Los Juegos de Finnick

Capítulo nº1

Mi nombre es Finnick Odair,tengo 14 años,vivo con mi madre y mi padre en una de las mejores casas del Distrito 4,voy a la escuela todos los días excepto el domingo,todos son mis amigos,se podría decir que soy el mas popular de la escuela,o al menos de mi grado. Hoy es el día de la cosecha,nada me da mas miedo que ir a ese lugar,a esa arena,estar encerrado junto a otras 23 personas que lo único que quieren es matarte. Le gusto a casi todas las chicas de mi grado,e incluso de grados mayores,pero no he encontrado a la chica indicada. Me levanto de mi cama intentando no llorar,que es lo que hago al levantarme cada cosecha a la que he ido,las cuales no han sido muchas ya que esta es mi tercera. Saliendo de mi cuarto,a la primera persona que me encuentro es mi mamá:
-Tranquilo amor,no pasa nada, hay chicos que tienen su nombre en la tómbola muchas mas veces que tu.
Lo cual es cierto,ya que vivimos bien nunca he tenido que pedir teselas, que son suministros muy escasos de grano y aceite que deberían valer un año para una persona,las cuales te dan, a cambio de que tu nombre esté más veces en la tómbola. El mío solo estará 3 veces,pero aún así la idea me espanta. Me siento en el comedor y solo desayuno un pan de mi Distrito untado en mantequilla. Mis padres no paran de decirme palabras de motivación, y yo no les respondo hasta que termino mi pan y les digo:
-Saldré de pesca,volveré a tiempo para ir a la cosecha.
Pescar,la única actividad que me hace olvidar cualquier cosa en el mundo,lo hago casi todos los días ya que vivimos a unos 15 metros de un lago. Agarro mi tridente,que lo escondo en una arboleda que hay a unos 5 metros del lago y me voy a pescar. Mis padres no saben que tengo este tridente,no mataría a ningún humano ya que tiene un filo muy pequeño,pero seguro si un Agente de La Paz me lo viera,lo cual es sorprende que no haya pasado ya que el Lago es de las zonas más vigiladas del distrito,me mataría o me agarraría a latigazos. Empiezo a buscar por el agua ser vivos,y por un momento me olvido de todo y disfruto haciendo lo que mas me gusta hacer en el mundo.