𝟎𝟖 𝐝𝐞 𝐍𝐨𝐯𝐢𝐞𝐦𝐛𝐫𝐞 𝟐𝟎𝟏𝟗

26 de Octubre 2021

Jake había llegado temprano, puesto que la madre de su padrastro tenía un negocio en la feria y ahí estaba desde la tarde trabajando. Le pagaban y se divertía con su padrastro, hermanos y la familia de su padrastro. Su padre estaba todos los años en la cruz roja así que estaba esperando rezando por no verlo. Escogió ese lugar como punto de reunión porque era en único lugar que los tontos de sus amigos conocían.

Después de unos minutos llegaron y miró de pies a cabeza a Sunghoon. Sintió su corazón latir muy rápido y se abrazaron como era de costumbre.

Fueron hacia los juegos y decidieron subirse al martillo. Jungwon, Heeseung y Ni-ki corrieron hacia los únicos tres lugares juntos y los dejaron los otros dos asientos vacíos. Jake se sentó en la esquina de lado izquierdo, a lado de Jake había un niño como de 9 o 10 años y después estaba Sunghoon. Ya no había más asientos y ya habían pagado así que no les quedaba de otra.

El juego comenzó a moverse y casi de inmediato comenzaron a escucharse los gritos de Heeseung, Ni-ki y Jungwon. Jake no quería escucharse muy gritón así que lo hacía de vez en cuando mientras moría de ganas por gritar todo el tiempo. Sunghoon trataba de no gritar, pero de vez en cuando salían uno que otro grito. Se miraban ignorando al niño en medio de ellos dos hasta que caían en cuenta que estaban gritando y temblando a lado de un niño pequeño que no tenía ningún tipo de expresión en su cara. No parecía tener miedo.

Bajaron del juego apenados por el niño. No tardaron no tardaron los comentarios sobre eso y comenzaron a buscar más juegos a los que subirse.

Entraban y salían de los juegos muy divertidos y se burlaban entre todos de todos, nadie se salvaba.

Comenzaron a caminar por los restaurantes porque tenían que buscar a la mamá de Jungwon que le iba a dar más dinero. Mientras caminaban en silencio Jake comenzó a sentir la mano de Sunghoon. Avergonzado comenzó a tomar su mano lentamente hasta que por fin entrelazaron sus dedos. Ni-ki que los miraba desde atrás, tomó varias fotos emocionado.

Casi llegando a donde estaba la mamá de Jungwon, Sunghoon soltó su mano haciendo que el corazoncito ilusionado de Jake se rompiera un poco.

- Esa señora es homofobica.

Soltó Sunghoon.

Después de que Jungwon tomó su dinero comenzaron a caminar otra vez y Sunghoon volvió a tomar la mano de Jake esta vez sin soltarla.

- Vamos a la granja - Ni-ki brincó apuntando hacia donde era el camino y todos fueron, realmente querían ir.

Vieron a los reptiles, burros, mulas, gallinas, puercos, y más animales. Pero cuando llegaron a la parte de las vacas se emocionaron como si nunca hubiéran visto unas. Fue entonces cuando Heeseung tomó la única foto existente de ese día, le tomó foto a una de las vacas.

Después de quedarse por mucho tiempo viendo las vacas salieron caminando por el pasillo del terror como le habían llamado ellos, pues las atracciones y juegos de ahí solo eran de terror. Al final del pasillo del terror estaba la Casona del Terror. La razón de ir.

- Hay que entrar a la Casona - sugirió Heeseung.

- Si. A ver que pasa - en ese momento un grupo de 5 personas salieron corriendo de la casa mientras un ruido de una motosierra se escuchaba. Y decidieron entrar todos.

- Ni-ki entra primero. Tú eres ateo - Jake dijo mientras se soltaba poquito de la mano de Sunghoon.

- Si que entre Ni-ki - hizo más fuerte el agarre de sus manos y lo miró brevemente.

Después de una pequeña discusión Sunghoon decidió ser el que iba a estar adelante, Jake iba detrás de él tomados de la mano, Jungwon iba agarrando la camisa de Jake, Ni-ki y Heeseung iban abrazados juntos.

Al entrar cerraron la puerta por donde entraron quedando encerrados en cuarto obscuro. Sunghoon tocó la puerta que estaba frente a todos y de su costado salió alguien por una pequeña rejilla que estaba en lo más alto de la pared. Cabe decir que el cuarto era de un aproximado como de 1.80 de largo así que logró tocar el pelo y el hombro de Jake haciéndolo gritar. Y Sunghoon lo puso detrás de él proteguiendolo.

- Abre la puerta - Sunghoon habló de forma demandante y segura

- Toquen la puerta tres veces - sin más volvió a su escondite y Sunghoon tocó la puerta. Esta fue abierta por dos personas muy altas que parecían zombies, pero que no lo eran. Mientras entrábamos tocaban sus cabezas y una vez que todos estuvieron dentro cerraron la puerta.

Comenzaron a seguirnos por un pasillo no muy largo que era completamente oscuro. Corrieron todos juntos en ilera y sin darse cuenta Ni-ki cayó al suelo, les gritó y Heeseung regresó por él.

Los hombres dejaron de seguirlos, pero ahora el camino era más angosto y había personas atrapadas en las rejas queriendo comerselos. Volvieron a correr entre gritos y risas. Llegando a un cuarto morado con una cama. Era el escenario del exorcismo. Jake cerró su ojos con fuerza mientras Sunghoon tomaba su cabeza haciendo que se escondiera en él y le decía cosas como "esta bien, yo te estoy cuidando", "ya casi vamos a salir", "no te va a pasar nada mientras yo esté aquí".

Salieron de varios pasillos y cuartos tenebrosos hasta que de la nada salió Billy en su triciclo.

- Tienen que darme a alguien para pasar.

- ¿A quién quieres? - preguntó sunghoon mientras ponía a Jake detrás de él

- Quiero a Ni-ki

- Bien. Te damos a Ni-ki

Heeseung y jungwon arrastraron a Ni-ki quien se resistía. Pasaron corriendo el pasillo jalando a Ni-ki con ellos, no lo iban a dejar. Además era un juego.

Recorrieron un gran pasillo oscuro sin algún tipo de distracción. Jake comenzaba a soltar pequeños sollozos y gemidos de miedo. Sunghoon paró de caminar. Tomó sus mejillas y pego sus labios con los de Jake en un pequeño beso.

- Tranquilo, ya casi salimos.

Estaban cerca de la salida cuando de la nada comenzó a escucharse un sonido de motosierra. No podían ver de donde venía, pero sentían que era desde adelante por lo que Jake se negaba a caminar. Estaba a punto de llorar del miedo. Fue entonces que Sunghoon lo tomó con más fuerza y en su oído le dijo lo que siempre había esperado escuchar

- Jake, me gustas

Quería responder, pero tenía mucho miedo. Sus piernas flaqueaban y cada vez se abrazaba más de Sunghoon. Volvió a tomar sus mejillas y trató de darle otro beso, pero sus amigos los empujaron. Los sonidos de la motosierra comenzaron a escucharse desde atrás.

Corrieron lo más rápido que pudieron entre la obscuridad, el pasillo era muy largo. Cuando por fin pudieron ver la luz corrieron más rápido respirando aire fresco.

Jake soltó a Sunghoon y limpio su sudor y algunas lágrimas que habían salido. Todos respiraron hondo y comenzaron a caminar hacia la salida de la feria. Llegaron cerca de los puestos de los baños y Jake paró de caminar.

- Yo me quedo aquí. Adiós, se cuidan mucho.

Heeseung, Ni-ki y Jungwon se despidieron y se fueron juntos. Iban a dormir en casa de Hee.

Sunghoon se quedó mirándolos, esperando a que notarán su ausencia. No caminaron mucho cuando se percataron que Sunghoon no los acompañaba, voltearon encontrándose con Jake y Sunghoon juntos, así que decidieron esperarlo

- ¿Si escuchaste lo que te dije?

- Si

Sunghoon sonrió, despidiéndose con un beso en la mejilla y salió corriendo donde estaban los chicos. Jake se sonrojó y fue hacia los baños en los que trabajaba la familia de su padrastro.

Habían pasado media hora desde que se fueron y se encontró con Sunoo en la feria. Emocionado le contó lo que pasó y al día siguiente le dijo que Sunghoon había echo lo mismo.