Un Overlord diferente

Capítulo 10 Encuentro nostálgico

(Flashback)

Podemos ver a un pequeño esqueleto el cual estaba siendo apaleado con un grupo de bandidos, Momonga tenía poco nivel y había gastado mucha magia por lo que no podía defenderse con eficacia de los delincuentes, los cuales se divertían dándole patadas mientras Momonga intenta defenderse sin éxito.

-¡Acabemos con él de una vez!-

Dijo uno de ellos mientras el líder sacaba una espada de gran dureza y gran nivel mágico.

El pequeño esqueleto de repente presenció como alguien se acercó por detrás de esos bandidos humanos y con una espada de luz de corto el brazo al líder.

-¡Ahhhhhh! Mi brazo-

Grito mientras el resto de bandidos huían como si de ratones se tratasen y el líder a los pocos segundos también huyó mientras ese caballero de banca armadura se quedó mirando.

-¡Soy Touch Me y mi deber es salvar a los débiles!-

Dijo mientras hacía una pose extraña.

El Undead se quedó mirándolo con suma neutralidad, ¿Qué se supone que pretende ayudando siendo un desconocido?

-¿Estás bien pequeño esqueleto?-

Preguntó mientras la neutralidad del esqueleto si se convertía en extrañeza, ¿De verdad no se sorprende?

-¿Que buscas ayudándome?-

-No busco nada a cambio, ¡Es mi deber como defensor de los débiles!-

Ese supuesto defensor del bien parecía un tipo simple, su armadura blanca como la misma nieve, reluciente y hablaba sin rodeos ignorando totalmente que era un Undead capaz de hablar.

-Vamos, ven conmigo, necesitas ayuda, yo lo puedo notar-

- No necesito tu falsa amabilidad, nadie hace nada gratis-

Eso es algo que él aprendió al poco rato de emprender su viaje.

- Eso lo dices, pero en realidad si te vendrá bien mi amabilidad, no te arrepentirás-

Aunque no podía ver a través de su casco, se notaba mucho que estaba sonriendo, Momonga después de pensarlo decidió ir con él, necesitaba recuperar la energía mágica de su cuerpo.

-Está bien-

-¡Así se habla!-

Dijo mientras hacía otra pose extravagante y empezaba a caminar delante.

Touch Me, lo llevó hacia su hogar el cual era una pequeña cabaña en medio de ese bosque mágico en el que se encuentran.

- ¿De gusta? No es muy grande pero llega a ser cómodo si te acostumbras-

El defensor de la paz abrió la puerta por la que ambos pasaron aunque Momonga lo hizo con cierta desconfianza, preparado para gastar todas sus fuerzas que apenas se estaban recuperando, todavía era joven y él es consciente de ello.

En la casa nada más entrar te sorprende con una gran mesa que ocupa la mitad de la sala de estar, y luego tres pequeñas puertas que llevarían a la cocina, dormitorio y baño, o por la menor eso deducía.

-¡Sebas Tian he vuelto!-

Momonga estuvo a punto de irse al saber que Touch me no está solo, pero luego miró al defensor de la paz y llegó a la conclusión de que él no podría hacerle nada, o eso espera ya que no iba a huir.

Apareció un hombre de apariencia anciana, vestido como un mayordomo, bastante serio, su cabello blanco que representaba su edad y la experiencia que debe de tener y su mirada penetrante solo infundía respeto en quien le miraba.

-Veo que tiene un invitado Touch me sama-

- Exacto, lo encontré siendo atacado por unos bandidos, dejemos que pase aquí la noche para que descanse-

El mayordomo miró a Momonga con esa mirada penetrante mientras este solo podía mirarlo ya que al no tener piel su cara siempre refleja la misma expresión.

-Entiendo, en ese caso atenderé al Undead en caso de que necesite algo-

- No necesito nada-

Respondió rápido y conciso.

-¿Y como te llamas?-

Preguntó Touch me.

- Deidera-

Mintió, si, no quería revelar su nombre a alguien que acaba de conocer.

- Está bien Deidera, creo que no puedes comer y menos dormir, pero aún así aquí estarás seguro para recobrar las fuerzas necesarias, Sebas prepara la cena-

- Por supuesto-

Dijo y entró en una habitación que seguramente sería la cocina.

-Puede parecer un anciano amargado pero en realidad es de las mejores personas que he llegado a conocer nunca-

Al Undead le empezó a dar curiosidad sobre el hombre que tiene delante.

-¿De que raza es usted exactamente?-

Tocuh me hizo un amago se quitarse el casco, pero luego se arrepintió y no lo hizo.

-Solo diré que no quiero que nadie sepa mi identidad, ¡Soy un ANÓNIMO defensor de los débiles!-

Dijo mientras el esqueleto pensaba en más preguntas para recaudar más conocimiento.

-¿Y Sebas Tian?-

-Parece que eres más sociable de lo que pensaba y te quedas con los nombres rápidamente, (tose un poco) él pertenece a una raza un tanto curiosa, no diré nada más, me gusta ser misterioso respecto a eso, (suspira) lo conocí en la frontera entre el reino elfo y el reino demonio, al parecer lo habían arrestado por intentar asesinar a un noble demonio y por eso fue desterrado-

En ese momento de la historia Touch me se sentó para poder seguir más cómodamente mientras Momonga solo se quedaba se pie.

-y yo me lo encontré ya que estaba paseando por allí, me gusta viajar, él parecía decaído en la taberna elfa, todos huían de él debido al monstruoso poder que tiene, yo fui el único que me animé a hablar con él, quería saber porqué lo hizo, (suspira) él nunca me lo dijo, pero me contó una información tan ambigua que hasta a mí me costaba seguirle el ritmo a su relato con partes suprimidas, al final le ofrecí trabajo como mayordomo ya que no tengo tiempo, y han pasado ya muchos años desde ese día-

Momonga solo pudo quedarse fascinado por esa historia, seguía siendo un niño al fin y al cabo.

-Entonces yo seré quién consiga que cuente la razón-

Dijo con un tono de voz animado mientras Touch me solo podía mirarlo igual de feliz.

-(pensamientos) Este Undead es único, no solo en lo evidente, si se lo propone estoy seguro de que formará su propia nación, tendrá experiencias que contará a sus hijos, personas que le ayudaron a llegar a donde está, y yo quiero formar parte de esas personas-

Bueno hasta aquí el capítulo espero que os haya gustado si es así no olviden votar y si no decidme en que tengo que mejorar ahora sin nada más que decir adiós.