🧸Segundo trimestre 🧸

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Beomgyu había notado que su bebé lo miraba demasiado, tal vez era porque su estómago había crecido mucho o porque ya no lo podía cargar y el bebé tenía que gatear para llegar hacia él.

Claro que para Jungwon era molesto, su papá ya no lo cargaba o jugaba con el como antes, aunque le encantaba ver a su papi Beomgyu rellenito, parecía un osito panzón.

Ambos sonrieron al escuchar la puerta del departamento abrirse, Yeonjun seguramente ya había llegado y venía a mimarlos.

El primero en ir a su encuentro fue Jungwon, para esto trato de pararse y con ayuda de la paredes fue caminando hacia la sala donde su papi lo recibió con los brazos abiertos.

—Hola, mi amor —Yeonjun cargo al bebé que río por los besos de su papá.

Últimamente se había hecho muy apegado a él pues cuando llegaba a casa le daba mimos, lo cargaba y jugaba con el antes de dormir y eso le gustaba a Jungwon.

—Hola, cariño —Beomgyu se acercó a su esposo para besarlo —¿Cómo te fue hoy?

—Me fue muy bien, osito —Yeonjun acaricio el vientre del castaño —Te traje el pastel que me pediste

Beomgyu tomo con emoción la bolsa y saco su contenido.

—Muchas gracias, Junnie~ —Se acercó a besar la mejilla del mayor —Realmente tenía mucho antojo de esto.

Yeonjun sonrió al ver a su esposo comer el pastel, beso una vez más la mejilla de su hijo y lo dejo en la alfombra mientras el iba a la cocina a servirse un poco de sopa.

Jungwon trataba de correr de su papi, habían comenzado a jugar a las escondidas pero su trasero de bebé regordete no lo ayudaba mucho pues sentia que en cualquier momento se caería

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Jungwon trataba de correr de su papi, habían comenzado a jugar a las escondidas pero su trasero de bebé regordete no lo ayudaba mucho pues sentia que en cualquier momento se caería.

—¡Voy por ti, gatito! —Yeonjun se giró y miro alrededor de la sala, los piecitos de su hijo ya no se escuchaban y estaba seguro que el bebé estaba quieto en algún lugar de la casa.

Camino tratando de no hacer ruido con sus pantuflas y reviso cada lugar del departamento.

Confundido camino hacia la habitación del bebé, todo parecía silencioso incluso casi sale de la habitación hasta que un peluche cayó.

Rápidamente se acercó a la pequeña montaña y ahí encontró al bebé de espaldas tratando de pasar desapercibido.

—Te encontré~

Jungwon soltó una carcajada mientras su papi lo cargaba haciéndole cosquillas en su pancita.

—Bapa~! —el bebé tomo las mejillas del mayor y las apretó con suavidad.

—¿Te gustan mis mejillas? —El pelinegro hablo con dificultad pues Jungwon seguía jugando con sus cachetes.

—Bonito —El pequeño bebé se acercó y beso la mejilla del mayor, dejando un rastro de baba en el proceso.

Yeonjun río y llevo al bebé a la cuna para prepararlo para dormir.

—Muy bien, mi amor, es hora de dormir —El pelinegro comenzó a mecer al bebé de un lado a otro mientras cantaba una conocida canción para el bebé.

Siempre estamos juntos desde que somos jóvenes
Un verano caluroso cuando nos encontramos
Me he vuelto más alto
Y mi voz se ha vuelto más baja

De pies a cabeza aún no estoy acostumbrado a mí mismo
Me estoy volviendo incómodo tanto como mi altura para ti
Para ti mi amigo
Sin saberlo actúo como un hombre

En silencio cada noche
Mi altura y mis sentimientos por ti
Están creciendo mientras camino
Mis sentimientos por ti
Mi corazón
Es muy diferente al pasado

Jungwon había caído dormido, la voz de su papi Junnie lo había relajado junto al olor de recién bañado del mayor.

Yeonjun sonrió y dejo un beso en la frente del bebé antes de acostarlo.

Camino hacia su habitación donde Beomgyu acariciaba su pancita y le hablaba a la misma.

—¿Que tanto se dicen ustedes dos? —El pelinegro se recosto con cuidado y acaricie alrededor del ombligo del castaño.

—Solo hablábamos de Wonnie —Beomgyu sonrió levemente —Últimamente ya no es muy pegado a mi, aveces cuando quiero jugar con el solo se esconde.

—Bueno tal vez es asi porque ve que casi no te mueves y menos con esta barriguita, amor —Yeonjun beso el puchero que tenía su esposo —Esperemos que eso pase cuando nazca este bebé, que por cierto, no me has dicho que es.

Beomgyu sonrió y acaricio el cabello de su esposo.

—Te lo diré —El castaño miro a Yeonjun y le dió un beso antes de sacar una caja blanca de su cajón.

Yeonjun tomo el regalo con emoción y no tardo en abrirlo para ver su contenido.

Era un peluche color morado junto con unos zapatitos color rosa y la foto del último ultrasonido.

El segundo bebé sería una preciosa niña.

El segundo bebé sería una preciosa niña

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Holaaaaaaa

Disculpen si tarde en actualizar, abandone mucho está historia en los últimas semanas.

Pero espero estar más por aquí para pronto terminarla, aunque aún faltan muchos capítulos para eso >_<.

Tenía pensado poner a Ryujin como su segunda hija pero si tiene más opciones sean libres de comentarlas aquí, por favor.

Muchas gracias por leer y cuidense mucho <3.

Padres Primerizos - YeongyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora