando yo le diga - Le dijo y luego se fue al baño.

Para Julian esos minutos parecían una eternidad.

Decidió entrar y la encontró, sirviendo las copas de champán.

J: ¿Y esto?

R: Está demasiado tenso, Señoría - Masajeando su cuello ya dentro del jacuzzi.

J: Solo no pares.

Un poco después, la pasión abordó el jacuzzi. Refugio montaba a Julián sensualmente a tal punto de que él enloqueciera.
Después, estaba Julián apoyado contra la cabecera del jacuzzi y Refugio su espalda en su pecho.

J: Nunca te vi tan apasionada, mi amor.

R: Hay cosas que aún no salieron a la luz.

Julián fue por las copas.

J: Hoy al salir del trabajo, estaba pensando en hacer un viaje solos.

R: ¿Y tus hijos? - Recibiendo la copa

J: Están en épocas de exámenes, los invité pero dijeron que aún tenían pocos.

R: Me parece razonable.

Tiempo después.

Amarlo eso es. Refugio lo amaba con su vida, no le importaba el dinero de ese hombre, solo que la amara como ella a él. No le importaba tantas las joyas que él le daría, su amor es lo más importante....

Miraba a Julián como jugaba con su nieta, pensaba darle un hijo. Sería injusto y egoísta que ella tuviera 3 y él ninguno. 
Sonrió viendo a su esposo. Lo admiraba no solo como Juez si no como hombre: Maravilloso, humilde y hermoso.

Refugio se acercó a ellos, Patricio y Olga estaban ahí y los demás ya se habían ido.

R: ¿Por qué no se quedan? La casa es muy lejos y no quiero que manejes hijo - Tomando su vaso de cerveza y bebiendo. 

J: No es mala idea.

O: Estoy de acuerdo con tu mamá Patricio....Bebiste un poco más.

La niña empezó a bostezar eso le dio ternura a los adultos. 

J: Mandé a que hagan una habitación para la bebé en ocasiones como éstas. 

P: Muy bien. Entonces iré a acostarla. 

O: Te acompaño. 

Ambos jóvenes se levantan para llevar a su hija a la recámara. 

R: Estaba pensando..... - Se sienta en las piernas de Julián - Que podríamos.....

Suena el celular de Julián ella se queja y le pide que no conteste.

J: Debo  hacerlo, tengo un estudio jurídico - ambos ríen.

R: Iré por más - Toma la botella de cerveza para tirarla al tarro de basura

Poco después, Julián termina la llamada. Va por Refugio y la encuentra buscando en el refrigerador una botella de cerveza. 

J: Creo que has bebido suficiente - Cerrando la puerta del refrigerador 

R: Nunca tomo de esa forma - Se agarra del brazo de él

J: Lo sé amor - Abraza a su mujer de la cintura - Ahora irás a dormir. Yo le indico a los muchachos que habitación van a usar.

Refugio ya estaba dormida en su pecho, él la alza como recién casados y la acuesta en la cama. 

A la mañana siguiente

Patricio, Olga, la bebé y Julian estaban en el porche del jardín desayunando fruta, jugo y café.

R: No volveré a tomar de esa manera jamás - Con la mano en su frente y sentándose en la mesa con ellos.

P: Me estás cambiando a mi madre Julian - Y luego bebe de su café

R: Diana por favor tráeme unas aspirinas y agua.

D: Si señora.

J: ¿Cómo amaneciste?

R: Fatal.

J: Tómate el café y estarás mejor - Besando su mejilla. 

O: Iré a cambiar a la bebé y después a ver a mamá. 

P: Y yo al bufete - Levantándose. 

Julián y Refugio (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora