~ Lᴀ Cʜɪᴄᴀ Pᴇʀғᴇᴄᴛᴀ ~ [𝚃𝚛𝚊𝚍𝚞𝚌𝚌𝚒𝚘́𝚗 ]

Cᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ 1

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𝐋𝐚 𝐭𝐞𝐦𝐩𝐨𝐫𝐚𝐝𝐚 𝐝𝐞 𝐜𝐚𝐳𝐚.

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Draco Malfoy, aristócrata extremadamente guapo y el soltero más solicitado de Hogwarts estaba furioso.

De nuevo.

La temporada de caza finalmente había comenzado.

Los magos de sangre pura de familias ricas y prominentes de todas partes ahora buscaban ansiosamente en la escuela a su esposa perfecta, preparándose para casarse y continuar con el linaje familiar que se les había confiado. Era una tradición mágica hecha y mantenida en cada antigua familia mágica cuando su hijo cumpliría diecisiete años y Draco, habiendo cumplido diecisiete a principios del verano pasado, ya se acercaba a su fecha límite.

Era una práctica bien conocida que si un hijo no produjera una novia digna para la fecha límite asignada, su padre asumiría la responsabilidad de elegir por él. Draco no podía permitir eso.

Necesitaba encontrar a su chica perfecta. Y rápido.

A su alrededor, vislumbró a Blaise, Crabbe, Goyle, Longbottom e incluso Weasley observando a las mujeres esparcidas por la escuela, sin duda ya comenzando la búsqueda de su futura esposa e hijo.

Su propio padre, Lucius Malfoy, lo había estado regañando durante todo el verano para que se encontrara una novia que pronto le produciría los futuros herederos que tanto necesitaba para la línea de la familia Malfoy. Ahora que Harry caracortada Potter finalmente había provocado la caída de Voldemort ese año, todos estaban a gusto en el mundo mágico y los Malfoy podían concentrarse una vez más en otra prioridad: la procreación.

Aunque el propio cararajada se había negado a creerlo, su padre en realidad había estado trabajando como espía para la Orden que Dumbledore había iniciado en su quinto año y había estado trabajando para la luz desde entonces. Él y Draco tenían que mantener la fachada, por supuesto, actuando como si odiaran cualquier cosa que tuviera que ver con sangre sucia y Dumbledore, pero la verdad era que tanto Lucius como Draco eran cualquier cosa menos malvados.

Claro, Draco era un idiota de vez en cuando. Está bien, borra eso. Era un idiota con todas las personas que conocía, pero no era Voldemort, eso era seguro.

Se estremeció ante la idea. ¿Cómo podría ser otro maníaco enloquecido y hambriento de poder empeñado en dominar el mundo? Vaya, el hombre necesitaba seriamente una vida. Pasó todo el tiempo tratando de buscar a un niño y, al final, trajo su propia muerte. En opinión de Draco, era un completo idiota.