—☮️—
Surin estaba aburrida. No, no solo eso. Más bien aburrida a morir.La vida en su pueblo natal era tranquila, y por lo mismo no se comparaba en nada a la vida que llevaba en Seúl. Ahí podía ir a muchas tiendas y cafés, también salir a lugares turísticos e ir a beber a bares muy bonitos acompañada de chicos guapos. En cambio, en el pueblo, su casa estaba ligeramente alejada y tenía que caminar varios minutos para ir a la tienda de conveniencia más cercana. Lo más divertido era ver cómo el tren pasaba cada una hora, ¿pero quién tenía tiempo para eso?
—Por Dios. Solo llevas un día aquí, hija. No creo que la vida en comparación a la ciudad sea tan distinta, ¿o sí?
Surin golpeó la mesa, no pudiendo creer lo que acababa de escuchar.
—Claro que es distinto. Aquí no hay dónde ir. ¡Realmente me aburro!
—Esto pasa porque llevas mucho tiempo en la ciudad... Ya ni siquiera debes conocer el pasto o la tierra —se movió por la cocina yendo hacia la sala de estar para abrir el cajón de un mueble—. Se me había olvidado... Encontré esto mientras limpiaba tu cuarto para cuando llegaras. Tal vez te entretenga un poco.
Le extendió un teléfono antiguo que había utilizado cuando estaba todavía en el pueblo estudiando, de ello ya habían pasado un par de años. Surin lo miró con nostalgia, recordando los momentos de esa época.
—Gracias, ya no recordaba que lo tenía.
Dio vuelta el aparato, viendo que en la cárcasa tenía unas pequeñas fotos pegadas del novio que tenía en ese tiempo.
—¿Quieres que las bote?
—No, no. Yo lo haré.
Se puso de pie para abandonar la cocina e ir hacia su habitación. Sus ojos no se apartaron de las imágenes. Realmente se veían tiernos, aunque no pudo evitar pensar en que se veía un tanto fea en ese entonces. ¿Cómo había sido posible que hubiera salido con ese chico por tres años? Para haber sido un romance adolescente, había sido bastante bueno. Al menos hasta que sus caminos se separaron cuando llegó la hora de ir a la universidad.
Lo recordaba alto, delgado y como un muy buen chico. Ante sus ojos era perfecto, pero realmente no destacaba.
Muchas veces lo había molestado con utilizar un peinado que no cubriera mucho su frente, sin embargo, Hoseok siempre se habia negado a ello. Se sentía más seguro con ese peinado y ni siquiera Surin le había hecho cambiar de opinión. Para ella, él era muy guapo a su manera, pero no era tan fácil hacer cambiar de opinión a un adolescente.
ESTÁS LEYENDO
❥Party, Party, Yeah! ⁀⋱‿ ♡▕Hơsєơƙ▏+18
FanfictionSurin y Hoseok fueron novios mientras ambos estudiaban en el mismo pueblo, sin embargo, al ir a la universidad sus caminos se separaron. Fue así hasta que Surin regresó a ver a su familia y por cosas del destino se toparon en la tienda de convenienc...