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Siento como el frio me congela los huesos, abro los ojos para encontrar la misma oscuridad con la que me eh topado durante 17 años.

Me siento en el suelo en el que estaba acostada cuando siento una punsada en mi entrepierna, miro esta que esta cubierta de semen.

Me quito mi ropa, agarro la cubeta que trajo ese hombre, supongo cuando yo dormía y empiezo a lavar mi cuerpo.

Siento como el agua recorre mi cuerpo y recuerdo como sus manos lo recorrían como le plazca sin ningún derecho ni permiso.

Me echo agua en la cara, me pongo en pose fetal y empiezo a llorar por la desgracia de vida que me tocó, empiezo a llorar por que hace mucho se que ese hombre no es mi mate, por que se que el me quito lo más importante para una mujer siendo aun una niña, eso que solo era para mi mate.

Me levanto del suelo y voy al diminuto gavetero, saco un vestido blanco desgastado de los 3 que este contiene, me lo coloco y me siento en el suelo.

La marca que ese maldito me hizo me arde, siento unas ganas de ser libre que nunca antes sentí, siento ganas de correr por eso llamado bosque, sentir la tierra en mis pies, cosa que no es normal; ya que mi parte vampirica ni demoníaca tienen esa necesidad.

Mientras estaba concentrada pensando en ese extraño sentimiento escucho pasos ligeros que vienen  bajando la escalera, también escucho unos latidos descontrolados y huelo ¿miedo? Lo más extraño es de quien pertenece este olor

Levanto la vista y veo a ese hombre abriendo la celda, me mira a los ojos y me regala una sonrisa cargada de maldad mientras dice

-mi querida luna, en algún momento nos volveremos a ver, te encontraré.

Tiro un juego de llaves a mis pies, el mismo juego de llaves que me inpiden mi libertad.

Me dio una última mirada, me beso los labios, se transformó en lobo y salió corriendo por el mismo camino por el que se fue.

Cuando el se fue, recojo las llaves, primero suelto mis tobillos y muñecas, luego meto las llaves en la puerta, cierro los ojos y la giro, escucho un "clic" y el rechineo de la puerta al correrse, siento lágrimas negras recorrer mi rostro.

Enpujo la puerta y empiezo a correr escaleras arriba, cuando voy subiendo las escaleras escucho gritos, llantos, súplicas y un olor peculiar, al salir del calabozo veo una aldea en llamas, cuerpos por todos lados, veo lobos peleando contra un ejército de demonios.

Sigo el olor exquisito hasta un hombre, el hombre que está al mando de este ataque, un hombre alto  de cabello negro, ojos grises  y piel pálida como la mía.

Mientras lo miro, el busca algo con desesperación entre la gente, en eso sus ojos chocan con los míos, me regala una mirada confusa que rápida mente pasa a una de asombro.

Escucho como 3 voces en mi cabeza gritan ¡¡Mío!! Aunque espera...¿¿3 voces??

luna rota Donde viven las historias. Descúbrelo ahora