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— e-en tonces tu.. tu no querías esto? — pregunto
— la verdad no, no es como si me encantará ser esto, pero fue el oficio de mi padre y mi abuelo, no puedo decepcionarlos, es el negocio familiar — suspiro — a mi realmente me hubiera gustado ser un compositor o un gran pianista — dijo soñado
— y porque no lo es?
— como? — confundido
— si, digo usted ya tiene la mafia, peor me imagino que sus hermanos también están a cargo de su mafia, porque no solo hacer las dos cosas, de todas formas sus hermanos lo apoyaran, eso es lo que hacen los hermanos — dijo suspirando y con la mirada perdida en un punto fijo
— si, podría pero y mi nombre? Todos sabrán que soy Min YoonGi el dueño de la mafia más poderosa de toda corea
— t-tiene razón, pero eso no explica el hecho de que usted está casado — refuño con enojo
— e-eso y-yo — suspiro — tienes razón, trate de evitar el tema un poco — dijo cabizbajo
— y bueno? Que tiene que decir a eso señor Min - bramó con enojo 
— ella y yo no somos nada, de verdad hablo en serio, entre ella y yo no hubo ni habrá nada, no es mi esposa, no es mi amiga, a lo mucho es conocida, pero ni a eso llegamos — dijo tratando de mirar a los ojos al menor
— c-como se que me dice la verdad? — pregunto con los ojos llorosos, a YoonGi se le partió el corazón al ver que el menor desconfiaba de el, y como no si después de todo esto, hasta el desconfiaría
— mírame — le dijo al menor, el cual solo bajo la mirada — JiMin mírame — volvió a decir, el menor subió sus mirada y su vista se fijó en la del pálido, sus ojos negros tan profundos los cuales se mezclaban sin su ojos color miel los cuales estaban brillosos por las lágrimas que recorrían desde sus lindo ojos hasta sus mejillas — JiMin, ella no es mi esposa, yo antes de estar contigo estuve completamente soltero, nunca eh tenido una relación seria, por el mismo hecho de mi trabajo, no quise arriesgarme por nadie nunca, no hasta que llegaste tu — suspiro — J-JiM-in y-yo T-te amo, te j-juro que no hay n-nada más importante en mi vida que tú, t-todo en mi vida era gris y vacío, hasta que llegaste tu, llegaste a ponerle color, diversión y felicidad a mi vida — dijo entrecortado por las lágrimas que salían de sus ojos y sollozos de su garganta — s-solo T-te p-pido una.. una oportunidad, haré las cosas bien, s-sin mentiras — prometió mientras que las lgrimas resbalaban de sus ojos
— y-yo no lo sé, t-tengo miedo
— d-de mi?
— que? No, no de ti, si no que, y si no funciona? Y no no soy lo suficiente para ti?
— no ,no digas eso, tu eres eso y más, JiMin sin ti, siento que no soy nada, estos ocho meses de relación fueron los mejores de mi vida, no, quiero imaginar que sería de mi sin ti — tomo delicadamente las manso del menor entre las suyas y depósito un beso en ellas — te amo, entiendes? Te amo, te amo más que a nada en este maldito mundo, daría todo por ti, hasta dejaría la mafia solo por ti — le dijo mientras se hacercaba e JiMin, su mirada nunca se despegaron, el pálido se iba poco a poco acercando, quedando así a pocos centímetros del pelirosa
— T-te amo, te amo mucho con todo y tú mafia, te amo — susurro cerca de los labios del pálido, el cual no perdió tiempo y unio sus labios con los del menor, formándose un beso, un beso que los dos necesitaban, un beso que sacaba a flote los sentimientos de los dos

Chasquidos era lo que se escuchaba en la sala del pelirosa, susurros que decían te amo, respiraciones agitadas, suspiros, risas

Eso es lo que se me escucha en este momento, un momento tan íntimo, que en sus ocho meses no habían podido experimentar, por pena, nervios entre otros

Estaban teniendo un momento tan romántico, lastima que fue interrumpido por una melodía de piano, el celular del pálido estaba sonando

— ig-nóralo — dijo YoonGi con la voz entrecortada por el agotamiento, mientras volvía a unir sus labios con los pomposos del menor, el pálido dirigió sus manos a la cintura del menor, dió un apretón sacándole un sonoro gemido al pelirosa, sus narices rozaban entre si, las manos del menor se hallaban en los hombros del mayor

La Mafia MinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora