Esposa mía

Prólogo



Isabela Beak, la hija mayor del Barón Beak y de la difunta Baronesa Beak, podría parecer que tiene una vida resuelta, ya que se casó con el hijo mayor de una prestigiosa familia.

Sin embargo, ella es la única que piensa que no tiene suerte. Su madre falleció cuando ella tenía tres años debido a un envenenamiento, y meses después su padre llevó a casa a una mujer embarazada, diciendo que sería la nueva señora de la casa. A partir de la llegada de su madrastra, la familia Beak se endeudó demasiado, ya que los caprichos de esta mujer eran muy caros. Para resolver los problemas económicos, el Barón Beak comprometió a Isabela con el hijo mayor del Duque Trovi, quien buscaba una buena mujer para su hijo, una que no desafiara su autoridad, y aceptó la propuesta de matrimonio de la familia Beak.

Koshar e Isabela se comprometieron a los dieciocho años y se casaron a los veintitrés. ¿Era un matrimonio feliz? Para nada. Koshar parecía odiar a Isabela, ni siquiera pasaron la primera noche juntos, y eran muy pocas las veces en las que Koshar le prestaba atención a Isabela.

Tiempo después de la coronación de los emperadores, el Duque Trovi envió a Koshar a una región cercana a la frontera para evitar cualquier escándalo que pudiera perjudicar a su hermana. Sin embargo, no se imaginaba que su decisión perjudicaría aún más el matrimonio de su hijo.