Capitulo 41: salvar y huir.

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Shen jiu recorrió aquel lugar más tranquilamente, mirando detenidamente cuando habían cambiado el lugar, algunas partes viéndose más afectadas por el tiempo y por caos, shen jiu apretó sus labios haciendo una muñeca de disgustó, tanto recuerdo, tantas memorias, tantos bueno momentos juntos a su esposo....la mitad habían sido destruidos, shen jiu camino pesadamente por el antiguo sendero que lo llevaba hasta su acogedora casa de bambú, para verla destrozada con solo algunos escombros que servían como prueba que algunas ves fue una casa, el hombre suspiró y paso sus dedos por aquella madera de bambú quemada, su mente divaga de dónde como se encontrará shen yuan, si en el calabozo de aquella bestia siendo torturado en su lugar o sirviendo como esclavo sexual de aquel inmundo ser, shen jiu apretó sus puños y miro con odio al cielo, ya que en este momento estaba tan confundido, al no saber a quien culpar, al no saber que hacer, solo estaba esperando a que le dijeran que hacer, estaba completamente fuera de tiempo.

El hombre se quedó quieto y un sonido sordo se escuchó detrás de él, cuidadosamente se dio la vuelta y vio como una pequeña serpiente salía entre los arbustos con un objeto cargando, la serpiente frenó enfrente de aquel adolorido hombre y dijo el objeto, shen jiu dudo en tomarlo, pero al ver qué la serpiente se marchó, lo tomo con cuidado, al abrirlo sus ojos temblaron y su boca hizo un gesto de dolor, era un retrató de su esposo, de cuando era más joven y vivía en aquella cabaña donde ambos crecieron, shen jiu recordó aquellos dulces momentos con dolor, el sentimiento de culpa y tristeza que tanto esfuerzo había logrado suprimir desde que Tianlang Jun le contó la situación, al fin salieron, lloró lágrimas amargas mientras miraba aquel retrato de un sonriente shen Yuan.

Todo hubiera estado mejor si ellos nunca hubieran entrado a aquel pico, más aún si si destino aquí ya estaba marcado, debía cambiar la historia y evitar todo esto.

Todo hubiera estado mejor si ellos nunca hubieran entrado a aquel pico, más aún si si destino aquí ya estaba marcado, debía cambiar la historia y evitar todo esto

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–¡Vaya!¡Joven shen, no creí que el arte lo ablandara tanto! ¡Si le gusta tanto puedo dibujar otro para usted!– se escuchó una voz burlona.

Shen jiu miro molesto a aquella voz, viendo a una demonio celestial encima de una rama de un árbol alto, que lo miraba con simpatía.

–¿Tu dibujaste esto?– dijo pesadamente.

–fue un regalo de despedida para mí pequeña dama, antes de que fuera sellado– dijo de forma simpática.

–¿Pequeña dama?– shen jiu se veía reacio a ese nombre.

–¡Si!¡Así llame a mi pequeño gatito!¡Hablo de shen yuan por supuesto!¡Era tan lindo y pequeño en aquel momento!¡Parecía una pequeña dama!– se burló sabiendo de la relación entre shen jiu y shen yuan.

–¡Que!¿Mascota?¡Trataste a shen yuan como tú mascota!– dijo molesto apretando el retrato.

–¡Uy!¡Ten cuidado esas son unas de las pocas cosas que tenemos de él!– dijo preocupado hacia el retrato.

¡Ayuda!¡El villano me sigue!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora