Un paso a la vez *Mabill*

Capítulo 9

Le toma exactamente tres días pensar en el trato que él le había ofrecido y Mabel Pines escribió una lista. Ni siquiera pensó en por qué realmente le importaba pensar en eso. Pero luego, al mirar a Bill tan impotente, no pudo evitar el sentimiento de culpa que la invadió. Incluso si era malvado, nadie merecía estar solo.

Le toma otros dos para reunir el coraje de invocar al demonio -menos mal que le había dado suficiente tiempo y no la acosaba con pesadillas- y recitó en su cabeza el hechizo de invocación que hasta el día de hoy no quiere saber cómo. rápido lo había aprendido.

"Triangulum, entangulum. Veneforis dominus ventium. ¡Veneforis venetisarium!"

La sensación que tiene no es agradable y por un momento piensa que todo a su alrededor se vuelve azul claro antes de que su entorno se vuelva blanco y negro y Bill está de pie allí con una sonrisa demasiado grande que la mantiene inmovilizada. Ella le entrega una lista que él no puede leer y luego continúa con lo que ella quiere y lo que él no puede hacer.

Él está bastante divertido por sus elecciones, para empezar, ella quería recuperar su voz y no la voz de otra persona. Quería su propia voz y nada más. Lo segundo que pidió fue una salida del paisaje onírico para cuando quisiera -él casi quiso negarlo, pero simplemente asintió- y acceder a él en cualquier momento. Lo tercero que le pidió fue que él no torciera su promesa de ninguna manera. La cuarta, y por mucho la que lo tomó más desprevenido, fue que ella queríaque el recuperará su visión solo cuando estaba en el paisaje onírico, cualquier otra cosa que no fuera eso no contaba.y el volveria a su discapacidad.

Bill le dio su palabra y mientras las llamas azules envolvían lentamente sus manos mientras se estiraba para que ella las tomara, Mabel solo podía pensar en una cosa mientras tomaba su mano y sellaba el trato. Realmente esperaba no estar cometiendo un error.

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Se dijo a sí mismo que era un trato simple, que la mujer solo lo hizo porque no quería enojarlo y mantener a salvo a su hermano gemelo. No porque ella se preocupara por él o por su dilema, que estaba solo y que tenía una discapacidad que solo podía resolverse con ella cerca. 
Aún así, a una parte egoísta de él le gustaba imaginar que ella solo había accedido a hacer un trato con él después de haber visto lo desesperado que estaba por no haberlo dejado solo otra vez; siempre se regañaría a sí mismo por dejar que sus inútiles emociones lo dominaran. lo mejor de él- y que disfrutaba poder hablarle libremente con su "nueva" voz. Que a ella le gustaba bailar con él al son de la música clásica y que no intentaría irse temprano incluso cuando él se ponía demasiado delicado o la hacía sentir incómoda, porque disfrutaba de su presencia como él lo hacía con la de ella

Él la escuchaba hablar de cosas triviales y de cómo sus padres habían decidido no viajar, y cómo ella estaba segura de que él tenía algo que ver y él lo negaría. 
Pero ella se dio cuenta y nunca dijo nada al respecto. Le encantaba verla tejer y acariciar a su cerdo y contarle sus pequeñas y tontas peculiaridades que encontraba entretenidas al mismo tiempo. 
Calentaría su pecho de una manera que haría que su viejo yo se gritara a sí mismo con disgusto y desaprobación, pero ahora lo haría sonreír a él y no a los que solo tenían intenciones maliciosas para ellos. 
Una sonrisa verdadera, que ella había dicho que le gustaba mucho. Y no estaba seguro de si el sentimiento que sentía cada vez que ella lo felicitaba era el antiguo o uno completamente diferente.

Luego, entre estas emociones, estaba esta emoción aún creciente por la vergüenza y la ira que se había asentado en lo profundo de su alma. En un momento de debilidad, él le había dicho que estaba solo, tan solo, que estaba dispuesto a cambiar un trato como este solo por poder pasar sus dedos por su hermoso cabello o tomar su mano. cuando salían a la ciudad con su hermano y comían helado. Que cada vez que se abrazaban y él percibía el agradable olor de ella, que solo podía describir como de ella y solo de ella, no lo hacía desfallecer e intentar que ella le prestara más atención.

Está necesitado y solo.