Capitulo 06

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MARIELA

¿Que le pasa?

Me quita el celular y lo tira contra la pared rompiendolo en mil pedacitos. El gruido de romperse se escucha por todo el lugar. Pero que hizo, el celular no es mio y lo rompe.

Fulmina a la joven que me dio el celular y el solo se encoge bajando los hombros y la cabeza, y solo se va al fondo dejandome sola con Marcus.

Marcus me agarra del brazo con demasiada fuerza que me causa dolor.

─ ¡¿Que mierda crees que estas haciendo?!─ grita cerca de mi rostro aumentando mas la fuerza de su agarre. Mis ojos pican queriendo bajar las lagrimas

─ Sueltame me lastimas Marcus─ intento quitarme de su agarre, mi hermano jamas se comporto asi conmigo.

─ ¡¡NO!! hasta que me digas que estabas haciendo.

─ So- solo llamaba a nuestros padres─ digo sollosanso

Solo hace una mueca de disgusto─ Nos vamos─ me saca de la tienda sujetando de la misma manera mi brazo.

Abre la puerta del auto, me sube en el asiento del copiloto y finalmente  suelta mi brazo. Me sobo con las lagrimas en los ojos para que pase el dolor del agarre.

Marcus sube en el asiento del piloto, enciende el auto y empieza a conducir en direccion a su casa. Solo esta asi por que llame a mama, yo solo queria hablar con ella para decirles que estoy bien ya que llevo 1 semana desaparecida.

10 minutos demoramos en llegar a casa. Se queda en el asiento sin decir nada lo cual no dura mucho ya que empieza a golpear el volante  repetidas veces furioso, salto asustada.

─ No debistes hacer eso, no debistes llamarlos─ grita golpeando el volante con sus puños

─ ¡Detente Marcus!

─ Callate, callate, callate─ grita otra vez

─ Te estas lastimando─ sujeto su manos para que pare y lo consigo.

Me mira respirando entre cortadas─ ¿Por qué aun no lo puedes entender?

¿Que dice? ¿Entender que?.

Ni si quiera lo vi venir cuando ya esta pegando sus labios con los mios. Abro los ojos perpleja y aturdida por poco tiempo despues de unos minutos me doy cuenta de que Marcus me esta besando. Intento que me deje pero Él me sujeta del rostro para profundisar el beso.

¿Que demonios esta haciendo?

Subo mis manos hasta su pecho y lo empujo para que se aleje de mi pero no tengo tanta fuerza. Hasta que él mismo se aleja por si solo, trata de tocar mi mejilla pero lo golpeo su mano y me bajo enojada rapidamente del auto y menos mal su casa no tiene llave asi que entro escuchando a Marcus llamarme.

─ ¡Mariella!─ lo dejo ahi sin contestarlo

Subo por las escaleras hasta entrar al cuarto y me tumbo en la cama boca abajo mojando mis lagrimas la almohada. ¿Por que hizo eso?, ¿por qué lo hizo?, Somos hermanos y él me acaba de besar como sin nada.

Toca la puerta de mi cuarto ya que no puede entrar ya que esta con seguro.

─ Pequeña perdoname por favor─ dice del otro lado─ Abre la puerta, por favor.

─ Quiero estar a solas Marcus─ digo

─ Solo quiero explicarte lo que sucedio hace rato.

─ ¡Yo solo quiero estar sola, por favor!─ Grito enojada

─ Esta bien te dejo pero despues vamos hablar los dos─ Escucho sus pasos alejarse de la puerta.

No entiendo porque me beso y el por que no quiere que llame a nuestros padres. Ellos estan preocupados por mi y solo quiero llamarlo para que sepan que estoy bien pero lamentablemente Marcus no me deja, él cambio mucho y actua diferente, ya no es el mismo, ya no se comporta como si fuera mi hermano pero a pesar de eso lo quiero, lo quiero mucho.

No se cuanto tiempo paso solo me levanto de mi cama y salgo del cuarto buscando a mi hermano, bajo hasta la sala y ahi encuentro a Marcus sentado en el sillon con sus manos sujetando su cabeza.

