No tengo idea de qué estoy haciendo.
Tengo miedo, siempre tengo miedo.Miedo a fallar.
Miedo a darme cuenta de que no soy tan buena como lo pensé.
Miedo a que confíen en mí y termine decepcionado a todxs.
Miedo de ver qué tan capaz soy.
Miedo de hallarme a mi misma.Ese día me estaba cagando de miedo, literU al baño y casi te golpeo con la puerta al entrar.
-"Dios".
Dijiste moviéndote hacia atrás.
-"Perdón".
Sentí que me ardió la cara de la vergüenza. Seguía yo sosteniendo la puerta.
-"No te preocupes".
Tomaste la puerta para abrirla más y me cediste el paso.Te sonreí de lado y caminé hacia los cubículos, aún sintiendo el hormigueo en la cara.
Tu perfume olía demasiado rico.
Siempre he sido mala para saber de perfumes. No puedo usarlos, me causan alergia.Volteé hacia atrás para verte de nuevo. Habías hecho lo mismo.
Ese mini contacto visual sentí que me quemó.Me encerré en el cubículo y respiré profundamente varias veces antes de llegar a un ataque de ansiedad.
Seguía teniendo miedo.Gardenias.
No sé a qué carajos huelen las gardenias, pero mientras pensaría que tu perfume era de gardenias.
Gardenias.
Repetí después de cada respiración. Las suficientes hasta tranquilizarme.