Escucha mis pasos que voltea su cabeza para verme y se levanta de un salto para despues abrazarme acunando su rostro en mi cuello.

─ Perdoname por favor pequeña

Se que se equivoco y realmente siento que esta arrependido de lo que hizo.

─ No te preocupes, se que no volvera a pasar.

Nos sentamos en el sillon. Marcus agarra un vaso lleno de jugo que estaba en la mesa

─ Te prepare un jugo de naranja─ Me lo entrega en mis manos.

─ Gracias.─ empiezo a tomar el juego y me acuerdo lo que la noticia dijo─ ¿Llevo una semana contigo?

─  Si, ¿Por que los llamastes?─ se refiere a nuestros padres

─ Estan preocupados por mi ya que llevo una semana desaparecida sin ningun rastros─

Suspira a mi lado. Paso un tiempo conversando con él hasta que de la de la nada me siento muy cansada, mis parpados se cierran por si solo, me tumbo en los brazos de Marcus, voy a dormir un rato, solo un raro.

─ Duerme mi amor─ Susurra él acomodando mi cabello.

Marcus

Tan calmada y linda mientras sus ojos se cierran por completo. A veces dan ganas de encerrarla en ese lugar para tenerla solo para mi y que pueda sentir lo mismo que yo pero ver su hermosa apariencia me calma.

Acarricio su mejilla sonrojada mientras se acurruca en mi pecho para que duerme mejor. Su respiracion es lenta y relajada, puedo hacer cualquier cosa y ella no se va a despertar. Aun funciona esa droga para mantenerla dormida, lo utilizaba cuando era niña y aun lo hago.

Es hermosa y bella cuando duerme, tan quieta y sumisa en mis brazos. Solo yo puedo verla asi, solo yo por que es mia, mi vida y mi mujer.

Me levanto del sillon con mi pequeña en mis brazos.

─ Señor─ llama la maldita sirviente que esta parada en la entrada.

Aun me debe algo. La miro y ella baja la cabeza en sumision, sabe lo que a hecho y lo que lo espera.

─ Lo siento y-yo n-o─ Me desagrada la lastima de las personas

─ No quiero tus quejas asi que callate─ ordeno subiendo las escaleras.

Llego a nuestro cuarto ya que realmente es de los dos, duermo aqui  pero ella no se da cuenta debido a que me levanto temprano y que Mariella tiene un "sueño" muy pesado.

Solo puedo dormir con ella en mis brazos, oler su aroma, acariciar su piel y admilar su belleza.

La dejo en la cama para cambiarla, le quito esa ropa que la idiota de Arlin le dio, le dije claramente que nada de provocativo ni ajustado y ella que hace, le da una ropa provocativa y ajustado.

La dejo solo en bragas y en sujetador. ¡Mierda! ya tengo una ereccion, mi pequeña es hermosa y bella nada comparado a las antiguas mujeres que tenia.

Su pureza y su luz es lo que atrae a mis demonios internos. Acaricio su rostro, poco a poco la beso en los labios, tan suaves y pequeñas, es un manjar delicioso.

─ Te amo─ digo separandome de sus labios.

Espero que ella tambien me ama o utilizare la otra formas para que lo haga.

Algo todo lo posible para separarme y lo consigo, me alejo de ella, voy al armario, la abro y saco una camisa mia.

Le coloco la camisa a mi pequeña. Necesito un baño justo ahora, me levanto pero me quedo tieso cuando mi pequeña habre su linda boca y pronuncia ese desagradable nombre.

─ Samuel

Aprieto mis manos y mi mandibula
tan fuerte que se van a quebrar, es una maldita, una zorra, te voy hacer olvidar ese nombre a las buenas o a golpes. Solo vas a pronunciar mi nombre solo el mio, vas a saber a quien perteneces Mariela y sabras que eres mia.

Tu eres mia, tu cuerpo, tu mente, tu alma y tu corazon son mios y me vas a amar mi luz.

No como tu hermano sino como tu hombre y matare a cualquiera que quiera alejarme de ti y empezare por ese Samuel.

Eres mia Mariella solo mia.

EncerradaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora